Deportes Concepción mantuvo su base 2024, contrató fuerte y trajo goles. ¿Dónde falta reforzarse a esta nueva escuadra de Suárez? Los lilas se preparan para dar el gran golpe en su ascenso a Primera B.
No es fácil armar un plantel competitivo en el escenario anómalo que ha vivido Deportes Concepción. Renovando jugadores apelando solo a la confianza, con meses sin saber en qué división jugaría y apostando fuerte a no ser un equipo ascensor, después de todos los años y penurias que costó retornar a Primera B. Ha sido un verano de locos y la dirigencia morada está apostando fuerte. El hincha tiene derecho a soñar en grande.
Nicolás Araya, a sus 25 años, tuvo un 2024 consagratorio y se quedó. Su competencia será otra vez el experimentado Joaquín Muñoz, que no jugó en todo el segundo semestre. Con los tres palos cubiertos llama la atención una posible llegada de Brayan Manosalva, que el año pasado defendió en 10 oportunidades a San Joaquín y el 2023 ya estuvo en la tienda lila.
El León amarró dos zagueros centrales de recorrido y oficio, incluso en Primera. Diego Carrasco estuvo recientemente en Coquimbo, O’Higgins y la “U”. A él se suma Fernando Cornejo, de pasos por Unión Española, San Luis y Recoleta, entre otros. Ninguno supera los 30 años y están absolutamente vigentes. Cubriendo el centro de la defensa también se encuentran Sebastián Silva, puntal de la última campaña, y Diego Zambrano.
Como laterales siguen los titulares de 2024 Claudio Fernández y Felipe Saavedra, además del zurdo Jonathan Espínola. A ellos se suma el joven Nicolás L’Huillier, pero faltaría otro por derecha.
En la zona media, Manuel Suárez contará con el talentoso Nelson Sepúlveda, que jugó las 4 últimas temporadas en Primera y fue campeón con Cobresal el 2015. Otro creativo que puede ser extremo es Brayan Valdivia, a quien el DT ocupó bien cargado a la derecha el 2024.
Como extremos netos aparecen Ulises Ojeda, Fabián Núñez y el retornado Gary Tello. Tipos hábiles que pueden alimentar al centrodelantero de turno.
Pero en la contención es donde aún el plantel se queda corto, manteniendo al buen Sebastián Martínez y a su lado Frabrizio Manzo, que es más un “8” clásico. Otro hombre de corte aparece como una necesidad prioritaria.
Se retiró el histórico Gabriel Vargas y se fue Ignacio Mesías, máximo goleador de la serie el 2024, con 19 conquistas. Había que comprar goles y la directiva morada rápidamente puso manos a la obra.
Tempranamente aseguró a Ángel Gillard, de 22 años, y máximo artillero de Fernández Vial. Pese a la oscura temporada del vecino, el argentino se las ingenió para marcar 9 goles y totalizó 19 tantos en su paso por la tienda ferroviaria.
Pero aunque el joven atacante seguramente dará pelea por el puesto, la idea es sumar dos tanques en el juego áereo y luego habrá que ver cómo funcionan juntos. Se quedó Carlos Escobar y a él se unirá Joaquín Larrivey, centrodelantero trasandino de 40 años que viene de ser figura en Magallanes. En nuestro país luce marca de 63 goles en 103 partidos.
Ahí arriba faltaría otra pieza para tener alternativas y no se descarta otro peso pesado extranjero, pero hasta ahora, este León pinta bravísimo.