Patadas que crecen cada día y prometen llegar alto

Fue a los siete años que Victoria Soto comenzó su aventura en el taekwondo. Con pasos por el ballet y la natación, nunca supo de los deportes de contacto hasta que por casualidad se encontró con un taller municipal, cuando apenas se empinaba por los siete años.

Le gustó lo que vio y sin dudarlo pidió a sus padres que la inscribieran en una céntrica academia penquista. De ahí pasó al Golden Team, donde recibió su primera formación a cargo del profesor Juan Pablo Contreras. “Me gustó lo que era combatir, patear, la adrenalina que siente al entrar al tatami, y tener que estar preparada para todo lo que pase”, cuenta la alumna de segundo medio del Colegio San Agustín de Concepción.

Aunque fue a los 10 años cuando reconoce que el deporte pasó a ser algo más que un simple hobbie, luego de inscribirse en el Club Taekwondo Extremo, del técnico del polo Promesas Chile Biobío, Jorge González. “Fue un cambio bien grande porque empecé a saber lo que era estar constantemente en competencias, a medirme con las niñas de mi edad y ver cómo poco a poco iba alcanzándolas y superándolas en nivel. Y si bien mis primeras competencias fueron de mucho nervio, me fui acostumbrando y entendí que esa tensión se puede controlar”, señala.

Campeona Escolar Cadetes 47-51 kilos, primer Lugar 47- 51 kilos Copa Nacional Fénix (Bulnes) y ganadora de la serie Cadetes -51 kilos en la Copa Panguipulli, aparecen como sus primeras experiencias arriba del podio, y que le dieron la confianza necesaria para continuar.

A la postre, aquello significó todo un camino para que hoy, con 15 años de edad, sea considerada como uno de los mayores proyectos de la disciplina no solo en la provincia, sino también en la Región.

Subiendo el nivel

Tras la parte más dura de la pandemia, llegó el año 2021 con grandes participaciones Torneos Nacionales, como la Copa Chile de Santiago, donde se colgó el oro en Cadetes -51 kilos, y la Copa Santiago Open, con la medalla dorada en Cadetes Danes -51 kilos.

Aunque el salto de calidad comenzó a darse en 2022, con su incursión es torneos internacionales. Primero, en el Argentina Open G2, donde sorprendió conquistando el oro en Cadetes Danes 51 kilos.

“No me esperaba ese título, era mi primera salida, estábamos viendo cómo nos iría y terminé ganando la categoría. Estaba muy nerviosa porque en la final me tocó con una chilena que era de Chillán y nos conocíamos. Pero todo resultó bien, terminé ganando en el desempate del tercer round. Mi técnico me felicitó, porque además de ser mi primera vez fuera de Chile, estaba sola, sin mi mamá. Entonces fue de mucho crecimiento”, sostiene.

Luego vino el Brasil Pana-Am Serie III, en el que obtuvo bronce (Cadetes -51 kilos), para luego cerrar con un oro en la misma categoría del Perú Open Bicentenario G2.

Esos resultados le permitieron ser considerada para el Panamericano Juvenil y Cadete de República Dominicana 2023, torneo que se desarrollo en abril y donde la penquista llegó a cuartos de final donde terminó cayendo ante la ecuatoriana Montserrat Vilatuña, quien terminaría siendo vicecampeona.

“Me sentí muy tensa, porque nunca había estado en un torneo de esa magnitud, con tantos países y tantos competidores, la verdad me sentí un poco intimidada. Es algo muy gigante, es mayor que un Open, entonces cuesta acostumbrarse. Pero terminé haciéndolo bastante bien y caí recién en cuartos. Quedé conforme por todo lo que significa un evento así, conté un gran equipo”, detalla.

Actualmente Victoria entrena dos a cuatro veces al día, y si tiene tiempo viaja los fines de semana a entrenar con la selección en Santiago. Es que sus planes son grandes y quiere estar preparada.

“Soy la mejor de la Región en mi categoría, pero quiero seguir creciendo. Mi primer objetivo es ganar un oro juvenil panamericano y proyectarme en la selección adulta, donde hay gente tremendamente buena; estoy trabajando para llegar allá, a eso aspiro. Tengo el apoyo incondicional de mi familia, sin mi mamá no podría salir a competir afuera o irme a mi casa después de entrenar. Cosas simples, pero bien importantes”, sentencia Victoria, que ahora se prepara en menta y cuerpo para los test match que darán cupos a la selección nacional que disputará la President Cup, en Río de Janeiro, en septiembre.

“El nivel de selección es bueno, voy muy bien encaminada, además que uno se puede desarrollar bien, no se siente incómodo y dan ganas de seguir mejorando para alcanzar a los deportistas que son mejores”, cierra.