El amargo 2-2 ante Colombia dejó aspectos positivos a rescatar y otros inquietantes. Reinaldo Rueda sufrió gran cantidad de bajas previo al estreno clasificatorio y debió alinear formaciones inéditas, donde varios jugadores recién se estrenaron como titulares en la selección adulta:

Brayan Cortés: Cumplió. La lesión de Arias horas antes del partido lo hizo ser titular y el portero respondió. No tuvo responsabilidad en los goles, dio seguridad y sus gritos para ordenar la defensa no pasaron desapercibidos.

Mauricio Isla: Alternó buenas y malas. Tuvo responsabilidad en el primer gol al no cubrir a Lerma en el cabezazo, pero se proyectó y fue alternativa en ataque. Se entiende a la perfección con Alexis.

Francisco Sierralta: Un acierto de Rueda. Fue titular en ambos partidos tras las lesiones de Medel y Maripán y estuvo a la altura. Demostró solidez en el juego aéreo, aunque volvió a recibir tarjeta amarilla y se perderá el próximo partido ante Perú.

Paulo Díaz: Anuló a Duván Zapata. Atento en las coberturas, rápido, fuerte y fiero en la marca. Punto alto ayer y clarísima opción para seguir siendo titular. Tuvo mala suerte al habilitar a Falcao en el 2-2 sobre el final.

Sebastián Vegas: Tuvo responsabilidad en el primer gol colombiano. Bajó su nivel en relación al partido pasado, demostrando poca seguridad e incomodidad. Fue uno de los puntos bajos ayer en el Estadio Nacional.

Claudio Baeza: Respondió. Cortó el juego colombiano en mitad de cancha, ayudando a Vidal en las coberturas,  aportando orden y distribuyendo. Otro acierto del entrenador. Reemplazó muy bien a Erick Pulgar.

Charles Aránguiz: Muy bajo nivel. No gravitó, erró la entrega de muchos balones, se mostró muy impreciso y cometió varias infracciones. Llamativo su opaco rendimiento. Se espera mucho más de alguien con su categoría.

Arturo Vidal: Tuvo responsabilidad en el predecible pase a Vegas que terminó en el 1-0 de Colombia. Enmendó su error luchando, yendo a buscar el empate y así le cometieron el penal que él mismo transformó en gol. Un líder que contagia. Aunque no tuvo uno de sus mejores partidos, siempre marca presencia y destaca por sobre el resto.

César Pinares: No lució como en U. Católica y con el trámite del partido se cansó. Se vio incómodo cargado a la orilla, nunca pudo desequilibrar y terminó siendo reemplazado.

Alexis Sánchez: El distinto. Se pone la “Roja” y recupera la confianza. Aportó frescura, marcó el 2-1 y fue muy golpeado por los rivales. Una patada de James pudo sacarlo del partido. Con otro jugador de su nivel en ataque, la historia sería distinta. A disfrutar los años que le quedan defendiendo a la selección.

Eduardo Vargas: Si hubo dudas en torno a su convocatoria, ahora se entienden a la perfección. De los peores partidos que ha jugado con la “Roja”. Intrascendente, errático y con desidia. No fue aporte y debió ser reemplazado muchísimo antes.

Cambios: 

José Pedro Fuenzalida: Justificó su suplencia tras la titularidad ante Uruguay. Ingresó al 74″ por Pinares y no aportó el desahogo que quería Rueda por la banda derecha. Estuvo lejos del nivel que muestra en U. Católica.

Nicolás Díaz: Ingresó al 90″ por Vargas con la misión de aguantar el 2-1 parcial y, con ello, la “Roja” quedó con línea de cinco en defensa. Ganó terreno en esta doble fecha para futuras convocatorias.

DT Reinaldo Rueda: Que la negativa cosecha de puntos en estos partidos no haga olvidar la mala suerte que tuvo para armar la convocatoria. Debió nominar de emergencia a varios jugadores y apostó por el estreno como titular de varias caras nuevas en partidos oficiales. Su gran error fue entregarle la iniciativa a Colombia en la parte final del segundo tiempo, que terminó costando caro. Pudo haber movido antes la banca.