En la parte final se encuentra ya el campeonato de Segunda División, pero en Arturo Fernández Vial no piensan en sacar el pie del acelerador. Ya sea porque hay una tenue esperanza de que algo inesperado y decisivo suceda en el Tribunal de Disciplina, o simplemente por una cuestión de honor, en la tienda aurinegra están determinados en cerrar la temporada lo más arriba posible en la tabla de posiciones; si es en el segundo lugar, tanto mejor.

Bajo esa premisa saldrá esta tarde la “Maquinita”, cuando desde las 18:00 horas reciba a Trasandino, en el estadio Ester Roa Rebolledo. Se trata del compromiso pendiente válido por la vigésima fecha del torneo, y donde el “Almirante” intentará continuar el envión dado por el clásico penquista, en el que logró festejar como dueño de casa tras largas fechas, y seguir así escalando en la tabla donde actualmente marcha cuarto con 35 puntos, a tres de San Antonio Unido.

En frente tendrá a un elenco que, luego de ser protagonista del certamen en la primera rueda, peleando palmo a palmo el liderato con Limache, hoy marcha séptimo con 29 puntos, lejos de la espectacularidad de ese comienzo de torneo.

Aun tienen por qué luchar

Los vialinos vienen de igualar agónicamente en su visita a Rengo, donde pese a no mostrar su mejor versión, ratificaron que son un equipo duro de vencer. Factor que el técnico Jonathan Orellana quiere aprovechar para dejar los tres puntos en casa.

“No sabemos lo que pueda ocurrir, tal vez el punto de visita no es malo, por eso ahora tenemos que lograr un buen resultado para que ese punto en Rengo sea valioso. Nos quedan cuatro fechas y la idea es tratar de terminar segundos, lo que sería muy bueno para la institución. Si nos vamos al inicio del proceso, tanto para la gente como para el club eran otras expectativas completamente, sobre todo por venir de un descenso, pero hoy se ve una posibilidad de terminar de muy buena manera el torneo. Por eso estamos peleando hasta el final, todavía hay por qué competir y eso es muy positivo”, sentenció.

Para hoy, Vial lamentará la baja de su capitán, Claudio Muñoz, suspendido por acumulación de tarjetas amarillas.