Más positivo que en otras ocasiones, el DT de U. de Concepción dijo tras la derrota con Cobreloa que "si seguimos jugando así, tendremos mejores resultados".
Autocrítico y hasta resignado. Conceptos que resumen la postura de Miguel Ramírez tras los dos primeros partidos de U. de Concepción en el torneo. Las derrotas ante Recoleta y Santa Cruz mostraron a lo peor del Campanil en mucho tiempo, por lo cual el propio “Cheito” se preguntaba hace unos días, “¿qué pasa con el equipo?
Pero todo cambió el martes en Calama. O casi todo. UdeC elevó considerablemente su nivel, jugó un impecable primer tiempo y si no es por una serie de lesiones que desdibujaron al equipo en la segunda etapa, los auricielos hubiesen festejado un valioso triunfo ante Cobreloa en Calama. Terminó siendo 2-1 para los loínos, en 90 minutos que dejaron bastante más tranquilo al DT del Campanil.
“Teníamos el partido bien controlado, jugando de la forma que pensábamos nos daría resultado en cuanto a la posesión de balón, donde y como íbamos a presionar. Eso estaba dando efecto. Pero, producto de lesiones, tuvimos que realizar modificaciones de Job (Bogmis), (Claudio) Navarrete, Kevin (Medel) y Rodrigo (González). Fueron cambios obligados por molestias en las cuales eso, sin duda, incidió en nuestro funcionamiento. Estaba conforme con el juego, pero lamentablemente tuvimos demasiados lesionados y gente que debió abandonar la cancha. Eso influyó en que le permitimos agrandarse a Cobreloa y jugar mejor”, dijo Miguel Ramírez tras el duelo en Calama.
El Campanil pudo quedar 2-0 si no hubiese sido por el penal que Araya le tapó a Yashir al 61’. Aquello mermó anímicamente a UdeC y envalentonó a los naranjas. “Sin duda que afecta. Pero (Yashir) Islame estaba con confianza para patear, había hecho el primer gol y mentalmente se sentía tranquilo. Es mérito del arquero. Son situaciones donde debemos seguir aprendiendo. La jerarquía de los jugadores de Cobreloa marcaron la jerarquía y eso se reflejó al final. Estábamos haciendo un partido bien correcto”, afirmó “Cheíto”.
En el análisis de los partidos pasados, el DT Ramírez apuntó a errores básicos relacionados a “dar pases, tener un buen control o esperar el balón parado”. Sin embargo, su sensación tras perder con Cobreloa fue más alentadora. “Tenemos un plantel que tiene un 70% de valores jóvenes, jugadores que están haciendo sus primeras armas. Esa inexperiencia se vio reflejada en los dos goles que nos hicieron. Uno producto de un lateral evitable donde si se va a despejar el balón, debe ser más arriba. Y en el segundo, luego de una falta donde dejamos que jugaran. Sabíamos que Cobreloa hacía rápidos los balones detenidos, pero los dejamos jugar y ellos aprovecharon bien esa situación. Tenemos un plantel joven que debe madurar y esta es la forma. Me deja contento el rendimiento que tuvimos. Si jugamos así el siguiente partido, seguramente tendremos un mejor resultado”, cerró el técnico del Campanil.
Una mejoría que lamentablemente no se tradujo en un buen resultado, quedando U. de Concepción en el último lugar de la tabla sin puntos, aunque con menor cantidad de partidos que sus rivales. El próximo rival será Deportes Iquique, actual sublíder y único invicto del torneo. El duelo se disputará el próximo lunes a las 18 horas en el Ester Roa.