Lluvia y granizos: el techo lila comienza a hacer agua
18 de Julio 2022 | Publicado por: Paulo Inostroza
Morados caen otra vez en casa y terminan con nueve hombres para bajar al quinto puesto. Vargas falló un zurdazo de manera increíble y Del Solar metió a Manzo sin saber que tenía amarilla. Se fue expulsado.
No solo perdió. Otra vez mereció perder. Deportes Concepción fue superado por Trasandino, cayó 2-1 en casa, terminó con nueve hombres en cancha y bajó al quinto puesto. Lluvia torrencial sobre las cabezas lilas, otro juego para el olvido.
Abrió la cuenta a las 12’ Lucas Simón, con gran definición de zurda, y la visita se generó siete ocasiones claras para anotar. ¿Y el “León”? Un tiro libre alto de Cristóbal Vargas y un remate arriba de Juan Sebastián Ibarra que Ortega mandó al córner, desde donde salió el empate con cabezazo del propio delantero.
Pudo desnivelar Gabriel Vargas, pero elevó en plena área chica, y en la siguiente Tomarelli puso el 2-1 con tiro libre a los 71’. Ahí el local intentó con algunos cambios, pero extrañó la gran cantidad de ausentes, mientras el equipo de “Pancho” Arrué amenazaba a la contra y pudo aumentar con Llanos y Malo errando bajo el arco.
El técnico Óscar del Solar señaló que “el equipo intentó ir siempre hacia arriba, aunque nos faltó juego, cambiar bien las marcas por la izquierda. Nos quedamos sin nada, pero tuvimos una jugada clave para ponernos en ventaja y en la otra nos ganan con un tiro libre. Corregimos cosas en el segundo tiempo, nos vimos mejor. Llevo años en esta profesión y estoy sereno, he estado en situaciones donde todo parecía irremediablemente perdido y terminamos consiguiendo cosas importantes”.
Los morados regalaron un tiempo, empujaron más en el segundo y cayeron ante un rival que generó más y confirmó su buen momento.
La Figura
Hubo muy poco que destacar en el dueño de casa y los mejores del encuentro corrieron por cuenta de Trasandino. La velocidad de Aldrix Jara resultó incontrarrestable y lo mismo con el incisivo Jaison Miralles por la misma banda derecha del ataque. Ambiado nunca pudo con ellos y tampoco tuvo demasiado apoyo.
Pero hay que destacar alguna pieza local y tal vez lo mejor haya sido la garra y como fue a todas Lautaro Rigazzi, que también se atrevió a adelantar líneas en el segundo tiempo. ¿Algo más? Puede ser Cristóbal Vargas en las pelotas detenidas y los buenos minutos de Sebastián Torres sustituyendo a Toledo, pero en cualquier caso es un “destacado” así bien entre comillas. Otra bajísima presentación de un equipo que llegó tres veces con claridad al arco de Edwin Ortega y el empate habría sido demasiado premio.
El Villano
La entrada de Fabrizio Manzo a los 88 minutos ya fue extraña. ¿Estaba o no estaba para jugar? Lo cierto es que reemplazó a Cristóbal Vargas, cansado y con tarjeta amarilla, pero quedaba muy poco y el volante también estaba amonestado, desde el banco de suplentes. Era el jugador más esperado, después de 7 fechas sin fútbol y duró apenas dos minutos en el campo de juego. En la zona media, jugada intrascendente, tira una patadita corta y se gana la segunda tarjeta. Triste retorno, baja importante ante Iberia. “No advertí que estaba amonestado. Si no, no lo habría hecho entrar”, explicó Del Solar.
Momento Clave
El “León” tuvo su momento justo después del gol de Ibarra, ganando un muy buen cabezazo tras tiro de esquina. Quizás no merecía tanto, pero pudo ganarlo cuando a los 68’ Gabriel Vargas se encuentra con un buscapié y, en posición frontal a Ortega, eleva increíblemente su remate de pierna zurda. En plena área chica. Habría sido anecdótico, pero en la jugada siguiente, una falta a la salida del área fue ejecutada con muchísima calidad por Luciano Tomarelli, quien decretó el 2-1 pateando al palo de Bernedo. Goles que no conviertes en un arco…
Primer Golpe
Concepción entró totalmente dormido y para peor recibió una bofetada apenas se acomodaba en Collao. Aldrix Jara demostró que sería factor metiendo un tacazo a Lucas Simón, que a los 12′ definió como un jugador que no es de Segunda, con zurdazo abierto imposible para Bernedo. Con ese tanto, la visita manejó el primer tiempo a su antojo.