“Creo que entre las vacaciones y la preparación, ha sido el periodo donde más tiempo ha habido”. La palabra es del DT Miguel Ramírez, quien deberá seguir esperando para el debut de UdeC en este 2023.

El Campanil tenía programado su estreno para mañana viernes a las 18:30 horas ante Rangers, pero la contingencia obligó a suspender el partido que se realizaría en Talca. Así, los auricielos ganarán tiempo para alistar la participación en un campeonato que cada vez asoma más parejo.

“Normalmente eran 21 días de receso, lo que nos obligaba a tomar decisiones apresuradas. Ahora, con lo que hemos vivido, nos hemos tenido que adaptar al tema económico, la situación del club y la nueva realidad que vivimos. No ha sido fácil”, expresó “Cheíto”, quien al respecto agregó que “hemos visto los esfuerzos de todos los dirigentes. Convivimos con lo que pasó con el proyecto de la Sadp, y nos tenemos que adaptar. Damos énfasis a lo futbolístico para lograr el entendimiento de los jugadores con el equipo nuevo”.

Miguel Ramírez llegó a UdeC el año pasado con la meta de salvar al equipo del descenso y lo terminó metiendo a la liguilla. Una enorme campaña que superó la expectativa de todos. Pensando en el torneo 2023, el desafío asoma igual o aún más complejo. El DT lo sabe. “Este plantel tiene aproximadamente un 70% de jugadores nacidos en el club. Hay una gran responsabilidad para ellos, los mayores y nosotros como cuerpo técnico para entregar las herramientas y mejorarlos. Es un gran desafío para todos”, expresó.

Teniendo un panorama adverso, el entrenador optó por aceptar el desafío y continuar con el proyecto para la temporada. “A diferencia de lo que me pasó en Santiago Wanderers, aquí creo mucho en lo que los dirigentes nos están ofreciendo. Creo en su palabra, energía y en lo que nos han propuesto como funcionamiento para 2023. Estoy seguro que los recursos se van a ir logrando en la medida que pase el tiempo. He visto el esfuerzo que han puesto”, afirmó el DT del Campanil.

“Cheíto” añadió que “sí, quedó la vara alta, por supuesto, pero creo en los jugadores que trajimos, en los jóvenes, en mi metodología, en el trabajo en equipo, la institución y en los dirigentes. Eso será fundamental para ser competitivos y fuertes en lo grupal con todos involucrados. Eso será lo que nos dé grandes alegrías”.

Piensan en grande

Pese al joven plantel, en UdeC se trazan altos objetivos. “Habrá por lo menos 8 candidatos para subir. Ser competitivos es una obligación para nosotros y estamos trabajando para eso. El objetivo es llegar lo más alto posible. Si eso significa subir directo, extraordinario.hay equipos que se han reforzado con una inversión importante. Nuestra forma de competir será con intensidad, agresividad, con un equipo compacto y que le dará muchas posibilidades a los jóvenes para debuta”, cerró el DT.

¿Plantel cerrado? No descartan reforzar la banda izquierda.