Cada vez más cerca del ‘Bi’. La Universidad de Concepción dio un paso gigante de cara a la defensa de la corona de la Liga Nacional de Básquetbol, luego de derrotar a Deportes Castro en el tercer partido de semifinales, quedándose con la llave por un contundente 3-0 y avanzando a la final del torneo más importante del cesto chileno.

El quinteto auricielo venció a domicilio a los chilotes por 77-67 (parciales a favor de 25-18, 16-17, 16-22 y 20- 10), para convertirse en el primer finalista del certamen y el único invicto tras una liguilla perfecta en la que no ha cedido derrotas.

En un encendido gimnasio municipal castreño, donde la hinchada local se hizo sentir con fuerza, los auricielos supieron aprovechar toda su experiencia para sacar adelante un duro encuentro ante un rival que salió decidido a mantenerse vivo en la serie. Encabezados por su capitán, Diego Silva, Eugenio Luzcando, Evandro Arteaga, Jerry Evans y Arnold Louis, quienes alinearon como titulares, y complementados por nombres como Sebastián Carrasco, Eduardo Marechal y Kevin Rubio, el Campanil fue superior en todos los aspectos del juego, mostrando un espíritu a toda prueba cuando las cosas se complicaron.

Todavía falta la final

“Uno tiene su experiencia. Sabía que no iba a ser fácil, esto no es llegar y sumar, decir que porque ganamos por 40 en Concepción íbamos a ganar fácil, es falso. Los partidos hay que jugarlos, el rival tiene sus méritos, además que tampoco estamos exentos de los nervios, de la ansiedad”, partió analizando el técnico universitario, Cipriano Núñez.

“Fue un partido con diversas facetas donde abrimos bien, dinámicos y con confianza. Después fuimos cayendo en errores defensivos, en rotaciones malas de balón y en algunas pérdidas. A pesar de tener buena selección de tiros, no convertimos tiros abiertos fáciles y el rival se metió con unos triples increíbles de Owen, sacando armas que no teníamos contempladas, lo que les abrió el camino”, complementó.

En ese sentido, el entrenador auricielo destacó la capacidad del equipo para sobreponerse. “Lo positivo es que después supimos manejar los tiempos, volvimos a reconstruir, aprovechamos la experiencia y apareció la calidad de juego de algunos que controlaron el balón. Ahí seleccionamos mejor los movimientos, guiamos el balón y pudimos volver a correr bien la cancha, provocando que aparecieran las faltas de ellos. El trabajo fue impecable, sabíamos que íbamos a tener algunos errores porque no se juega igual de local que de visita, pero lo sacamos adelante”, sentenció.

Uno de los que entró de gran manera y en momentos claves del duelo fue Sebastián Carrasco, con 16 minutos de buen aporte para su equipo. El joven base del Campanil, se mostró satisfecho por esta segunda final consecutiva. “Es un alivio ya estar en otra final, era una presión que teníamos por el equipo que poseemos, así es que queremos disfrutarlo lo poco que podamos. En lo personal pude ayudar al equipo a ganar y estar en una nueva definición, y eso es lo importante. Durante el partido nos vimos abajo en un parcial que empezamos muy mal, en el tercer cuarto, pero valoro que nunca nos echamos a morir, que siempre hubo palabras positivas pese al momento en que estábamos y lo supimos dar vuelta”, expresó.

Ahora la UdeC toma palco y espera rival de la serie entre Los Leones y CD Valdivia, que al cierre de esta edición disputaban su tercer partido, con ventaja de 2-0 de los felinos.