Durante el año 2018 conocimos la noticia del regreso de la marca de origen chino Geely, de la mano de Fortaleza. Lo hizo con tres modelos, un SUV, un SUV compacto, y el objeto de esta prueba, el Emgrand 7. Este último modelo es un sedán mediano considerado como el modelo de entrada de clientes a la nueva marca.

Ya es una apuesta fuerte del fabricante y el importador por el segmento al que apunta, uno que no ha tenido la participación esperada dentro del mercado en el último tiempo, pero que Geely espera rescatar con un modelo que destaca, sobre todo, en habitabilidad, equipamiento y seguridad.

El diseño también muestra sus cosas. El modelo se ve incluso más pequeño de lo que muestran sus medidas 4.631 mm de largo, 1.789 mm de ancho, 1.479 mm de alto y 2.650 mm entre los ejes.

Es este último dato el que permite apreciar una gran habitabilidad en su interior, que está hecho para cinco pasajeros cómodos tanto en espacio como en altura, a lo que agrega un gran maletero de 680 litros. A eso, suma una performance importante en cuanto a diseño interior, con una gran pantalla de infoentretenimiento al centro y todos los comandos ubicados de forma muy intuitiva, tanto para el conductor y los ocupantes.

En su diseño exterior muestra un frontal con el que se apunta a una línea distintiva de la marca, con el logo presente en el centro de ella, con varios detalles sobre el capó y los costados para entregar una sensación de dinamismo.

Para esta prueba pudimos conducir la versión tope de línea que equipa un motor de 1.8 litros y cuatro cilindros, que eroga 130 HP y 170 Nm de par, lo anterior asociado a una caja CVT de seis velocidades. Su respuesta es algo lenta en ciertos momentos, lo que habla de su vocación más urbana considerando las altas revoluciones que alcanza en carretera, y también cuando necesitas buscar potencia en las salidas.

Eso sí, la gran cantidad de asistencias sumada a una suspensión muy bien trabajada, permite encontrar un andar muy cómodo pese a las imperfecciones constantes de las calles en Chile.

Dentro de su alto equipamiento, de serie incluye vidrios y espejos eléctricos, cierre centralizado, climatizador, asientos con tapiz de cuero sintético, computador a bordo, sistema keyless con botón de encendido, sensor de luces, pantalla touch de 8” con bluetooth y conectividad a Mirror Link; a lo que suma en términos de seguridad, doble airbag frontal, frenos ABS con EBD, anclajes Isofix, sensor y cámara de retroceso, neblineros y luces diurnas LED.

En la versión tope de línea, objeto de esta prueba, incorpora también control crucero, volante multifunción, asistente de frenado de urgencia (HBA), control de estabilidad y tracción, y asistente de partida en pendiente, entre otras, con un precio de lista de $10.590.000.