
El alero de los Rockets, Bruno Caboclo, rompió involuntariamente la cuarentena lo que obligó a la NBA a aplicarle el protocolo para que se extienda su periodo de aislamiento en el hotel donde se aloja su equipo en Orlando.
Según explicó Espn, las normas estaban claras y tras llegar al Walt Disney World Resort la semana pasada, cualquiera que sea sorprendido saliendo del complejo por una razón no autorizada o rompiendo el período de cuarentena inicial (que cubría estar confinado en su habitación de hotel hasta pasar múltiples pruebas de coronavirus durante 48 horas), estará sujeto a los protocolos de reingreso de la liga.
Esto significa tener que someterse a pruebas más completas de coronavirus, PCR, y un periodo más largo de cuarentena en su habitación, que será de 10 días. Una vez que lo cumpla, el jugador podrá unirse a la disciplina de trabajo de los Rockets.
Caboclo se disculpó señalando que desconocía que no pudiera salir de la habitación.