Deportes

La importancia que tiene el capitán dentro de un equipo

En la gran mayoría de los deportes colectivos está su figura. A veces lo eligen sus compañeros, en otras el entrenador. Como sea, cumple un rol relevante dentro y fuera de la cancha, sobre todo en planteles donde pueden vivirse situaciones complicadas, ligadas especialmente a lo extradeportivo. ¿Qué características debe tener? ¿Debe ser un ejemplo para los demás? ¿Su elección tiene que depender del técnico o de los integrantes del plantel? Entrenadores, jugadores que cumplen este rol y un psicológico deportivo analizaron el tema.

Por: Ricardo Cárcamo - Carlos Campos 20 de Noviembre 2023
Fotografía: Carolina Echagüe M.

Pelé, para muchos el mejor jugador de fútbol de la historia, nunca portó la jineta. Por liderazgo y autoridad futbolística, de su rendimiento, una decisión extraña. Pero él mismo lo aclaró en su momento, asegurando que ya tenía todo el respeto de sus compañeros, sabía de su ascendencia, y así se podía tener dos capitanes en la cancha.

En el fútbol y en otros deportes colectivos la figura del capitán suele asociarse a varias cosas. A liderazgo, a ser ejemplo para los demás. También a carácter, a talento. Dependiendo de la disciplina, igual es sinónimo de representar a sus compañeros ante los dirigentes, en instancias como el arreglo de los premios o pedir ciertas condiciones. En el caso del rugby cumple funciones específicas, reglamentarias: es el intermediario entre el técnico y los demás jugadores, es el único que puede hablar con los árbitros -lo mismo pasa en el hockey sobre hielo- y, además, puede decidir jugadas en la cancha en momentos determinantes.

Independiente de todo, es un rol para el que deben tenerse ciertas características, y no cualquiera tiene el perfil o las cualidades para hacer bien esta tarea. ¿Qué debe tener un capitán para cumplir de buena manera esa función?

Yenicel Torres es capitana del conjunto femenino de Basket UdeC. “Asumí el rol este año, ya llevo mucho tiempo en el equipo, es mi sexta temporada si no me equivoco. Esa una sensación súper linda, pues siento que es un reconocimiento a todo el trabajo que he realizado en estos años. Es una tarea difícil, porque somos hartas chicas y muy distintas y tenemos que cumplir con ciertos objetivos que se nos piden deportivamente, pero fuera de eso ha sido una experiencia súper linda”, dijo.

Además, destacó que en el equipo la designación “la hace el entrenador, obviamente tratando que estén todas las chicas de acuerdo. Pero se busca que la decisión esté fuera del equipo, para que no haya problemas en ese ámbito”.

Respecto a qué significa esta función, o qué cambió, señaló que “tiene que ver un poco con la responsabilidad en general del equipo, porque antes me preocupaba más de mi juego, de mejorar yo como deportista. Y este último tiempo he asumido un rol donde trato de transmitirle a las chicas, porque muchas era primera vez que jugaban Liga Nacional, todo lo bueno que iban a vivir y las cosas a las que podían enfrentarse que quizás no son tan positivas. Pasé a tener un papel donde era importante pasarles mi experiencia a las compañeras que eran menores y dejar un poco de lado a la Yenicel más competitiva individualmente y que se preocupa sólo de su juego, pensar más en el equipo”.

¿La capitana debe ser un ejemplo? Torres afirmó que “sí, creo que es importante ser una persona disciplinada, fuerte, pues las chicas ven cómo actúas, cómo te comportas y cómo llevas las cosas. Por ejemplo, cuando las chicas llegaron lo primero que les dije es que iban a disfrutar mucho del proceso, pero que también la adaptación tendría cosas súper difíciles. Y que cualquier cosa que necesitaran contaran con las jugadoras que llevamos más años en el equipo para apoyarse cuando lo requirieran”.

Potenciar los liderazgos

Raúl Umaña, entrenador de balonmano del programa Promesas Chile, comentó que “normalmente dejo que los chicos vayan decidiendo sobre quién va a ser su representante o líder. Igual trato promover distintos roles, porque hay algunos que normalmente le gusta ir al sorteo, pero hay otros que le voy entregando la responsabilidad de que asuman un papel más de capitán, en cuanto a comunicar información, a testear un poco el sentimiento del equipo en alguna cosa”.

Sobre si en algún momento tuvo un problema para elegir al capitán, indicó que “no, nunca hasta ahora. Quizás alguno no puede estar muy contento o conforme, pero nunca se ha manifestado de manera pública o he escuchado comentarios de ‘este no debería ser’. Lo que sí me ha pasado en alguna oportunidad es que el capitán, sin aviso y sin información, ha desaparecido de alguna práctica o partido, y rápidamente los demás le meten presión: si no está 100 % comprometido que mejor deje de ser capitán del equipo”.

En ese sentido, Umaña agregó que “normalmente el rol del capitán es básicamente ser la voz del técnico para cosas cotidianas, alguna información, generar otro tipo de actividad o para tomarle la opinión a los compañeros sobre algo. El capitán en el balonmano no tiene una connotación relevante, ya que en este deporte la única persona que se puede dirigir a un árbitro es el entrenador. Entonces a diferencia de otras disciplinas en donde plantea cosas o interviene cuando hay alguna sanción. Acá el rol es distinto”.

El técnico de balonmano también aseguró que “siempre busco que los chicos que tienen la capacidad de liderazgo la puedan potenciar y desarrollar. Un poco fortalecer sus capacidades al margen de lo deportivo. Yo en general soy muy de puertas abiertas para conversar con todos, pero traspasar la responsabilidad de repente a un deportista y sobre todo en edades tempranas lo hace madurar, ser más responsable y tomar las cosas un poco más en serio. (…) Y vamos rotando a los capitanes también, siempre o normalmente dejamos a los de segundo año de una categoría. En infantiles van los de segundo año, en cadetes van los de segundo año, de manera que el más chico también vaya viendo cómo es la dinámica que se pueda presentar para cuando algún día le toque asumir”.

En el fútbol

Mauro Lopes, jugador que estuvo en Deportes Concepción esta temporada, afirmó que “eso se da solo. siempre en un equipo hay alguien que lleva más años. Por ejemplo tú llegas al Conce y, ¿quién le puede discutir la jineta al Gabo? No hay que preguntar, hacer reuniones ni nada. Obviamente el DT lo decide porque si él quisiera otro, le pasa la jineta a otro. Para mí, sería una falta de respeto que alguien reciba la cinta estando el Gabo ahí, a no ser que no esté jugando”.

Al respecto, añadió que “el capitán tiene que saber que debe apoyar, levantar jugadores, ser prácticamente un entrenador más dentro de la cancha. Creo que tiene que saber bancar al equipo. En el año pasan muchas cosas, hay compañeros que cometen errores y ahí debe estar el capitán, para poner límites y orden, porque el cuerpo técnico no ve todo. Está en el camarín y escucha todo, sabe todo. nunca me ha tocado ser capitán. No debe ser fácil, nunca lo he sido, pero algún día me tocará … en el Conce”.

El técnico Felipe Cornejo indicó que “en los planteles donde he estado he elegido al capitán y en otras ocasiones les he dado la opción a que los jugadores lo escojan. Hay liderazgos de por medio y una responsabilidad involucrada. Los compañeros deben sentirse identificados con quien lleva la jineta, tiene que generar un consenso”.

En esa línea, agregó que “uno espera que el capitán sea capaz de transmitir la identidad que se busca, que sea el líder que saque la voz en momentos de dificultad y levanta a alguien que esté fallando, impreciso o con falta de confianza. Ese liderazgo tampoco es que recaiga solo en él. Muchas veces hay otros jugadores que son más líderes que quienes llevan la jineta. A veces hay un comportamiento específico del capitán que lo hace llevar la jineta, como la sobriedad, pero es otro quien cumple el rol de ser impetuoso. No hay que descansar en el capitán y para uno es mucho mejor si existe más de uno”.

Cornejo dijo también que “entre los jugadores hay un jerarquización. En esa anterior situación puntual del Conce, se da lo del Gabo que es un referente de la institución y está identificado. Tanto él como su familia son hinchas y eso pesa al momento de la elección. Además, él tiene una personalidad que va acorde a lo que es un capitán. Y si no llevara la jineta, él también seá un líder. Hay distintos liderazgos porque hay capitanes que quizás no hablan mucho, pero ejercen su liderazgo desde la entrega, el nunca rendirse y lo que realizan en la cancha. Hay otros que hablan, están presentes en todo. No todo es el ímpetu. Hay capitanes silenciosos. Claramente no puede llevar cualquiera la jineta, a algunos se la pasan y el brazo les pasa un poco más”.

Víctor Merello, ex jugador y actual entrenador, aseguró que “el capitán debe tener sus pergaminos. Es un rol especial porque representas a todos los compañeros, tanto quienes juegan como quienes están afuera. Debes velar por las cosas buenas, malas y feas. Ser capitán es importante, tiene la connotación de representar al DT en la cancha. El técnico puede estar gritando cosas y el capitán tiene que captarlas para difundirlas al grupo”.

Además, indicó que “hay técnicos que evitan crearse ellos mismos un tema especial y dejan que los jugadores escojan al capitán. Yo voy más porque el DT elija y le saque provecho a las cualidades para representarlo en la cancha. Por lo general, se elige al más idóneo. Un capitán debe tener requisitos propios como un don de mando que genere respeto para llevar al grupo. Por eso prefiero que el técnico lo elija, es difícil poner a alguien que no tenga personalidad o sea bajo perfil. El capitán debe lidiar con la prensa, los hinchas y los dirigentes”.

Visión psicológica

Alexi Ponce, psicólogo deportivo y director de Go Focus, dijo sobre el perfil que debe un capitán que “cada día han ido ampliándose las características, las necesidades. En una época siempre fue elegido, entre comillas, el mejor jugador, pero desde una perspectiva ahora más amplia, es alguien que representa a los demás, que comunica, que intercede. Se le piden ciertas labores o tareas de liderazgo ante el equipo técnico o la institución, entonces creo que es un puesto que va mutando de acuerdo a las necesidades”.

Sobre si es mejor que lo designe el técnico o los mismos jugadores, afirmó que “creo que ahí hay que buscar una mezcla de cosas. No basta un capitán y siempre tiene que haber más de alguna persona y ahí siempre se puede optar por una combinación: alguien que el entrenador, el cuerpo técnico, tenga cercanía o algunas afinidades, pero también hay que escuchar a los jugadores. Pienso que en una gran mayoría de los casos hay coincidencia, y cuando no se pueden nombrar y tener una estructura diferente de los que son elegidos o los que son representados desde los propios jugadores o de los que los técnicos eligen. Creo que se puede dar una mixtura sin ningún problema, aun cuando generalmente hay bastante acuerdo sobre quiénes deben liderar estos procesos”.

En cuanto a los liderazgos naturales, el psicólogo deportivo destacó que “hoy ha ido cambiando el rol de capitán, muchas veces era el que tenía más experiencia o más juego, el que hablaba más. Un capitán tiene más visibilidad, pero también hay lideres que aparecen en otros momentos y algunos que manejan mucho mejor el conflicto o las negociaciones o son muy buenos cuando el equipo anda muy bien o muy mal. Creo que hay que potenciar los distintos liderazgos de cada equipo aun cuando los capitanes evidentemente son los más característicos, pero en general el deportista está mejorando mucho sus capacidades y sus habilidades, y hay que darle también distintas responsabilidades. Es bueno sentir que todos llevan algo de líderes en su desarrollo y su trabajo deportivo”.

¿Qué pasa si un capitán no representa a todo un plantel? Ponce afirmó que “en un grupo grande, los subgrupos existen, las cofradías más pequeñas están por historias similares de vida, por edades, por experiencia. Existen fracciones en un plantel grande y ahí evidentemente vamos a necesitar a un capitán que tenga la habilidad de representar en lo central, en lo nuclear, en lo que importa, a todo el equipo y llegar a consenso en algunas cosas seguramente. Una de las tareas del capitán es que todos o la mayoría confíe y crea en su manejo del liderazgo. Si eso no ocurre, normalmente son los entrenadores los que van a tomar las decisiones y van a tratar de suplir esta falta de compromiso o de complementariedad entre el equipo”.

En ocasiones, el capitán debe asumir labores desgastantes fuera de la cancha, como negociar premios u otro tipo de situaciones que pueden generar tensión. ¿Esto puede afectar su rendimiento deportivo? Para el psicólogo, “indudablemente hay distintos factores situacionales, diversos contextos que afectan no sólo al capitán, sino que también a cualquiera de los jugadores y por eso la mirada multidisciplinaria, la mirada multifactorial de los procesos deportivos cada día tiene más relevancia. Desde esa lógica, por supuesto que los problemas que puedan haber al interior del grupo o con el ambiente cercano influye en el rendimiento del capitán, pero no sólo en el suyo, sino que en el plantel completo”.

Etiquetas