Ema Parra lleva dos años corriendo y ya no hay quien la alcance rumbo a un sueño
25 de Marzo 2024 | Publicado por: Paulo Inostroza
Alumna de los Sagrados Corazones probó varios deportes hasta que se dio cuenta que el atletismo y la velocidad eran lo suyo. Fue a los Juegos de la Araucanía, este año quiere repetir y en un futuro entrar a la UdeC. Una chica de distancias cortas, pero metas grandes.
Aveces cuesta un buen tiempo descubrir cuál es tu real talento. Cada niña y cada joven tiene sus tiempos. Ema Parra Muñoz intentó con varias disciplinas, como toda su familia, y hace un par de años decidió que la velocidad era lo suyo y se lo tomó en serio. Tanto así, que ya consigue sus primeros logros, viajes y empieza a soñar en grande. ¿Por qué no? A los 15 años tiene mucha pista enfrente.
La alumna de los Sagrados Corazones expresó que “practico desde el 2022 y me metí porque mi hermano también estaba ahí. Me motivaba verlo entrenar y también me ponía como objetivo un día ganarle. De a poco, mi entrenador Edgardo Molina me fue inscribiendo en torneos y yo no sabía nada. Mi profe y también mi hermano me iban enseñando, dando consejos”.
Y explotó rápido. “El año pasado logré llegar al escolar nacional en la serie Sub 14 y este año fui a los Juegos de la Araucanía.
Nunca pensé que todo se daría tan rápido y ahora mi meta es estar el 2024 otra vez en los Juegos de la Araucanía y poder participar en la Copa Soprole, ganar la Copa Chillán”.
Tiene claras sus pruebas favoritas, pero también hay tiempo para sumar dificultad. Ema contó que “lo mío es la velocidad, los 100 y 200 metros. Me acomodan los 100 porque siento que tengo esa explosividad que es mejor para distancias cortas, aunque he desarrollado la resistencia y así fui subiendo a 200, que también me viene súper bien. Muy rara vez he corrido 400, pero son cosas muy distintas. Antes hice gimnasia, ballet, básquetbol, taekwondo y el atletismo siempre lo miré como un juego. Hace dos años ya me lo tomé más en serio”.
Le acomodó más que las disciplinas colectivas. “Me gusta que sea un deporte solitario donde me puedo medir constantemente y dependo de mí, de mi trabajo y lo fuerte que practique. Si pierdo fue mi culpa y si gano también. Entreno tres días a la semana con mi profe, en el colegio, una o dos horas. Combino bien el deporte con los estudios, aunque tampoco soy una alumna tan destacada ni de ese perfil, pero mi promedio tampoco es una aberración. Salvo bien”, señaló.
Es de Hualpén y puntualiza que “corro por el club Sagrados Corazones. Mi sueño más inmediato es un oro en los Juegos de la Araucanía y ojalá un día conseguir una beca deportiva en la UdeC. Mi mamá hace levantamiento de pesas, mi papá es muy de la bicicleta y mi hermano mayor practica calistenia, mi otro hermano es atleta y mi hermana más chica ya nos está copiando. Compartimos este estilo de vida”.
¿Y qué significa el deporte para ella? Ema expresó que “es una terapia para mantenerse bien en todo sentido y una oportunidad para conocer personas, lugares, vivir experiencias que no te da ninguna otra cosa. Nunca pensé en estar en los Juegos de la Araucanía, con gente de tantos lugares, todos distintos, cada uno con su historia. Eso lo encuentro maravilloso”.