Gustavo Merino: poco pudo hacer ante la entrada solitaria de Duma tras un rebote, realizó un tapadón abajo a Arguinarena para mantener vivo el partido y al final fue superado en un mano a mano contra un Araya muy solo. Nada de qué culparlo.
Diego Sanhueza: Partido extraño porque no le atacaron mucho por su banda en el primer tiempo y en la segunda fue sustituido tempranamente cuando Lira buscó cambios más ofensivos.
Bastián Solano: erró en el gol y no es primera vez que un mal despeje suyo termina en tanto del rival. Le costó afirmarse en la cancha, pese a que Barnechea no buscaba mucho una referencia en el centro de ataque. Colossi lo complicó.
Benjamín Vidal: pudo marcar antes de los veinte minutos elevándose más que todos en un tiro de esquina y poco tuvo que ver en los goles del contrario. Sigue siendo el más confiable en la línea defensiva.
Fernando Ponce: su mecha corta le ha costado varias tarjetas esta temporada, pero ninguna como esta. Dejó a su equipo con diez cuando menos debía, reaccionando a una jugada intrascendente. Un error infantil que impidió a Vial seguir en lo que estaba. Irresponsable.
Arturo Sanhueza: intentó cortar el circuito de fútbol a un Barnechea que empezó a tomar el control del juego cerca de los 20 minutos. Con uno menos se hizo todo más complicado y en los últimos pasajes del juego ya le entraban por todos lados.
Matías Ávila: partió bien, luego tuvo que cubrir a Ponce en la banda izquierda y estaban empezando a cargarle la mano cuando debió salir de la cancha por un golpe de Marín.
Ethan Espinoza: se ofreció mucho por la banda en el inicio del partido, pero fue desapareciendo y al final fueron los hombres de recambio quienes levantaron a Vial en su momento. Era el que mejor conocía la cancha, pero no se notó.
Harol Salgado: Lira dispuso tres tipos talentosos y de buen pie detrás de Gotti, pero la idea funcionó mejor en la pizarra del camarín que en la cancha. Le costó, se vio más lejos del arco que en otras ocasiones, menos encarador y salió tempranamente reemplazado.
Fabián Espinoza: ni siquiera fue a cuentagotas. Cuesta encontrar alguna situación medianamente de riesgo que saliera de sus pies, salvo cuando buscó un penal que no fue. Vial necesita mucho más de los dos Espinoza y Salgado, sino es imposible abrir el arco.
Gustavo Gotti: el primer tiempo fue prácticamente una llegada para cada lado y la única de Vial fue un córner cabeceado por un defensor. Los de arriba se juntaron muy poco y el argentino dejó su lugar a ver si aparecía otro más inspirado.