Jaime García vuelve a dirigir en Primera y apuesta a su sello motivador para dar a Huachipato lo que logró con Ñublense. El 9 de diciembre comienza su trabajo en cancha.
Jaime García tiene 47 años, 13 de ellos como futbolista (se retiró en Lota Schwager) y 8 como técnico. En Ñublense marcó una época y extrañamente el fútbol pareció cerrarle varias puertas. Viene de dirigir a Wanderers en la B, pero ha vuelto a Primera. Huachipato confió otra vez en el estratega.
Presentado por los acereros declaró que “este es un equipo de expectativas altas, que hace poco fue campeón y prometer algo es muy difícil. Soy una persona natural, transparente y que viene a darlo todo. A la hinchada solo puede decirle que crea, que confíe en este proceso. Estoy contento de reaparecer… Soltaron el muñeco (bromeó)”.
De su nuevo club, advirtió que “Huachipato tiene muchos cadetes y jugadores de selección, un trabajo de fondo del que carece el fútbol chileno. Vienen trabajados y no me va a costar darle una oportunidad a estos jóvenes. Hay buen equipo, con los que tienen contrato ya se puede armar algo muy lindo. Mi tarea es cómo sacarles el mejor rendimiento. Yo soy ganador, pero este es un proceso”.
No puede ni quiere ocultar su sonrisa e indicó que “mi carrera ha sido de menos a más y en Ñublense fueron los años más lindos en lo personal. Hay cosas que uno hace bien o hace mal, pero trato de ser derecho y por eso cuando no salen las cosas eso no mancha mi carrera. Los errores te hacen madurar. Aquí el que se va adaptar soy yo y mi formas de jugar es muy parecida a lo que busca Huachipato. Creo que tendremos un equipo muy rápido, muy veloz y los que vengan tienen que aportar a los que ya están”.
De su regreso a Primera expresó que “cuando estuve en el sarcófago, me llamó Wanderers, que es una institución muy linda y lo agradezco. Uno sabe lo que hace y esperaba que algo como Huachipato iba a ocurrir. He ido cumpliendo de a poco mis metas en el fútbol y ahora el fútbol me puso donde me tiene que poner. Uno está para dirigir donde lo llamen y esta nueva tarea es linda, pero será dura. El equipo debe encontrar su sello y reencontrar sus objetivos. Buscar esa cuarta estrella”.
García agregó que “al plantel le quiero aportar confianza, volver a creer, ponerme delante de un plantel y que mi voz los motive. Es fundamental para que funcione el mensaje. El 9 de diciembre ya empezaremos a trabajar. ¿Cris Martínez cortado? Es difícil hablar de jugadores cortados, sí hay algunos que uno saca por diferentes motivos. El 9 evaluaré, pero por ahora todos los que tienen contrato son importantes. En cada institución dejé algo, como en Ñublense, y ojalá en Huachipato pudiera hacer lo mismo”.
El nuevo controlador del club, Hernán Rosenblum, señaló por su parte que “es un placer que Jaime esté aquí, nos unen varios años trabajando juntos, con hartos éxitos. Este es un club modelo y el deseo de todos es luchar siempre en lo alto del campeonato y volver a jugar torneos internacionales. Jaime es un amante de dar oportunidades a los chicos del club, a los jóvenes”.
El ex Ñublense apuntó que “es difícil competir con los equipos de mayor convocatoria, la cancha no está pareja. Llevo 15 años en el fútbol y me preparé para esto, con Jorge (Correa) nos conocemos hace 15 años y queremos hacer una dupla temible en el fútbol chileno. Estamos armando un equipo que trabajará en el éxito. Uno no sale campeón gratuitamente y cuando estás abajo también hay que evaluar qué hiciste mal”.
Sobre su relación con la comunidad, sostuvo que “este club nace de la siderúrgica y hay una obligación que debemos asumir. No conozco bien la hinchada del club, pero la veo respetuosa de su insignia y veremos la forma de acercarnos más. Darle alegría a la gente que lo pasa mal. Vi a Coldplay en la camiseta de Barcelona y me imaginé a Los Bunkers en la de Huachipato. Veámoslo, hay cosas que se pueden hacer teniendo hinchas de esa envergadura. Soy fanático de su música”.
En tanto, el gerente Jorge Correa, afirmó que “apenas salimos campeones comenzó la intención de venta y hace 6 o 7 meses conversamos regularmente con Hernán. Es muy distinto adquirir un equipo que está en Primera a uno que está peligrando el descenso. Esto tomó forma cuando nos salvamos matemáticas, después de Everton. Es casualidad que el tema de la multipropiedad esté en boga y que esta venta se haya concretado”.