Recientemente, Basket UdeC hizo historia al eliminar a Obras Sanitarias de Argentina en la Champions League Americas, metiéndose por primera vez en los cuartos de final de la cita continental. Triunfos de esta trascendencia, en el extranjero, son poco comunes en el deporte chileno, aunque a nivel de selección sobre todo se está haciendo más frecuente clasificar a mundiales y lograr resultados importantes. En el país, también se genera una distancia importante entre equipos de regiones y Santiago en varias disciplinas, por aspectos económicos y de otro tipo. ¿Basta ser más fuerte mentalmente para acortar las diferencias? ¿Hay más posibilidades de victoria en llaves directas, “mano a mano”, que en ligas más extensas? Voces del medio local hicieron su diagnóstico.
Ricardo Cárcamo y Christopher Cortez
Hace unos días, la UdeC venció por segunda vez consecutiva a Obras Sanitarias de Argentina, en la tercera ventana de la Champions League Americas. En Brasil, consiguió una victoria histórica, que le dio el paso por primera vez a los cuartos de final del torneo continental.
Así, dejó en el camino a un rival que, en el papel, aparecía como superior, pues ocupa los primeros lugares de la liga argentina, un torneo de mayor presupuesto y nivel que la Liga Nacional. Además, en este último triunfo -ya le había ganado con contundencia en Argentina- lo hizo jugando el cuarto periodo sin sus jugadores estadounidenses, lo que le da más valor al logro.
A nivel nacional, en varias disciplinas los torneos se centralizan en Santiago, debido a que concentra la la mayor cantidad de equipos. En el hockey, el voleibol y el rugby, por ejemplo, el grueso de los clubes son capitalinos, lo que implica para los participantes de regiones un gran desgaste en cuanto a viajes, pues no todos cuentan con los recursos para trasladarse de la mejor manera.
Tomando en cuenta el ámbito internacional y también lo descrito que ocurre en el país, ¿Cómo se puede ganar y competir ante rivales que, en el papel y por temas logísticos, aparecen como superiores? ¿De qué manera se puede equilibrar la balanza? ¿Hay más posibilidades de tener buenos resultados en llaves directas, “mano a mano”, que en ligas más extensas?
Sebastián Carrasco fue una de las figuras de la UdeC en el triunfo ante Obras. Anotó 20 puntos y convirtió cinco de sus siete intentos de triple. “Se les puede ganar desde el tema mental principalmente. Uno tiene que entrar a esos partidos pensando en que el basquet es uno solo y que en la cancha puede pasar cualquier cosa. Debes entrar enfocado, lograr buenos porcentajes y por ahí las cosas se pueden ir dando. Si estás física y mentalmente preparado puedes lograr el nivel apto para competir a nivel sudamericano. Hay que pensarlo de esa forma”, dijo.
Además, indicó que “otro aspecto muy relevante es el scouting, analizar al rival, conocer sus puntos fuertes y débiles para así poder hacer daño. Al final tenemos que pensar que somos todos iguales, tenemos dos piernas, dos brazos y todos entramos a la cancha por el mismo objetivo”.
Del encuentro ante Obras, recordó que “antes estaba muy concentrado. Algunos compañeros tiraban unas tallas y yo estaba muy serio, muy enfocado en lo que se venía. Creo que tuve un primer tiempo bueno, fallé algunos tiros de dos pero cuando cayó el primer triple uno se va soltando. Estaba concentrado en leer el juego y se me fue dando. Cuando partió el tercer cuarto metí una bomba saliendo de una cortina de Terry, que era mi tercer triple. Con ese lanzamiento me sentí muy conectado, muy enchufado, y además sacamos 10 puntos de ventaja…Claramente he tenido partidos de más puntos, pero por la trascendencia lo considero el mejor de mi carrera…Igual no lo había comentado, pero soñé que tenía una actuación así hace un par de semanas. Tuve un sueño muy parecido a cómo se dio todo”.
Carrasco igual dijo que es importante creer en sí mismo. “Siempre pienso antes de los partidos que tengo el nivel, que cuento con las condiciones para competir a cualquier nivel. Tengo buen dribbling, leo bien el juego y si la pelota no me cae puedo aportar de otras formas al equipo. Sé que se soy un buen jugador, ya lo he demostrado también a nivel nacional. Esta es la tercera Champions y a medida que hemos disputado más partidos todos nos hemos ido soltando y ganando en más confianza. Personalmente confío mucho en mis capacidades y pienso que todo va a resultar bien”.
El base igual fue campeón sudamericano Sub 17, en Lima, por lo que también sabe de éxitos a nivel de selección. Y cree que se pueden conseguir más cosas. “Ahora que hay una buena generación, con un recambio importante. Tenemos jugadores afuera como Ignacio Arroyo, Felipe Haase, Maxwell Lorca, Nico Carvacho, y también la altura necesaria para enfrentar a potencias sudamericanas y mundiales. Se vienen lindas cosas con la selección, tenemos el potencial y sólo falta prepararse bien previo a cada campeonato que se afronte. La mentalidad ganadora igual pienso que la tenemos”.
Patricio Briones, ex jugador de básquetbol y actual entrenador, aseguró que “lo que está haciendo la UdeC, desde la llegada de Cipriano, ha sido una seguidilla de triunfos y logros institucionales que van de la mano de su expertiz, sin dejar de lado que los muchachos han conformado un grupo de primerísimo primer nivel. La UdeC, a pesar de ser un equipo de región, tiene una solvencia e institucionalidad muy potente. Es uno de los pocos clubes que trabaja profesionalmente en esto. Hay contador, auditores, administradores, un montón de áreas que hacen que el club funcione como tal. Este grupo humano tenía que tener resultados y en los últimos años lo han ganado todo”.
Jorge Facchini, jefe de la rama de vóleibol del Deportivo Alemán, aseguró que “creo en los procesos, que eso y el mantenerse en el nivel acorta la brecha con los mejores equipos, especialmente en competencias de gran nivel. En el caso de la UdeC, este resultado no es producto de ahora, sino de mantenerse en el tiempo. Por lo que se ve se ha planificado, preparado y reforzado para competir de igual a igual. El año anterior también había tenido buenos resultados”.
Además, indicó que “ahora, no solo se miden los resultados, sino también la manera de obtenerlos. Una planificación que no solo tiene lo deportivo sino lo dirigencial, lo logístico, el saber con quién se va a jugar y dónde, el estudiar a los equipos para igualar fuerzas. Todo eso lo ha desarrollado UdeC y, por consecuencia, da este gran paso. Nada se da de un día para otro. Son un ejemplo a imitar (…) Para tener el logros así, se debe tener deportistas profesionales, dedicados al 100%. Con el deportista amateur es más difícil porque ellos deben lidiar con otras cargas como la del estudio o trabajo. Se requieren dirigentes profesionales, es decir, tener un manager, un administrador de recursos y un cuerpo técnico multidisciplinario; eso es deporte profesional”.
Raúl Umaña, entrenador de balonmano del programa Promesas Chile, indicó que “el caso del básquet es distinto porque normalmente tienen una vitrina mayor, más exposición, más sponsors y tienen otras alternativas de financiamiento. En el deporte amateur la cosa es más complicada, porque generalmente hay autofinanciamiento. La estructura de los clubes, en general, no soporta mucho la logística y la gestión de recursos, por lo que a veces los mismos deportistas terminan pagando sus participaciones. Falta tener competencias atractivas para captar y visibilizar más el deporte. Hablo en general de las ligas de balonmano, voley, rugby, hockey, son todos deportes que tienen al Comité Olímpico pero se hace insuficiente. La geografía tampoco ayuda mucho; sin ir más lejos, jugar balonmano en Arauco, Los Ángeles, Curanilahue u otros lugares de la zona significa, por lo menos, 200 mil pesos en transporte cada fin de semana”.
En esa línea, agregó que “desde lo que veo en el balonmano, la realidad es que hay pocos dirigentes, por lo tanto, no hay gente que se dedique a hacer la gestión de recursos, por lo que entrenadores desvían sus funciones para también aportar ahí. También está la falta de tiempo para poder practicar, los horarios complican la disponibilidad y eso va en desmedro de la preparación y el trabajo técnico – táctico. Siento que muchas veces los deportistas se quedan con lo logrado en cadetes o juveniles y no colocan la misma ilusión cuando ya están en categorías mayores”.
Sebastián Carrasco dijo que la parte psicológica resulta clave para enfrentar un desafío mayor. Al respecto, Jorge Facchini señaló que “el deportista puede competir de igual a igual, siempre que se desarrolle su mentalidad competitiva, de crecimiento. El poder competir pasa por ahí. Se debe planificar, desde la conducción técnica se debe desarrollar un proceso que entregue armas para competir, pero eso conlleva un tiempo de mucho estudio, leer las realidades y observar”.
Raúl Umaña indicó que “sobre lo psicológico, en general están las ganas de querer ganar y participar, pero se vive más del recuerdo de lo que se hizo en categorías menores. La dedicación ya no es la misma”.
Patricio Briones afirmó que “antes hacer deporte era puro ‘ñeque’, pero hoy no. En el básquetbol y muchos deportes se trabajan otros aspectos como el carácter del jugador, la personalidad deportiva. El aspecto psicológico es fundamental porque somos un país con un deporte todavía en vías de desarrollo, sin mucha relevancia a nivel olímpico, con podios escasos y se requiere de equipos multidisciplinarios”.
A nivel nacional, para los clubes de provincia que participan en ligas nacionales, como ocurre en el rugby, el vóleibol y el hockey por dar tres ejemplos, resulta complicado medirse de igual a igual con los elencos capitalinos, que muchas veces tienen mejores planteles y menos complicaciones logísticas, como tener que viajar seguido para jugar.
Axel Scheel, jugador de Old John’s, comentó que “competir, desde mi vereda del rugby, a nivel nacional desde las regiones es complicado. En Primera, la gran mayoría de los equipos son de Santiago o de Viña, y en este momento somos el único de la Región. La mitad de los partidos que son de visita implican viajes largos, a las ciudades que dije, y quita mucho tiempo. Si juegas el sábado te vas el viernes y regresas el sábado en la noche, lo que implica un gran desgaste físico, que es distinto a los rivales, que se desplazan poco. Pero es parte del desafío y nuestro equipo lo asume así, aunque es complicado”.
Sin embargo, dijo que en lo técnico y físico no hay grandes diferencias. “En cuanto a las capacidades físicas no tenemos mucho que envidiarle en capacidades físicas ni atléticas a los otros equipos, pienso que estamos a nivel de competir con cualquiera. A nivel internacional, como jugadores amateur, quizás estamos un escalón más abajo, pero ya la selección pelea, se ha demostrado con la clasificación al mundial. Muchos ya son profesionales y ojalá se pueda seguir ese camino para todos a corto plazo, y que a nivel regional se pueda ir avanzando también en esa senda”.
Cristian González fue entrenador de hockey del Deportivo Alemán, y actualmente es segundo entrenador de la selección chilena y head coach y entrenador del primer equipo de varones de Country Club. A su juicio, “no creo que competir dependa de si una institución tiene los recursos económicos o no para poder viajar, por ejemplo. Tienen que estar implicadas las federaciones, con un modelo que permita sostener a corto, mediano y largo plazo, la participación de los equipos de regiones en un torneo nacional donde seguramente hay más equipos de la capital. La federación juega un papel fundamental para buscar un equilibrio y que cada institución pueda ser parte de un certamen nacional”.
Para Raúl Umaña, “lo que nos separa de los equipos de la Región Metropolitana o de la quinta región, es generalmente la estructura organizacional y de competencia, porque ellos tienen más torneos para los cuales preparar chicos de 17 o 18 años”.
Por su parte, Jorge Facchini indicó que “el trabajo psicológico es importante pero es un elemento más, como lo técnico, táctico o físico, y como tener una estructura institucional detrás. Siempre que hay una estructura desarrollada en el tiempo, se forma una base donde sostener lo deportivo y permanecer compitiendo, que es difícil que sea duradero en el tiempo. Creo que este es el camino a tomar como clubes de región para competir ante equipos de Santiago, que tienen más acceso a competencia interna y a deportivas de selección. Después el resultado es otra cosa y se puede dar o no, pero estar en la élite no es producto de la casualidad. Alemán lleva 10 años jugando la liga A1 y, con más o menos fuerza, seguimos compitiendo y estando entre los primeros cinco lugares siendo el club de región con más regularidad”.
El formato de un torneo también puede influir al momento de lograr mejores resultados. En torneos largos, por lo general se terminan imponiendo los equipos que tienen mejores planteles y son más regulares, mientras que los playoffs o llaves directas dan más espacio a alguna sorpresa. Axel Scheel afirmó que “el año pasado llegamos a semis, y en 2021 también. No sé realmente si sería beneficioso, porque en ese caso te podría tocar de visita igual”.
Cristian González aseguró que “no creo que la solución sea llaves abiertas o directas. Por ejemplo, en el torneo de hockey la Federación ha hecho un gran trabajo con los clubes de regiones, y lo puedo decir desde ambas veredas, como coordinador de un equipo de región y también como uno de Santiago. Y que puedan participar no en torneo de mano a mano, sino con fases regulares y playoffs después. Si el ente principal está interesado en promover el hockey en todo el país se puede hacer perfectamente, y la Federación lo está logrando, con participación de clubes de Concepción, Temuco, Antofagasta, La Serena y Rancagua”.
Patricio Briones indicó que “el mano a mano es difícil porque la logística no le da a un club de región. En el caso del basket, UdeC lo puede hacer porque tiene una espalda, pero otros incluso de la capital quizás no tienen el respaldo logístico o financiero. Es muy caro salir por una fecha, sobre todo a otro país. La planificación es fundamental y muchos clubes no planifican mucho que digamos, siendo sincero. Hoy todo está sincronizado y apuntando hacia un mismo norte, y eso tiene que ver con quien está a cargo, que es Cipriano”.
Raúl Umaña señaló que “es complicado saberlo porque, a lo mejor, podrías tener un buen resultado esporádico en una llave, pero la buena cantidad de partidos durante el año te permiten obtener un rendimiento a través del tiempo. Tener una liga creo que es mejor, pero también es altamente costosa para algunos equipos”.
Al respecto, Jorge Facchini dijo que “para los clubes de región creo que una competencia larga es más importante porque le permite tomar ritmo y planificar dónde hacer el peak de rendimiento. En el mano a mano todo puede pasar si tengo un plantel igual de fuerte que el rival. Cuando se da inicio es otra historia”.