El Vial de Ortiz es durísimo: ya van 410 minutos sin recibir goles

El Inmortal tenía importantes bajas en defensa, pero otra vez se las arregló para dejar su arco en cero y se trajo valioso empate desde cancha del sublíder Puerto Montt. Hizo un gran segundo tiempo.

Enfrentaba al sublíder, al equipo con la valla menos batida y llegaba con una inédita defensa, por las bajas de Solano, Jerez y Kimura. Con todo en contra, como ya es un sello esta temporada, Fernández Vial rescató un valioso 0-0 en cancha de Puerto Montt y hasta se animó a algo más en la parte final. El resultado no es nignuna casualidad: de la mano de Sebastián Ortiz acumulan 4 fechas sin derrotas y 410 minutos sin recibir goles.

El primer tiempo se jugó al ritmo del local, que presionaba muy arriba y no dejaba salir a Vial. Así llegó un tempranero remate al poste de Sebastián Pérez y un buen zurdazo abajo de Troncoso que tapó el siempre confiable Nery Veloso. Pero a no engañarse, que este no fue uno de esos partidos donde ametrallaron al portero ferroviario para que salvara el juego. La defensa hizo una labor impecable, una línea de cuatro altamente de emergencia, pero muy bien trabajada.

Sin ir más lejos, Felipe Robles fue una de las grandes figuras, anticipando siempre, poniendo fiereza. Lo mismo corre para esta nueva versión de Luis Muñoz, que como defensa central nuevamente fue impasable, gana todo por arriba y también se anima en los balones aéreos en ataque. El cero defensivo, se explica por un trabajo de conjunto.

No es un misterio que Puerto Montt juega bien, que pone la pelota al suelo, que intenta mucho por la izquierda con Harold Antiñirre. Ni con todo eso, fueron capaces de generar más opciones claras de gol. En el segundo tiempo, prácticamente ninguna. Jorge Orellana y Julio Zúñiga corrieron muchísimo, también rasparon cuando era necesario, sin poner en riesgo que el equipo quedara con diez.

¿Y si lo ganamos?

El segundo tiempo fue distinto porque la posesión del balón y el control del juego seguían siendo del local, pero chocaban con el muro vialino que ahora tomaba la pelota y se animaba a una contra que encontraba espacios.

La primera del cuadro de Sebastián Ortiz fue con un remate de Job Bogmis al primer palo, que bien sacó Luis Ureta, portero que también tuvo que jugarse la vida achicando en una entrada de Ángel Gillard tras una mala cesión atrás del defensa Maximiliano Riveros.

Un partido que era para firmar el empate, Vial lo estaba jugando con tres delanteros, cuando el técnico se atrevió un rato con Gillard, Pablo Pereira y Cristóbal Díaz. Este último tuvo la mejor oportunidad a minutos del final encarando tras gran jugada de Alexander Concha -otro que entró bien- pero Ureta contuvo su derechazo.

Vial toma forma y los jugadores están respondiendo en cancha. Ahora no hay ninguna excusa para no cumplirles afuera.