El arquero boliviano describió la estricta cuarentena que vive en La Paz, confesó que quiere volver a Chile y que ya estuvo muy cerca de llegar a un grande.
Se fue del país como estrella, pero con el paso del tiempo de a poco se le fue perdiendo la pista. ¿Qué fue de Carlos Lampe? El boliviano atajó dos años y medio en Huachipato, fue figura, llamó la atención del país por buenas actuaciones ante la “Roja” y así partió a Boca Juniors, un gigante del continente.
Aquello fue a fines de 2018. Hoy, desde La Paz y tranquilo en casa junto a su familia, el meta conversó con Diario Concepción y contó que está “en Always Ready, puntero y en buen nivel. Se armó un equipo para pelear arriba. Pero ahora, al igual que todos, estoy en cuarentena. Acá en Bolivia sólo puedes salir una vez a la semana a la calle, dependiendo en qué número acaba tu carné de identidad. Sábado y domingo no se mueve nadie. Y si te pillan, son muy estrictos los castigos, ya que te vas ocho horas preso y debes pagar una multa de alrededor de 90 mil pesos chilenos”.
Pero donde si hay similitudes con Bolivia, es en lo futbolístico. Varios clubes en Chile dejarán de pagarle a sus jugadores, quienes apelarán al seguro de cesantía para recibir su sueldo. “Aquí se reunieron los 14 equipos y dictaron que nos iban a bajar un monto, lo cual ninguno de los jugadores aceptó. Nos querían descontar el 50% de marzo, el 75% de abril y el 75% de mayo. Sabemos que hay que ceder, pero es mucho”, comentó Lampe.
A fines de 2018, la vida de Lampe cambió tras llegar a Boca Juniors. “Sé que no pude jugar, pero nunca pensé que viviría algo así. Lo pasé espectacular y no me arrepiento. Estar en Boca fue un sueño que disfruté a mil, aunque explota tu celular todo el día. Esos meses fueron un premio a mi carrera”, agregó el boliviano, que pese a ello no pudo mantenerse en el fútbol argentino.
“Tenía para irme a Huracán, pero Huachipato no me dejó y quedé con las ganas. Llegué a San José, que jamás pensé que le quedaría debiendo plata a ellos, ya que nunca pagaron el préstamo”, confesó el boliviano de 33 años, quien hoy pelea por el título en un club que ha invertido bastante y que esta temporada jugó Copa Sudamericana.
El pase de Lampe pertenece aún al acero, por lo que el portero tiene la ilusión de retornar a Chile. “Me gustaría tener un paso allá y otro en Argentina. Tuve oportunidad hace poco de volver al torneo chileno, pero no se pudo. Me gusta el fútbol donde se juega bajo presión, por lo que busco un desafío así. Quiero volver y ojalá jugar en un equipo grande, donde sepa que no puedo equivocarme y tenga oportunidad de salir campeón. Esa exigencia me atrae”, aseguró el boliviano, quien añadió que “tuve la posibilidad en dos momentos de jugar en Colo Colo, cuando más cerca estuve fue cuando finalmente llegó Agustín Orión. Me queda pendiente jugar en un grande, ya que cuando estuve en Huachipato siempre mantuve un buen nivel y fui regular. Nunca me costó, excepto cuando tuve que acostumbrarme a jugar con los pies, ya que ese fue el legado que dejó allí Marcelo Bielsa”.
Hoy en Always Ready, el puntero de Bolivia junto a The Strongest, el arquero altiplánico no sólo ayuda a sus hijos en las tareas virtuales, sino que también estudia vía online y realiza el curso de entrenador para ejercer en un futuro. “Sólo espero que vuelva el fútbol, aunque si llega a retomarse en junio, por ejemplo, será a puertas cerradas, porque con esta pandemia tendremos por lo menos todo el año. Echo de menos Chile, sobre todo la comida peruana y el salmón”, sentenció el meta, que dejó grata impresión en su paso por Talcahuano entre 2016 y 2018.