Lo que dejó la temporada 2023 del tenis de mesa a nivel universitario

22 de Enero 2024 | Publicado por: Diario Concepción
Fotografía: Carolina Echagüe

Una participación de 44 jugadores en la Región del Biobío tuvieron las competencias de Adesup. Si bien sus protagonistas valoran cada encuentro, aseguraron que se realizaron muy pocos torneos, con una menor participación femenina. Para este año, se esperan dos campeonatos nacionales.

Soffia Araneda Muñoz

Cada período deportivo presenta tanto aspectos positivos como negativos, acompañados de nuevos desafíos. Para la Agrupación Deportiva que reúne a establecimientos de Educación Superior en la Región del Biobío (Adesup), el año 2023 no fue la excepción. Trajo consigo la vuelta a la presencialidad al 100% y disciplinas como fútbol, básquetbol, balonmano, futsal, voleibol, rugby, tenis de mesa, natación, atletismo y el taekwondo se presentaron en la última temporada.

Para una de ellas el retorno fue complejo. Se trata del tenis de mesa, donde se enfrentaron la Universidad del Bio-Bío (UBB), Universidad de Concepción (UdeC), Duoc UC, Universidad Federico Santa María (USM) e Inacap. Se realizaron cuatro fechas, lo que sin duda es un aumento positivo respecto a las dos convocatorias del año 2022.

Sin embargo, las de la última temporada se desarrollaron sólo durante el segundo semestre, lo cual, para la entrenadora de la selección de la UdeC, Pamela Espinoza, apresuró las competencias.

“Estuvo mejor que en temporadas pasadas, solo que fue todo muy encima. Hicieron todo al final y a la rápida, por decirlo de alguna forma. Trataron de terminarlo de la manera más rápida posible porque se estaba acabando el año. Se pudo haber repartido de mejor manera el calendario, para que los chicos pudiesen llegar a las competencias nacionales más preparados”, señaló.

Sobre la participación, la entrenadora destaca el desempeño que hay en la zona. “Ha ido subiendo el nivel de participación. En general es un buen nivel el que hay en la Región. Este año se suman nuevos jugadores que entran a la universidad y que son un buen desafío para todos los jugadores que ya se encuentran compitiendo a nivel universitario”, agregó. Un logro importante para la casa de estudios es que el equipo masculino obtuvo el segundo lugar a nivel regional.

Una arista preocupante que desanima la competencia femenina es la escasa representación, con tan solo dos equipos en Concepción conformados por mujeres. Un evento lamentable para las jugadoras de la UdeC fue la primera fecha a la que fueron convocadas, ya que ningún rival apareció.

“Las chicas se presentaron a sus competencias pero en Concepción tan solo hay dos equipos de damas, UdeC Y Duoc UC. Entonces en la primera fecha en la que llegamos no se presentó nadie aparte de nuestra selección y las chicas quedaron desmotivadas, porque no tuvieron nadie con quien competir. En la penúltima llegó un equipo de damas pero igual fue solo uno, entonces quedaron desmotivadas porque no tienen roce a nivel local”, señaló la entrenadora. Por lo tanto, uno de los objetivos para la próxima temporada es que más universidades puedan formar equipos y se genere una mayor competencia femenina.

En lo que respecta al nivel de competencia, la selección de la UBB, integrada por ocho jugadores, destacó durante la temporada, pues se alzó con la victoria. No es sorprendente, considerando que ha logrado el primer lugar durante los últimos 10 años y para esta ocasión, se consagraron como campeones regionales.

Su entrenador, Carlos Vega, se siente orgulloso de este logro y destacó el compromiso de los estudiantes. “La responsabilidad primero que nada, a veces es un día completo de competencia, donde pudieron haber dedicado ese tiempo a sus estudios. En el desempeño técnico excelente, bien como todos los años. Logramos los objetivos que nos propusimos para este año, que era nuevamente salir campeones y poder representar en alguna eventualidad a la Región”, dijo. Espera obtener resultados similares en el próximo período, especialmente a nivel nacional.

Al igual que la entrenadora de la UdeC, el profesor Carlos Vega no está de acuerdo en que las competencias se realicen sólo durante el segundo semestre del año, pues debería ser anual al igual que en los demás deportes.

Al respecto, desde una mirada analítica señaló que: “No me parece. Dentro de lo que es la visión crítica, una competencia a nivel universitario debería ser todo el año, desde el primer semestre darle participación a los estudiantes y poder ir evaluando día a día para ver los arreglos que hay que hacer. Pero acá se llama durante el segundo semestre y no tienen la posibilidad de hacer ajustes estratégicamente. No es como los demás deportes que están todo el año en torneos y a nosotros nos ponen dos fines de semanas a hacer una maratónica competencia y a veces jugamos cuatro partidos seguidos. Para todos los deportistas es mejor tener un calendario continuo”, agregó el entrenador.

UdeC en el juego

La selección auricielo, constituida por 15 jugadores, se enfrentó a diversos escenarios, pero finalmente lograron sacar adelante la tarea y junto a su entrenadora esperan con ansias el próximo período. Para Pamela Espinoza, uno de los principales desafíos fue la llegada de jugadores nuevos al equipo.

Al respecto, señaló que “fue complejo en cierta parte más que nada porque venían varios jugadores nuevos integrándose al equipo. Entonces fue todo un tema, en el sentido de que se sintieran cómodos, que fuesen tomando confianza para competir”.

Respecto a las metas que tenían para el año 2023, está satisfecha, pues obtuvieron buenos resultados en cuanto a la integración de los estudiantes.

“Unificar el equipo, esa es una de las mejores cosas que se ha podido lograr. En varones obtuvieron su segundo lugar, que el año pasado fue tercero, entonces es un avance, que los jugadores antiguos aceptaran a los buenos”, agregó la entrenadora Pamela Espinoza.

Un ajuste importante que dejó la temporada pasada para el desempeño de la selección, fue la implementación de nuevas estrategias de entrenamiento y métodos presentados por su preparadora, con el objetivo de que la selección fuese algo más que ir a “entretenerse” un rato.

“Empecé a pedir más asistencia, puntualidad, respeto y estructurar los entrenamientos. Comencé a hacer los entrenamientos cerrados, por lo general permanecían abiertos entonces era un desorden”, dijo.

Voz de los jugadores

Por un lado, pese a contar con un sólo rival, para la tenismesista de UdeC, Constanza Pino Hernández, estudiante de tercer año de la carrera de Bioingeniería, fue una buena temporada. Destacó los entrenamientos y el juego que hay en la universidad diciendo que “a mi parecer hay un alto nivel de juego de tenis de mesa en la universidad”.

En esa línea, agregó que “los entrenamientos son bastante completos y personalizados en algunas ocasiones. Es algo que se agradece bastante porque cada jugador tiene un estilo diferente de juego. Eso también nos beneficia como equipo de universidad para tener una amplia gama de estilos y para barajar frente a otras universidades”.

Pero también señala que hay aristas que se pueden mejorar a nivel de juego, entre ellas, la recepción de servicios. Además, resaltó ambos equipos de la selección. “Siento que había muchas cosas que se podían mejorar, como la recepción de servicios, el poder cerrar el juego, que es cuando quedan pocos puntos de los sets para terminar bien el partido y ganando. Los chicos tenían muy buen nivel en el nacional y las chicas en el juego de dobles”, agregó la estudiante.

Al mismo tiempo, está expectante por la próxima temporada que se viene, pues espera llegar a más torneos y competir contra más universidades, con distintos estilos de juegos para perfeccionar su técnica.

Por otro lado, para la jugadora auricielo y estudiante de Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales, Valentina González, las competencias no fueron suficientes y lo vio reflejado en la preparación del equipo.

“Sinceramente esperaba más instancias competitivas. Solo tuvimos el segundo semestre, que fue más que nada nacional. Nosotras no nos sentíamos muy preparadas porque en el primer semestre no jugamos con nadie externo. Entonces, al encontrarnos de golpe con mujeres con un nivel alto, nos sentíamos más o menos”.

Por lo que, al igual que su compañera Constanza, para este 2024 espera tener más instancias para competir y mejorar el nivel de juego. Lo que más le motiva a la jugadora Valentina es la posibilidad de la realización de dos campeonatos nacionales en el año.

Y por último, desde la voz del equipo masculino, el jugador y estudiante de Educación Física de la misma casa de estudios, Joaquín Martínez, también se suma a las palabras de sus compañeras, pues lo que más espera es que las fechas sean más continúas y puedan jugar más veces durante el año.

Sobre su desempeño, cuenta que tuvo dificultades pero de todas formas logró sacar adelante la competencia.

“Las condiciones por equipos me jugaron en contra, tenía más presión, ya no se jugaba individual como estaba acostumbrado, empezaron las frustraciones por no poder rendir al igual que antes pero dentro de todo igual pude lograr un desempeño bueno en el campeonato nacional al igual que las competiciones universitarias”, señaló el estudiante. Etapa en la que fue muy importante el apoyo de toda la selección y principalmente de su entrenadora, quienes lo ayudaron a compatibilizar su horario y rutina.

Sus motivaciones son llegar al nacional y rendir más que la temporada pasada. Seguir en el podio y disfrutar el tenis de mesa, como siempre lo ha hecho.

Desafíos 2024

No cabe duda que lo que más se espera de la nueva temporada para el tenis de mesa en Adesup, es que se realicen fechas con continuidad durante el año, para que los jugadores puedan mejorar periódicamente y que eso se vea reflejado en los encuentros.

Entrenadores y jugadores afirmaron que fue un panorama un tanto desalentador tener poca actividad. Al mismo tiempo, un hecho que esperan con ansias es la realización de dos campeonatos nacionales, los cuales conforman parte de sus desafíos.

Para el entrenador de la UBB, Carlos Vega, se viene un semestre complicado, debido a que algunos de sus jugadores dejarán el equipo.

“Está difícil la participación.En mi selección hay algunos alumnos que se están despidiendo de la universidad porque están egresando, entonces tengo que ver quién llegó y ver si tiene buenas condiciones, anexar a la selección y ver lo que tenemos respecto a las otras universidades. La idea es que estemos otra vez dentro de los diez primeros. La meta va a ser tener el equipo y estar posicionado en los primeros lugares”, dijo.

Respecto a la selección de la UdeC, uno de los objetivos que se propuso la entrenadora Pamela Espinoza es mejorar el sistema de dobles señalando que “es algo que de repente cuesta un poco. No se entrena tanto a nivel universitario y hay que darle un poco más de relevancia este año”. Y por supuesto, al igual que para el preparador Carlos Vega, mantenerse en el podio y llegar a los nacionales son sus principales metas.

Y por último, también se espera que se genere más competencia femenina, ya que es un hecho que desmotiva y preocupa a las tenimesistas. Pues, lamentablemente, afecta en su nivel de juego.