El plan deportivo nacional del que Bío Bío es pionera

16 de Diciembre 2019 | Publicado por: Samuel Esparza
Fotografía: Andrés Oreña P.

La Región fue la primera del país en poner en marcha la nueva estrategia solicitada por el nivel central y que dio vida al Departamento de Alto Rendimiento y Deporte Competitivo. Un programa que ha permitido que este 2019 sea pródigo en resultados en los principales torneos disputados.

Fue hace un año cuando el director del Instituto Nacional de Deportes (IND), Renato Palma, le encargó a su par de Bío Bío, Carlos Mellado, una importante misión: encabezar junto al nivel central, la histórica reestructuración del Departamento de Actividad Física, un paso más en lo que es la Política Nacional de Actividad Física y Deporte.

Cambio que, en lo concreto, implicó que el mencionado departamento mantuviera la Unidad Crecer en Movimiento (deporte formativo) que involucra el deporte de participación social (recreativo), y se creara a la vez el nuevo Departamento de Alto Rendimiento y Deporte Competitivo.

La idea se basaba en concentrar especialistas en actividad física, en lo formativo, recreativo y también en alto rendimiento con tal de que, en este último, optimizara el desarrollo de las fases clasificatorias en cada competencia.

Bío Bío se transformaba así en la Región “piloto” para una transformación fundamental del deporte chileno de cara al futuro y que tendrá como prueba de fuego los Juegos Panamericanos Santiago 2023.

Prueba de confianza

“Fue un desafío que me planteó el director nacional tiempo después de que asumí el cargo, en octubre de 2018. Primero, por la importancia de la Región en cuanto a liderar gran parte de los procesos tras la Metropolitana, caracterizándose por tener siempre buen rendimiento y muy buena calidad en los eventos que le ha tocado organizar. A eso se sumó mi experiencia de haber trabajado en la modificación de estructuras en dos direcciones de administración municipal (Los Ángeles y Concepción) que fue mi desarrollo profesional anterior”, parte indicando el director regional del IND, Carlos Mellado.

“Trabajamos durante cuatro meses y a partir de abril del año en curso se implementó esta nueva estructura a nivel regional, siendo la primera del país. La experiencia vivida en estos seis meses de puesta en marcha nos ha permitido potenciar ambos departamentos: Actividad Física, con profesionales exclusivos para el Crecer en Movimiento y Deporte de Participación Social y para Alto Rendimiento. Esto se tradujo en una muy buena opinión por parte de los deportistas y técnicos, ya que el sistema mejoró considerablemente al existir profesionales dedicados exclusivamente a cada área”, añade.

Según Mellado en el aspecto competitivo, por ejemplo, se mejoró el desarrollo de las fases clasificatorias en los Juegos Deportivos Escolares (JDE), aumentando la cantidad de partidos de los deportes colectivos en sus fases comunales, provinciales y regionales, redundado en importantes resultados en algunos casos históricos.

“Este año fuimos segundos en Juegos Nacionales y ParaNacionales, mejoramos la participación en los ParaAraucanía en su primera versión siendo lejos la mejor región del país doblando al resto. Recientemente, en los Juegos de la Araucanía, llegamos a la final de tres deportes colectivos siendo campeones en fútbol y teniendo muy buena actuación en atletismo. Pero creo que el impacto más fuerte se ha notado en los JDE, donde la cantidad de competencias en sus distintas fases permitió que los equipos llegaran en mucho mejor nivel a la etapa nacional, lo que se tradujo en el éxito del balonmano que fue campeón en damas y varones”, expresa.

También en el aspecto administrativo la autoridad resalta las condiciones actuales. “Desde el punto de vista organizativo, para nosotros como dirección regional se nos hace más fácil, porque sabemos específicamente con quien trabajar dependiendo el tipo de actividad; en el esquema anterior, uno debía trabajar con más personas y esas tenían que subdividir su labor. Ahora, las planificaciones son específicas y los recursos están mejor canalizados, ya que no hay que compartirlos entre diversas actividades, sino que el presupuesto viene asignado para cada una”, argumenta.

Frutos que entusiasman

Los números de este 2019 dan un espaldarazo a esta transformación no sólo en lo que a resultados se refiere, sino que también en uno de los puntos más relevantes para la institucionalidad deportiva: la participación.

Es así como, proporcionalmente, la cifra de participantes aumentó de forma notoria, tal como asegura Carlos Mellado. “Sólo un ejemplo, este año por primera vez se hicieron los Juegos ParaAraucanía, en Neuquén, con paranatación y paraatletismo, lo que ya incrementó el número de deportistas. Pero, a la par, en los Juegos de la Araucanía convencionales se incorporaron el ciclismo y el fútbol damas, lo que hizo que tanto en la fase clasificatoria como en la de competencia se aumentara considerablemente la cantidad de deportistas. Más todavía en el caso del fútbol, donde además hicimos una clasificatoria regional. Y así en otros eventos, al Sudamericano escolar fuimos con la segunda representación histórica más grande y regresamos con medallas en deportes colectivos e individuales”.

A juicio de la autoridad, lo anterior demuestra que el formato está resultando, “gracias al esfuerzo de los técnicos, profesores, los establecimientos educacionales y los municipios que son nuestros aliados fundamentales, además del compromiso de nuestros funcionarios y profesionales”, sostiene.

En relación al deporte recreativo, Mellado dice que viene tomando su propio derrotero de progresión. “Ha crecido con eventos trascendentes. Recientemente estuvimos con un evento de yoga en el Parque Rivera Bío Bío de Chiguayante con una gran convocatoria. Antes tuvimos la Media maratón del Bío Bío que fue el evento más grande que hicimos en Concepción, y así otras actividades específicas para damas y adultos mayores, sin olvidar que el deporte de participación social involucra además etapas de niñez”, complementa.

A juicio de Mellado, estos números llaman al entusiasmo, no así a la complacencia. “Estamos contentos con lo logrado pues existe una coherencia de resultados con la iniciativa planteada por la dirección nacional del IND, con un trabajo interno que fomenta la transversalidad. El hecho de tener un Departamento de Actividad Física y otro de Alto Rendimiento significa que debemos fortalecer el trabajo conjunto entre ambos; para llegar al alto rendimiento hay que pasar por una fase formativa. Podemos decir que para llevar seis o siete meses funcionando, estamos contentos por lo conseguido, aunque con la tarea clara de seguir creciendo”, finaliza.

Mismos recursos, más réditos

Actualmente, a cargo del nuevo Departamento de Alto Rendimiento y Deporte Competitivo está Christian Cheuquén, uno de los funcionarios de más extensa carrera en el IND regional, y quien es claro a la hora de destacar los beneficios de la reestructuración.

“Se podría decir que hacemos más con los mismos recursos, porque los profesionales estaban y sólo hubo que reposicionarlos de acuerdo a sus cualidades. Ahora se ahorra tiempo en planificación y los objetivos son más consecuentes con la realidad. Hemos visto un cambio para bien, porque antes eran tan diversas las cosas que hacíamos que le dedicábamos menos tiempo a cada una, no había espacio para un análisis más técnico; tomábamos decisiones contra el tiempo”, dice.

Y añade, “esto significó tener una cercanía distinta con las instituciones que trabajan en alto rendimiento, se dieron cuenta que los tiempos que teníamos para ellos eran otros, que podíamos atenderlos y apoyarlos de otra manera. Los mismos deportes paralímpicos hoy son estratégicos; antes hubiese sido imposible. Si hablamos de JDE, la planificación y el trabajo en terreno es distinto, lo que genera más y mejor calidad torneos con un acercamiento nunca antes visto de los colegios municipalizados, que a su vez solucionó el tema de falta de competencia.

Para Cheuquén, un mérito mayor es que se consiguió cumplir ampliamente con los requisitos del nivel central sin contar con infraestructura propia. Aunque lo más importante, es que con este nuevo orden las metas crecen.

“Para 2020 deberíamos tener superado en términos competitivos la separación con Ñuble por la cual perdimos una gran cantidad de deportistas y podios en competencias obligándonos a multiplicar los esfuerzos para volver a levantarnos a un cierto nivel competitivo. En cierto modo deberíamos estar más nivelados, superarlo sería más importante aunque por edad no es fácil, porque partimos con generaciones de 15 años y estamos trabajando aún con ellos. Junto a eso, nuestra prioridad es potenciar el deporte de alto rendimiento mejorando el sistema de competencias, junto a las asociaciones queremos ver maneras de organizar más eventos pero de buen nivel, y tener un gran evento único por disciplina que esté coordinado con el calendario nacional, para coronar al campeón del año en cada deporte. En síntesis, hay harto trabajo, pero bien direccionado se vuelve una motivación extra”, sentencia.

Ilustración: Andrés Oreña P.