Demostrando que la pasión está intacta a 40 años de la épica

18 de Enero 2022 | Publicado por: Samuel Esparza
Fotografía: Enzo Llanos

El sonar de las trompetas puso la piel de gallina a más de alguno de quienes se dieron cita en la Laguna Chica de San Pedro de la Paz, cuando los acordes del himno de los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 empezó a sonar. Más aun cuando, a la par, imágenes de la cita deportiva eran mostradas en pantalla gigante, con los mismos protagonistas que ahora, cuatro décadas después, se reunían para evocar viejas glorias.

Esa emocionante secuencia fue parte de la jornada especial en Llacolén, hasta donde llegaron los miembros del equipo chileno de remo que hizo historia al disputar la final del Ocho con Timonel en la mencionada competencia.

Rodrigo Abasolo (timonel), Víctor Contreras, Mario Castro y Zibor Llanos, todos del Canottieri Italiano de Concepción; Carlos Neyra, del CD Español; Giorgio Vallebuona, del Deportivo Alemán, y Marcelo Rojas, Alejandro Rojas y Rodolfo Pereira, del Club Fénix de Valdivia, participaron de la emotiva instancia en la que se reencontraron casi 40 años después para celebrar el hito.

Entusiasmo intacto

Por un momento el tiempo pareció detenerse cuando el grupo de hoy sesenteros deportistas -todos vestidos de rojo- abordó el bote en el mismo orden que lo hicieron en Los Ángeles 1984. El timonel, Rodrigo Abasolo, tomó el mando, los fue llamando uno a uno a sus puestos, y se fueron al muelle

Claro, el pelo ya no estaba largo ni los rostros eran juveniles. Esta vez las canas cubrían las cabezas y la experiencias de toda una vida surcaba sus frentes. Pero había algo intacto, y era la irresistible pasión del contacto con el agua, el deseo inagotable de remar hasta que ya no queden más fuerzas, hasta que ya no quede vida.

Pablo Latorre, presidente del Club Canottieri Italiano de Concepción, destacó la que consideró una ocasión única. “Se cumplió a cabalidad el objetivo de la actividad. Fue muy emocionante verlos juntos después de tantos años, se respiraba la emoción de reencuentro y esa ansiedad por vivirla. Fueron la generación de oro de los años ‘80, los referentes para muchos quienes escogieron seguir los pasos del sacrificio para lograr grandes resultados”, sostuvo el dirigente, quien cerró con una descripción que agranda la leyenda del grupo de remeros.

“Lo que nos llamó la atención a todos fue que salieron al agua con un nivel técnico y un muy buen conjunto , como si no hubieran pasado cuatro décadas desde la ultima vez que remaron juntos”, sentenció.