El ex técnico de Fernández Vial repasó su paso por el club en su primera entrevista tras dejar al Almirante: su relación con Arturo Sanhueza, la insistencia con Sebastián Zúñiga, por qué no utilizó más tiempo a la dupla Vranjican-Gotti. Además, dijo que le gustaría volver y "cerrar esta historia que quedó inconclusa".
Tras su salida del club, Claudio Rojas habló por primera vez con Diario Concepción como ex entrenador de Fernández Vial. Y comenzó diciendo que “he recibido sólo palabras de agradecimiento de todos por el trabajo realizado. Harta tristeza también por cómo se terminó todo”.
Además, indicó que “aun no comienzo el proceso de análisis más profundo. Partiré revisando los partidos, la planificación estratégica del año, el armado del plantel. En este momento, prefiero no autoflagelarme y con datos más acabados de cada encuentro hacer un balance. Tuvimos partidos brillantes, con la UdeC, Iquique, Santiago Morning o Magallanes, pero no haber ganado nos fue llenando de desconfianza y no pudimos salir nunca de eso”.
Armado del plantel: a esta altura, hay temas que son privados. La conformación de plantel se hizo con un grupo de trabajo, donde no decido yo únicamente. Participan director deportivo, cuerpo técnico y directorio en conjunto, y dentro del mercado se eligió pensando en dar un salto de calidad a lo que teníamos. La mayoría eran de trayectoria, con ascensos, campañas importantes, salvo los dos chicos que llegaron a préstamo de Colo Colo (Ethan Espinoza y Nicolás Garrido)
Valoración de Sebastián Zúñiga: preferiría no referirme a nombres propios, porque no viene al caso. En el momento que decidí que alguien fuera titular o suplente pensaba que era lo mejor para aquel momento o partido. Me desgasté muchas fechas buscando estos complementos entre un sistema de juego, no pude dar nunca con un once tipo y en eso igual tiene que ver el rendimiento de cada jugador.
Opción de más minutos para dupla Vranjican-Gotti: no tengo un sistema único, creo mucho en los jugadores, en su rendimiento y de qué manera puede representar mejor nuestra forma de jugar. Es una fórmula, la de tener dos centrodelanteros referentes, que no utilicé mucho primero porque no me identifica tanto futbolísticamente, y segundo sentía que no era lo mejor. Pensaba que debíamos tener una banca fuerte para el recambio en los segundos tiempos. Igual quería darle continuidad a Kevin (Harbottle) para que pudiera retomar su nivel.
Situación de Ángel Guillard: el año pasado jugó poco, pero tuvo el mejor registro de goles en relación a la cantidad de minutos. en 2022 jugó poco, pero sigue siendo un chico en formación. Ha hecho goles en el torneo de proyección, pero no se compara en absoluto con la competencia de los primeros equipos. Ojalá que de aquí en más tenga más minutos, es un jugador interesante. En su momento elegí a otros, y es potestad del técnico hacerlo.
El hincha dejó de creer en su trabajo: la gente va a ver a su club ganar, no le interesa tanto la propuesta. Entiendo los cantos en contra, llevábamos 11 partidos sin ganar, es respetable. Cuando cantan en mi contra los más afectados son los jugadores, que seguirán representando al club. En mi caso, un canto a favor o en contra no me significa nada, no trasciende mis pensamientos ni convicciones.
¿Sintió siempre el apoyo del plantel?: Sí, en la forma de entrenar lo veía, siempre muy comprometidos, entrenando fuerte. Tenemos registro de datos objetivos y siempre hubo una entrega a toda prueba. Debe haber existido malestar de quienes no eran considerados titulares o jugaban menos minutos.
Relación con Arturo Sanhueza: era franca y directa. Mucha gente se preguntaba por lo que pasó en San Luis, donde se molestó porque lo saqué. Fue así, yo me molesté con él igual pero quedó todo en la cancha. Los hombres del fútbol arreglamos nuestros problemas mirándonos a la cara, y si ahí tiene que salir alguna chuchá (sic) o levantamiento de voz puede pasar y no hay ningún problema. Cualquier tema así lo arreglé entre cuatro paredes… Cuando ganábamos y esto pasaba no ocurría nada.
Lesión de Fabián Espinoza: cuando se lesionó, estaba siendo el jugador más desequilibrante en ataque, hizo jugadas increíbles el “Mágico”. Cualquier entrenador quisiera tener un jugador como él, y su ausencia coincidió con los partidos donde bajamos nuestra producción ofensiva, pues nos entregaba mucho desequilibrio.
¿Le hubiese gustado seguir? Sí, al menos terminar la primera rueda. Quedaban dos partidos, uno va a Calama sin mucho que perder tampoco. Aunque después analizándolo más en frío, creo que fue el momento justo para sacarle la mochila de presión a los jugadores y que puedan subir su autoconfianza, que vuelvan a creer en sus condiciones. Superamos a casi todos los equipos, pero no lo pudimos concretar en resultados.
Empaparse de Vial: siento que esta historia quedó inconclusa, pero la vida tiene revanchas. Será extraño ir a otro club, pero somos profesionales y en cada institución uno dará el 100%. Si llega otro club me empaparé de su historia, cada uno tiene la propia…Pero aun es difícil, no digiero bien todo.
¿Con su salida Vial puede mejorar? Sí, creo que pueden levantar los rendimientos desde la autoconfianza de los jugadores, hay un muy buen grupo de trabajadores.
¿Volvería a Fernández Vial? Sí, de todas maneras, las veces que requieran mis servicios. Fui muy feliz incluso en los momentos complicados, es un club hermoso y quiero terminar de escribir esta historia que quedó inconclusa…El primer amor nunca se olvida.