El uno a uno de Deportes Concepción en el clásico penquista

28 de Marzo 2022 | Publicado por: Ricardo Cárcamo
Fotografía: Comunicaciones Deportes Concepción

Morados mostraron buenos rendimientos individuales en el duelo en Collao, aunque también hubo nombres que quedaron un poco al debe.

Vicente Bernedo: muy bien con los pies, incluso arriesgando más de la cuenta a veces, y también tuvo al menos dos tapadas de gol y descolgó bien varios centros. Saca ventaja a Castillo en la lucha por ser titular.

Dylan Aravena: bajo partido, condicionado por tener que jugar por la banda. Vial se dio cuenta de su incomodidad y cargó sus ataques por ese sector, donde fue superado por Ponce en varias ocasiones. Además, Carrasco le ganó con facilidad en el primer gol del duelo.

Pedro Navarro: correcto partido del central. Bien por arriba, ganó casi todos sus duelos aéreos, además tuvo un par de cierres por bajo y siempre sale jugando con criterio desde el fondo.

Maximiliano Riveros: lo suyo es la fuerza, la entrega y la fiereza en el mano a mano. Por arriba ganó todo y por abajo también estuvo sólido. No es un tipo dotado técnicamente, y por eso no arriesga más de lo necesario.

Agustín Ambiado: tuvo un gran cruce comenzando el duelo, cuando un disparo de Fabián Espinoza le rebotó e impidió la apertura de la cuenta. Se fue diluyendo con el correr de los minutos, y tampoco se proyectó durante el encuentro.

Matías Toledo: la amarilla que le mostraron el primer tiempo condicionó su juego. La alta intensidad del encuentro le pasó la cuenta en lo físico, y pese a que no hizo un mal partido queda la sensación que puede dar mucho más.

Fabrizio Manzo: uno de los mejores morados. Mostró personalidad, criterio para elaborar el juego y de sus pies nacieron las principales acciones de riesgo de su equipo. Además, pudo convertir al final del primer tiempo con un zurdazo que salió desviado por poco. De no mediar un tema físico, no se entendió su salida.

Joaquín Verdugo: intermitente, pero mostró que es un jugador que tiene pasado en Primera. Pide la pelota, encara y también prueba de distancia, algo que debería tratar de hacer más seguido en los próximos encuentros.

Alexander Bolaños: tras su gran partido ante Naval, había mucha expectativa en su rendimiento, y no cumplió. Las pocas veces que se atrevió a encarar fue buen contenido por los zagueros aurinegros. A un tipo de su velocidad y habilidad hay que pedirle siempre que se atreva, más allá que no pase siempre. Bajo encuentro.

Gabriel Vargas: el capitán corre, mete, se entrega al máximo, pero como le pasó tantas veces en Segunda no tuvo chances claras de anotar. A veces, el recogerse tanto a buscar la pelota le quita chances de llegar a finalizar la jugada, como le pasó el primer tiempo ante unos centros de Sepúlveda.

Ignacio Sepúlveda: el mejor del ataque morado. Siempre que encaró generó peligro y además fue generoso en el apoyo para recuperar la pelota. No se entendió su salida.

Cristóbal Vargas: entró en un momento donde su equipo aun trataba de “sacarse” la apertura de la cuenta, y eso complicó su desempeño. Igual, mostró destellos de su habilidad ya conocida y, de no mediar inconvenientes, debería ser titular con el correr de los partidos.

David Henríquez: tiene personalidad, se atreve y encara, pero jugar tan pegado a la banda limita un poco sus opciones. Tal como ante Naval, tuvo un buen ingreso.

Sebastián Torres: se atrevió a rematar de larga distancia a minutos de su ingreso, y aunque se fue muy desviado habla bien de su personalidad.