El acero cosechó solamente 5 de los últimos 21 puntos y perdió 3 de los recientes cuatro partidos. Aún así, está a 4 unidades del líder y este fin de semana recibirá a un rival directo.
Sumó sólo 3 puntos de los últimos 12. Y si el análisis es más amplio, Huachipato cosechó solamente 5 unidades en sus últimos 7 partidos. El acero vive su peor momento de la temporada y este sábado chocará ante un Coquimbo Unido que fue protagonista del torneo, pero que igual ha decaído en las recientes jornadas.
¿Qué llevó a la usina a perder todo el terreno que ganó el primer semestre y que incluso lo alzó como “campeón de invierno” hace un par de semanas?
Sorprendente fue el gran nivel que mostraron algunos jugadores en el primer semestre, como Javier Altamirano o Brayan Palmezano, entre otros. Actores de reparto en años anteriores y con chispazos de buen fútbol, ambos se lucieron con gambetas, habilitaciones y goles, entre otros aspectos del juego.
En general, el acero ha dejado de ser ese equipo efectivo en ataque y sólido en defensa. En las primeras 9 jornadas recibió 8 tantos, mientras que en los últimos 4 encuentros del torneo ya recibió 7 tantos.
Notoriamente tras el paso por la selección, el rendimiento de los tres convocados disminuyó. Otra vez Huachipato depositó su confianza en Maximiliano Rodríguez, al igual como lo hizo en torneos pasados en desmedro de Juan Sánchez Sotelo, César Huanca o Mateo Acosta. Así, el ariete perdió su puesto ante un Pablo Magnín que ha mostrado poco y nada.
Lo propio, Joaquín Gutiérrez, quien ingresó desde la banca en el último partido frente a Colo Colo, siendo reemplazado además ante la “U” y repitiendo errores defensivos que le costaron caro en temporadas anteriores. Un volante le ganó el puesto con creces, llegando incluso al gol en dos fechas consecutivas: Felipe Loyola.
En el caso de Altamirano, ¿habrá generado ruido para el volante el supuesto interés de otros clubes a mitad de año? Javier ya no exhibe la soltura del primer semestre, viendo además que su socio Palmezano ni siquiera fue citado para el último compromiso.
Que renuncia, no se lo aceptan, reta al plantel y echa pie atrás. El DT Gustavo Álvarez siempre ha optado por la mesura, aunque cuando es cómplice de sus propias palabras, elude enfrentar la realidad. Lo vivió hace un par de semanas en el CAP después de la eliminación por Copa Chile ante Temuco, donde alineó un equipo mixto que se contradice a su discurso de que “el próximo partido es el más importante”.
Lo propio ante el caso Bastián Roco, tema que derechamente ya evita tocar entendiendo que es ajeno a él y que solamente acata una decisión extrafutbolística de la directiva.
Quizás el principal aspecto clave en el primer semestre fue que su voz era ley en el camarín acerero. ¿Seguirá siendo así aún?
“Si es una mochila, hasta el final del torneo hay que soportarla”, dijo el propio DT de Huachipato previo al inicio de la segunda rueda. Sin embargo, la usina no ha aguantado con la presión de ser puntero. Los jugadores han mostrado ambición, pero desde la banca van “partido a partido”.
Y como si el actual plantel fuese muy distinto al del año pasado … Huachipato sumó 1 solamente un refuerzo en esta ventana.