Festejo uruguayo en el CAP Acero. Con el empate 1-1, el equipo de Gustavo Florentín dijo adiós al torneo internacional.
No fue capaz de darlo vuelta y ni siquiera pudo ganar. Huachipato empató 1-1 ante Fénix en el CAP Acero y dijo adiós a Copa Sudamericana.
Gustavo Florentín alineó un equipo con una propuesta mucho más ofensiva en relación a las oncenas que acostumbra a parar en cancha. Pero no fue suficiente. Martínez, Escobar, Mazzantti y Sánchez Sotelo fueron las cartas en ataque de un Huachipato que, como de costumbre, careció de profundidad. Al equipo le faltaba generación de fútbol y, por lo mismo, César Valenzuela entró en el segundo tiempo. ¿El perjudicado? Cris Martínez, quien no saltó a la cancha en la etapa final.
En la usina seguía dando vuelta la oportunidad de gol errada por Joffre Escobar -quien con un débil remate le entregó la pelota al portero De Amores antes de terminar el primer tiempo- cuando arrancaron los 45 minutos finales. Huachipato necesitaba ganar por dos goles de diferencia y por ello ilusionó el autogol de Ángel Rodríguez al 73″. Una descoordinación defensiva provocó el error en la zaga de Fénix. Así, tras el centro de Gutiérrez y una salida a cortar en falso, el acero se logró poner en ventaja.
La ilusión no duró ni siquiera diez minutos. Huachipato adelantó las líneas y lo pagó caro. Un ataque uruguayo al 81″ terminó con un centro desde la derecha que Nequecaur transformó en gol. El equipo de Florentín necesitaba dos goles para forzar la serie a penales y tres si quería clasificar directo. Pero no hubo tiempo, ni ideas. Ovando no fue solución en ataque y con frustración el equipo resignó un amargo empate. El acero no supo jugar la llave y con un global de 2-4 se despidió de Copa Sudamericana.