Una historia escolar que culminó con el vóleibol en lo alto. Valentina Medina tiene 17 años y cerró un 2023 impecable a nivel académico-deportivo. Fue una de las jóvenes destacadas por Adicpa, tras una buena temporada, en su caso, en el Colegio Sagrado Corazón.

Su inicio en el voleibol no comenzó tan temprano a nivel escolar. Ella misma cuenta que “partí en séptimo básico, hace 6 años. Tuve que parar por la pandemia y todo el encierro. Siendo sincera, empecé en este deporte por seguir a una amiga que practicaba y queríamos estar juntas. La seguí y de inmediato me enamoré del deporte. Después ella se fue, pero yo seguí por mi cuenta y así he ido saliendo adelante. Me encanta el vóley”.

¿Tenía nociones del vóley? Valentina recuerda que “había jugado antes, pero como todo novato que juega por diversión o en clases. Eso nomás. Al principio era nada … sacaba mal y con suerte corría. Séptimo fue puro aprendizaje y partir desde cero, pero en octavo viví un cambio de realidad donde me empeñé en mí misma a mejorar. Lo hice porque me gustaba el deporte y me esmeré en seguir adelante. En séptimo la profe era más relajada, nos enseñaba a partir de lo básico y de ahí seguir. Pero, en octavo, tuve una profe más estricta y con ella pude desarrollar más mis capacidades. Aprendí otras técnicas, mejoré y pude salir adelante. Eso me motivó muchísimo, sobre todos sus consejos”.

Pero como en el deporte suele ser un reflejo de la vida en torno a los buenos y malos momentos, Valentina sufrió con la pandemia en un momento donde iba en plena alza. “En primero y segundo medio no pude hacer nada, justo llegó la pandemia. Igual en la casa tenía una pelota que me habían regalado para el cumpleaños, entonces para tratar de moverme algo jugaba sola y la tiraba al techo para no perder la costumbre”, revela, agregando al respecto que “fue fome que se haya cortado todo por la pandemia, pero como me gustaba tanto el deporte, no fue un cambio tan brusco. Seguí adelante, aunque había tenido un accidente anteriormente y por ahí el tiempo de inactividad me hizo retroceder. Tuve una inflamación en los ligamentos de la rodilla izquierda y en tercero medio volver desde cero casi, me costó. Fue un largo tiempo sin actividad física y me exigí a mi pierna por todo lo que no hice en dos años. Me sentía un poco endeble”.

En torno a su 2023, su último año deportivo a nivel escolar, Valentina comentó que “fue bueno. Me sigue gustando mucho el deporte, avancé bastante, casi no tuve lesiones y espero seguir adelante. Compatibilizaba bien el deporte con los estudios, trataba de no dejar tareas extras para la casa. las hacía en el momento, cosa de enfocarme 100% en el deporte. A veces igual hay carga porque no alcanzaba a hacer todo, pero intentaba dejarla afuera en los entrenamientos, liberando el estrés y descargándolo en la pelota. Era clave organizar bien mis tiempos”.

Fue un año especial, con los Panamericanos 2023 de por medio que tuvieron como gran protagonista al vóley. “Fue lindo ver que otro deporte además del fútbol sea visto en grande. Intentaba ver muchos partidos y se siente emocionante ver puntos largos, saques potentes, remaches … daba hasta ansiedad. Espero seguir con el vóley por muchos años”.