Expulsión de Ethan Espinoza obligó a que la Maquinita se reordenara y, a ratos lo hizo de buena forma. No debió ser un partido sin goles, aunque ambos tuvieron claras ocasiones por igual. Punto con justicia.
Vial enfrentaba un rival ganable en el papel y en la práctica también. Wanderers estaba para sacarle tres puntos, pero la temprana expulsión de Ethan Espinoza (22’) cambió los planes.
El local aguantó después de la roja y salió con todo en el segundo tiempo, donde pudo desnivelar a través de Ponce y Vidal. Gotti también intentó con zurdazo alto. Fue 0-0 en un juego donde los caturros tuvieron tres situaciones clarísimas para marcar y Jorge Garcés se fue abucheado, sin creer esa farra bajo el arco.
El cuadro de Rojas demostró otra vez su solvencia defensiva, más allá de lo que sufrió Ponce con Castro en la primera fracción. Con diez, Vial jugó bien y no renunció al ataque. Loyola se multiplicó, Fabián Espinoza sí tomó las riendas y Gotti fue Gotti, peleando siempre, pero con un Harbottle al lado que aún no se ve al cien.
¿Cuesta ganarle a Vial? Seguro que sí, pero también es cierto que a Vial le cuesta ganar. Al final lo perdieron Castro en área chica y Plaza empalmando un tiro que rozó el palo. El punto no fue malo, pero otra cosa debió haber sido con once.
Salió en camilla de tanto correr y se llevó los aplausos de la gente. Nuevamente, Felipe Loyola fue tremenda figura de Fernández Vial y si, durante largos pasajes del partido no se notó el hombre menos, fue porque el “Pipe” corre por dos. Siempre bien ubicado, fiero, va a todas, pero además tiene tanto despliegue físico que se da maña para ir arriba y lo hace con criterio. Se tiene tanta confianza que hasta patea tiros libres, aunque le falta pulir ese aspecto. Loyola es el socio ideal para que Arturo Sanhueza pueda iniciar la construcción de juego sin desgastarse. Una dupla que sigue resaltando.
Sería exagerado llamarlo villano porque tal vez el árbitro Felipe Jara pudo haber manejado la situación con mayor flexibilidad y mostrarle solo amarilla, aunque la roja se justifica. Pero también es cierto que la expulsión de Ethan Espinoza condicionó el partido porque fue demasiado pronto, pues corrían solo 22 minutos de juego. El volante llegó tarde a una pelota y puso los dos pies por delante al encontrarse con Cepeda. Vial tuvo que redoblar esfuerzos y pudo parchar un poco ese vacío, pero tal vez con once lo ganaba. Wanderers demostró ser de los equipos débiles de la B.
Habían pasado solo diez minutos después de la expulsión de Espinoza y Vial todavía se veía incómodo, en los mejores momentos de “Popín” Castro desbordando sobre todo por el lado de Ponce, pero a los 31’ se cambió de sector y encaró hacia adentro para azotar el travesaño con derechazo terrible. Pero no solo eso, en la siguiente cabeceó Plaza frontal bajo el arco y otra vez le dio al horizontal. Benjamín Vidal terminó sacando el peligro desdela línea en una jugada de gol que pudo haber sido irreversible. Luego de eso, Vial se afirmó en la zona defensiva.
El inicio del segundo tiempo fue muy bueno para Vial, sin cambiar nombres, pero con Espinoza y Loyola acompañando de cerca a los delanteros. Y así generaron dos situaciones clarísimas. A los 59″ un buen testazo de Benjamín Vidal, sacado desde el suelo por Hurtado y luego, a los 61″, Ponce desviando solo tras rebote del portero. Debió ser el 1-0.