El Campanil reanudará el campeonato nacional visitando a Coquimbo. Arrancar el segundo semestre sumando es vital para no enredarse en la parte baja del certamen.
El “partido a partido” y “paso a paso” fueron las frases que más se repitieron en el Campanil durante el año pasado. En ese momento el gran objetivo, por más que nadie lo dijera explícitamente, era levantar la copa a final de temporada.
Y la situación se repite por ahora, aunque la meta es diametralmente opuesta: escapar de los puestos de descenso. El primer obstáculo será Coquimbo Unido (20 horas), en un duelo que recién cerrará la primera parte del campeonato: corresponde a la fecha 15, aplazada para que la “Roja” tuviese más tiempo de preparación para la Copa América.
“Este será el encuentro más importante, ¿vamos a volver a lo mismo?”, comentó entre risas el DT del Campanil, Francisco Bozán, quien sobre lo anterior argumentó que “se debe a la posición en la que estamos. Tenemos que entender que esto será partido a partido. Esa famosa frase puede que incomode a algunos, pero hay sólo un rival, un Coquimbo y este es el juego que queremos salir a ganar”.
A principio de año, la temporada auricielo arrancó con muchísima expectativa. El buen plantel de UdeC hizo ilusionar a muchos con una mejor participación en la Copa Libertadores, pero el Campanil fue cuarto en su grupo y ni siquiera pudo entrar a Copa Sudamericana como tercero en su zona. Además, actualmente, el equipo de Bozán marcha penúltimo en la tabla con 12 puntos y en Copa Chile no pudo vencer a Valdivia, igualando los dos partidos y cayendo en penales.
En este semestre las metas cambiaron del cielo a la tierra en relación a los sueños de comienzo de año. “Tratamos de dar vuelta la página desde lo físico y sicológico, entendiendo que no tuvimos un buen primer semestre. Pudimos haber hecho cosas significativas que no llegaron a buen término. La premisa que tenemos es que el resultado del primer semestre nos tiene en un presente incómodo, pero depende sólo de nosotros salir de donde estamos”, aseguró el técnico.
¿Refuerzos? Al Campanil no llegó ninguna incorporación a mitad de temporada y probablemente aquel panorama no cambie. Por su bajo rendimiento, Guido Vadalá volvió a Boca Juniors y Luis Riveros ocupó su lugar como extranjero en el primer equipo. “Si este plantel fue confeccionado para pelear la fase de grupos de Copa Libertadores, no entiendo porque no puede ser el mismo grupo para pelear la segunda parte del torneo”, afirmó Bozán, quien complementó que “no hay un cambio de mentalidad en relación al primer semestre. Teníamos la mentalidad de triunfar y clasificar en Copa Libertadores, pero no se pudo. Ahora hay sólo un foco y no tenemos más competencias, por lo que hay diferencias en la planificación”.
Esta noche el rival será uno de esos que convierten su localía en una fortaleza. Coquimbo Unido suma siete partidos como local en el año, ganando e igualando tres y cayendo sólo en su estreno ante el vigente campeón: U. Católica. “Es un rival que cuando uno lo ve y analiza, seducen muchas cosas. Tienen gran volumen y ejercen acciones de intensidad, que están determinadas por la juventud de los jugadores y sus características. Sin duda, nos obligarán al mayor de los esfuerzos para sacar adelante el duelo. Tienen una forma de jugar que obliga a una entrega al máximo. No queremos que construyan ni profundicen, para así encontrar espacios”, cerró el entrenador auricielo.
El compromiso será dirigido por Ángelo Hermosilla.