La triste acusación de racismo contra Job Bogmis
25 de Abril 2023 | Publicado por: Carlos Campos
"No soy de este país, pero me debo sentir libre. Soy humano y hay cosas que se deben acabar", expresó el delantero camerunés de U. de Concepción.
Job Bogmis estaba triste. Tras la derrota 0-2 de U. de Concepción con Santiago Wanderers, el delantero camerunés del Campanil salió del camarín al borde del llanto.
¿Por qué? Al minuto 90+6′, cuando el partido estaba por acabar, el atacante estaba desesperado. Airadamente le reclamaba al árbitro Felipe Jara, agitaba los brazos y debió ser controlado por sus propios compañeros. Sólo un par de segundos antes, había estado frente a frente con Pablo Corral, volante del cuadro de Valparaíso.
En diálogo exclusivo con Diario Concepción después de finalizar el encuentro, Bogmis reveló que “no me caliento mucho en la cancha, pero hay cosas que molestan. Son cosas difíciles cuando un rival te dice ‘negrito’. Por eso me molesté. Fue (Pablo) Corral. El árbitro me dijo ‘después lo vamos a revisar’ y me pedía tranquilidad. Son temas en los que hay que meter un punto y que ciertas cosas se acaben. Yo sé que no soy de este país, pero uno se tiene que sentir bien en todos lados. Somos todos humanos. Para mí es un tema discriminatorio que me molesta mucho. Somos todos humanos que jugamos para nuestras familias, nuestros amigos y nuestros sueños. Uno se tiene que focalizar en eso en vez de gritar ciertas palabras”.
Tras el duelo, en la zona mixta cuando ambos elencos se retiraban a camarines, hubo un airado diálogo entre jugadores de ambos equipos. La situación fue conversada por los protagonistas. De hecho, después del pitazo final, Carlos Muñoz se acercó a Job Bogmis y lo abrazó. El propio delantero de U. de Concepción cuenta que “Corral no me pidió disculpas ni nada de eso. Uno de ellos se acercó, no sé quien era, me preguntó lo que pasó y me dijo ‘disculpas, hermano, estas cosas no pueden pasar’. Pero Corral no. Me duele esto. No estoy en mi país, pero me debo sentir libre donde sea. Lo bueno es que tuve el respaldo de mis compañeros. El resto de jugadores tienen acá a sus familias, al contrario mío. Son palabras que duelen. Nunca había vivido eso, nunca me había pasado. Hay que sacar ese tipo de cosas”.
Finalmente, el atacante camerunés de 22 años, agregó que “tengo a mi familia lejos. Uno vuelve a la casa y no tiene a su mamá al lado. Obvio tengo compañeros, pero falta esa familia, hermana o hermano que te tranquilicen. Lo hacen por teléfono, pero no es lo mismo que tener esa persona al lado tuyo. Pero sé que cada sueño tiene un sacrificio y después viene la recompensa. Lo primero es sacar a la U. de Conce del momento en que está”.
La secuencia televisiva que muestra el momento descrito por Job Bogmis:
Capturas de pantalla (TNT Sports).