Desazón auricielo. UdeC sumó su cuarto partido consecutivo en el Ester Roa, donde la cosecha de puntos no fue la esperada. De las 12 unidades en disputa, el Campanil logró sólo 5, tras vencer 3-1 a San Marcos de Arica, igualar 1-1 ante Magallanes, 0-0 ante Fernández Vial y caer 1-2 ante Deportes Copiapó la noche del pasado lunes.

Sobre el choque ante el equipo de Erwin Durán, el DT Hugo Balladares comentó que “el rival nos presionó la salida y nos costó mucho encontrar las oportunidades de profundizar hacia nuestros delanteros. No tuvimos el nivel que hemos mostrado en otros partidos ni la capacidad para generar situaciones de gol. Hemos perdido nuestra capacidad de tranquilidad con la pelota. La derrota pasa porque nos encontramos con un equipo que supo manejar los tiempos de juego con el balón, sobre todo en el primer lapso”.

El entrenador de UdeC fue autocrítico y aseguró que “soy el primero que pongo la cara en relación a lo que podemos seguir realizando, lo que no debemos hacer y como lo solucionamos. Nuestros objetivos siguen claros, no hemos perdido el querer buscar la liguilla y el ascenso directo. Estamos en una situación complicada, es verdad, no esperábamos este término de la primera rueda con el puntaje que tenemos. Para nosotros no es una buena campaña, entiendo la disconformidad de la gente y lo que ocurre con el hincha, pero estamos trabajando para buscar soluciones y las vamos a encontrar”.

Consultado si está preocupado por el presente del equipo, y sobre las fortalezas del grupo en relación al último partido, Balladares afirmó que “hemos perdido la capacidad del inicio de torneo que nos permitió posicionarnos en los primeros puestos y ser un animador de la categoría. Los equipos con nosotros hacen su mejor esfuerzo y máxima exigencia. Nos ha costado volver a encontrar el juego que nos permitió entusiasmarnos con la capacidad goleadora y el volumen de ataque que tuvimos. La principal fortaleza ha sido no bajar los brazos, ir al frente con fútbol y sobreponerse a situaciones adversas. Es lo que trabajamos en la semana y hemos estado con la problemática que hemos empezado siempre desde atrás. El primer autocrítico soy yo, pero nuestros primeros tiempos son muy débiles y frágiles”.

Por último, sobre los incidentes del final y la expulsión de Riveros que lo dejará fuera, en primera instancia del partido ante Santiago Morning, el DT del Campanil dijo que “trabajamos el autocontrol para no caer en provocaciones. No es algo que me agrade, para nada. Somos la cara visible de la Universidad y tenemos que seguir aprendiendo. No somos un plantel tan numeroso como para perder jugadores. La pasión y ofuscamiento a veces te llevan a ciertas conductas que no van de la mano con lo que queremos”.