
Fernando Alonso terminó primero su primer test completo con el Renault RS20 en el circuito de Yas Marina, en Abu Dabi, y no solo superó a los jóvenes y menos jóvenes que le acompañaban en la pista, sino que logró un mejor registro de 1:36.333 con el que superó finalmente por una décima el 1:36.406 de Daniel Ricciardo en la Q2 del pasado sábado, en el mismo trazado.
Después de dos años fuera, Alonso está en tiempos del primer piloto oficial que ha ocupado ese coche todo el año. El español habría hecho su mejor vuelta con los C5 de 2021, una gomas de carcasa más dura que las de 2020 que usó el australiano. Ese registro indica que Fernando no ha perdido prácticamente nada en dos años de inactividad con estos monoplazas, y que se presenta de regreso con fuerzas renovadas y batiendo a los Mercedes, algo que nadie logró el año pasado en los mismos test.
Fernando Alonso dejó hace dos años la F1, para competir en el WEC, la Indy, el IMSA y el Dakar, y en todos esos coches, de forma muy competitiva. Esa era la principal duda que podían albergar los periodistas y aficionados, más que el propio piloto. Pero es cierto que a lo largo de la historia ha habido casos en los que una estrella regresaba, como Schumacher en 2010, y esa chispa a una vuelta había mermado. En el caso de Alonso, no se le ha notado nada de eso. Más bien parece la vuelta de Lauda, Prost o Mansell, que lo hicieron en su día para volver a ganar Grandes Premios.