Desde teletrabajo hasta clases online son algunas de las fórmulas que han implementado las principales instituciones deportivas de la provincia que han cerrado sus puertas acatando la cuarentena.
El lunes 16 de marzo, el Estadio Español de Chiguayante decidió cerrar sus puertas. A esa altura, se conocían los primeros casos de Covid-19 en el país y el concepto cuarentena aún era lejano. Hoy, en plena emergencia sanitaria producto de la pandemia, la medida cobra valor extra y se extiende a los más representativos clubes de la zona.
“Cuando se supo que habían contagiados en Chile decidimos el cierre completo para cuidar la salud de socios, trabajadores y población en general, porque tenemos gente de distintos lugares. Recibimos muchas felicitaciones por la proactividad y a la vista de los acontecimientos, creemos que fue la medida acertada”, comentó el gerente del estadio, Carlos Santana.
Siendo una de las instituciones con más variada programación, Santana explicó que debieron pararse todas. “Suspendimos todo, muchos talleres no deportivos como cocina, manualidades, pintura infantil y adulta que se detuvieron. Y en lo deportivo, nuestra corrida que estaba prevista para el 29 de marzo”.
El jefe de Deportes del Estadio Español, Ignacio Trucco, complementó que, “en abril teníamos calendarizado un G2 de tenis y volvíamos en septiembre con el ITF Junior del que no sabemos si se mantendrá la fecha, además nos iban a confirmar día para nuestro ITF Senior. En octubre teníamos nuestros torneos abiertos de la Hispanidad que esperamos mantener si a esa fecha está todo normal. Lo que sí queremos hacer es una actividad masiva cuando se acabe el virus, celebrando que no nos venció y que estamos listos para la actividad física”, cerró.
Similar enfoque mostró el Club de Campo Bellavista, donde según el gerente general, Luis Vicencio, se tomaron todas las medidas.
“Desde que se declaró la emergencia sanitaria, redujimos la atención al máximo asumiendo las acciones que las autoridades implementaron. Desde el 16 de marzo, nuestros colaboradores trabajan en turnos mínimos, para mantención general y seguridad del recinto, solo mantuvimos abierta la cancha de golf, las de tenis y áreas verdes, donde los socios hacían caminatas o trotes; el martes 24, se cerró para todos los socios”, detalló.
Vicencio enfatizó en el acuerdo con la comunidad del club. “Los socios manifestaron su preocupación por lo que significa económicamente esta situación, pero entienden que hay que cuidarse. Algunos más aproblemados solicitaron ayuda y se la dimos prorrogando las fechas de pago de este semestre. Todos entienden que nuestros colaboradores son muy importantes y se hacen los esfuerzos para que ninguno de ellos queden sin trabajo”, dijo.
Situación similar acontece en el CD Huachipato, que el 16 de marzo suspendió todas sus actividades deportivas, ramas, talleres y clases de fitness así como eventos masivos y sociales, con el cierre de la Ciudad Deportiva, medida que se tornó indefinida a partir del 27 de marzo. Lo mismo que en los Campos Deportivos Llacolén, donde el 15 de marzo se interrumpió la programación habitual.
Estar en casa no es sinónimo de sedentarismo, es la premisa que han levantado los clubes en esta cuarentena.
En el Estadio Español, sus profesores hacen rutinas de yoga y diferentes ejercicios localizados. Igual que en Bellavista, donde su área de Fítness y Wellnes publica rutinas para socios, además de ejercicios para niños y tips de alimentación saludable. En Huachipato, las redes sociales son también el medio para compartir recomendaciones y trabajo físico para toda su comunidad.