Minuto 98’, Fabián Neira convierte el 1-1 desde los doce pasos y le grita el gol a Gabriel Merino, portero de Naval. Jugadores de ambos bandos se enredan en una pelea que no paró ahí, porque hinchas de Gol y Gol y gente del staff técnico entraron a la cancha. El ancla pidió los puntos, pero no le fue tan bien. Cinco elementos castigados para el cuadro chorero y siete para el dueño de casa, incluyendo al kinesiólogo. Sanciones que van desde los 2 partidos a los 6 meses.
Por parte del equipo de Alejandro Pérez, los castigados son Sebastián Garretón, Bryan Paredes e Ignacio Flores, con dos encuentros. Más dura fue la pena para Gabriel y Alexander Merino, con 4 meses fuera de acción.
El presidente navalino, Edógimo Venegas, apuntó que “se veía venir porque el informe del árbitro es lo que aquí prevalece. Ahora vamos a apelar, por jugadores que no habían sido nunca sancionados, y es el momento donde el equipo debe demostrar que está capacitado para dar la pelea más allá de las bajas. Hay que jugar los partidos y jugarlos a muerte, no cambia nada el objetivo”.
Sobre la posibilidad de haber recuperado los puntos “por secretaría”, señaló que “no era posible porque el árbitro dio por finalizado el encuentro después del gol de penal y por eso no hubo tarjetas amarillas ni rojas, sino solo su informe”.
Pero del lado de Gol y Gol les fue aún peor. El kinesiólogo Sebastián Leiva recibió 6 meses de sanción y los jugadores Fabián Neira y Javier Morales se anotaron 4 meses de castigo. Con dos juegos sin acción fueron reportados Eduardo Palma, Bastián Aguirre, Sebastián Contreras y Denielco Cornejo. La mitad del equipo titular. El estadio tampoco podrá utilizarse para fútbol de Tercera.
Venegas agregó que “a ellos les cayó aún más pesado, pero quedan cuatro fechas y seguimos pensando en el ascenso. Ahora viene una nueva final”.
Mañana, los choreros recibirán al sublíder Constitución, desde las 19 horas en El Morro, en lo que asoma como una nueva oportunidad para despegarse de ese quinto puesto del que hace rato no puede subir.