El “histórico” Omar Merlo, desde Perú, recordó cada detalle del segundo título del acero. La usina dio el golpe, tapó bocas y festejó por penales en el CAP.
Con la clasificación abrochada a playoff, el primer rival del acero fue Palestino. Por más duro que fuese el equipo árabe dirigido por Astorga, fue un emparejamiento que agradó en Talcahuano.
La ida fue 1-1 en el CAP, en una tarde-noche de martes en la que Nicolás Núñez logró el empate a pocos minutos que Polic terminara el partido. Un resultado ingrato que para muchos casi era la eliminación de Huachipato en el torneo, pero el 2-1 obtenido en La Cisterna, cuatro días después, fue recién el primer tapabocas que dio el equipo de Pellicer en esa instancia.
La usina se vio, prácticamente de golpe, instalada en semifinales y a un paso de pelear por la copa. Un panorama impensado hace sólo unas semanas. Pero al frente había un rival que hasta ese momento era la enorme revelación del torneo: Rangers de Talca. Milton Caraglio, Felipe Reynero, Ángelo Sagal, David Llanos y Nicolás Peric, eran algunas de las figuras que tenía el equipo de Dalcio Giovagnoli. En el CAP, el gol de Villalobos dejó en ventaja a un Huachipato que viajó rumbo al Maule a buscar un histórico paso a la final, pero Nery Veloso aguó la fiesta que Talca tenía organizada.
El arquero del acero atajó todo y, de no ser por él, la historia hubiese acabado en semifinales. Poco pudo hacer Nery para evitar el empate de Llanos al 90’, tras el gol de Braian Rodríguez al 53’. Un sufrido 1-1 dejó a Huachipato a 180 minutos de su segunda estrella.
El Clausura 2012 fue el último campeonato que se jugó con playoff y regaló a millones de fanáticos del fútbol chileno, la definición más emotiva en largo tiempo.
El rival de Huachipato fue Unión Española, que clasificó apenas a la ronda de los ocho mejores, pero que se dio el lujo de eliminar a Colo Colo y la “U” de Sampaoli. Emilio Hernández, Emiliano Vecchio, ‘Pato’ Rubio y Sebastián Jaime brillaban por esos días y así lo hicieron en el duelo de ida. Fue un 3-1 que parecía sepultar el sueño acerero.
“Nosotros sabíamos que íbamos a dar vuelta la llave”, afirmó desde Perú a Diario Concepción, Omar Merlo, quien el 9 de diciembre de aquel 2012 se transformó en ídolo del club. Actualmente en Sporting Cristal, el defensa recordó que “en el CAP partimos perdiendo y fue durísimo, porque entramos a la cancha con la idea de mantener el cero en nuestro arco. Estaba todo muy cuesta arriba, pero ese gol nos despertó. Empezamos a jugar sueltos y con confianza, ya no había nada que perder”.
Unión Española ganaba 4-1 en el global y desde la galería sur, los hinchas hispanos levantaban un “7” festejando anticipadamente una copa que daban por segura. Pero al 36’ y 43’, Daniel “Chucky” González le dio vida a Huachipato y puso muy nervioso al rival. “Me emociono cada vez que recuerdo el partido o veo imágenes. Es el momento más importante de mi carrera, por lejos”, agregó Merlo.
Pero los minutos pasaban y al acero le faltaba un gol para llevar la serie a los penales. Ahí fue cuando al 88’, con todo Huachipato arriba, Merlo saltó y pivoteó un balón que Villalobos convirtió en gol. Fue uno de los estallidos más grandes en la historia del CAP Acero. El campeón se definiría desde los doce pasos.
Nery Veloso se agigantó en el arco y en una tanda de penales en la que Unión Española tuvo las opciones más claras para ganar y siempre fue arriba, el portero tapó los tiros de Díaz, Lobos y Leal. Tres tanques de oxígeno le dio el “Gato” a Huachipato, que en los pies de Miguel Aceval podía ser campeón. “Le quedó la pelota a él y ya nos sentimos campeones. Nunca nadie pensó que Lobos se lo atajaría, ya que Miguel tenía una pegada experta. Me dio un nerviosismo terrible, porque a mi me tocaba el siguiente y si ellos marcaban, yo podía perder el campeonato. Pero, por suerte, apareció Veloso”, comentó Merlo.
El defensa se paró frente al balón y por primera vez en su carrera iba a patear un penal. “¡Nunca en mi vida había lanzado uno!”, asegura hoy, agregando que “después de ese, lancé dos y erré ambos, uno contra Concepción y otro acá en Perú ante Sport Boys. Pero me sentí seguro, rematé y fuimos campeones. Ese día cambió mi carrera”.
Fue un tapabocas para quienes desde la capital aseguraban que Huachipato levantó el título sólo porque “les tocó un camino fácil” en comparación al resto. ¿Qué tuvo de especial ese equipo para cerrar el año gritando campeón? Merlo dijo que “Pellicer armó un grupo donde cada uno sabía que hacer. Hubo rendimientos altos, como Braian, Cortés, Villalobos, dos laterales que te ponían centros en la cabeza como “Firu” (Contreras) y Crovetto. Con Claudio (Muñoz) nos entendimos muy bien, Lorenzo (Reyes) era una máquina. Sandoval, Núñez y Pozo andaban muy bien, además del “Chucky, que tenía una pegada de locos. Y, finalmente, estaba el “Tigre” Muñoz, nuestro gran capitán. Siempre fue el que nos ayudaba, levantaba primero y daba la cara. Lorenzo usó la cinta porque él no jugaba, pero sabíamos todos que él era el capitán”.