No solo desde el punto de vista competitivo, sino que logísticamente, Bío Bío puso fin el sábado a unos Juegos Escolares que cumplieron las expectativas del mundo deportivo nacional. San Ignacio se tomó revancha y al fin pudo gritar campeón.
Fueron jornadas de acción que se llevaron a cabo en Chillán y Concepción. El atletismo tuvo lugar en el estadio Quilamapu, y todo el talento cestero se congregó en seis gimnasios cuyas sedes fueron La Tortuga, Polideportivo Tumbes, Thomas Jefferson School, Colegio San Ignacio, C. D. Huachipato y Universidad San Sebastián.
Más allá de lo protagonizado en Chillán, los aplausos y los festejos para Bío Bío se produjeron la tarde del sábado en Talcahuano, con un equipo dirigido por Jaime Urrutia que al fin pudo festejar un título a nivel nacional en básquetbol. “Como colegio lo hemos hecho bien, con varias generaciones que a nivel Sub 17 se habían titulado campeones en Adicpa o también a nivel regional, pero no habíamos tenido la posibilidad de medirnos a nivel nacional con otros colegios. Antes con otros grupos habíamos terminado en el cuarto, segundo y tercer lugar, pero nunca podíamos finalizar en el primer puesto”, dijo humildemente y casi con desahogo Jaime Urrutia, técnico del Colegio San Ignacio y gran artífice de la copa que levantó el sábado en la tarde tras vencer 71-60 a Los Lagos.
Bío Bío se inclinó solo una vez en los Juegos Deportivos Escolares y fue en el debut, una caída que les sirvió para fortalecerse y terminar festejando el título. “De este equipo que está conformado por doce jugadores, hay solo tres que tienen 17 años, todos los demás tienen 16 y varios son titulares. Hay una gran proyección para el próximo año y este trabajo viene desde muchos años. La Región ha dado saltos sustantivos en cuanto a la presencia a nivel nacional de los deportistas y, en ese sentido, el básquetbol está resurgiendo en Concepción. Hay más clubes y ligas, por lo que están apareciendo chicos con un biotipo bastante ventajoso para este deporte”, agregó Urrutia.
Pero no todo fue básquetbol. Los protagonistas están en la cancha y allí demuestran su talento, pero para aquello hay una serie de temas que deben complementarse para que una competencia de relevante envergadura como son los Juegos Deportivos Escolares, se realice sin mayores problemas. “La logística funcionó de manera perfecta y no hubo ningún incidente. Tanto en transporte, conectividad, alimentación y organización de partidos, todo fue muy reconocido por las distintas delegaciones, que incluso nos destacaron lo significativo y simbólico que fue para ellos jugar en un lugar histórico como lo es La Tortuga”, valoró Juan Pablo Spoerer, seremi del Deporte del Bío Bío.
La autoridad regional agregó que “nuevamente el Bío Bío se consolidó como un referente en lo que es la organización de eventos deportivos, no solamente por lo que es la capacidad del Mindep y el IND, sino que por todos los servicios públicos asociados”.
El balance también fue más que positivo, fuera de la cancha, para el entrenador del Colegio San Ignacio. “De todas las veces que hemos ido a actividades así, la organización en esta ocasión sacó nota diez en todo. Definitivamente, Concepción está preparado para realizar eventos de este nivel, sobre todo para jóvenes que viven en competiciones así una experiencia única en su vida. En cuanto a logística, infraestructura, hotelería y apoyo del IND, todo fue de primer nivel, lo que nos dejó muy contentos a todos”, comentó Jaime Urrutia, técnico campeón.
Los resultados obtenidos por el Colegio San Ignacio en esta edición de los JDE 2018, están muy lejos de ser casualidad. Por algo fueron los representantes del Bío Bío durante la semana pasada, confirmando que, para lograr el éxito, el trabajo debe ser arduo, organizado y de mucho esfuerzo.
“Lo nuestro tiene soportes muy importantes. Nuestro colegio tiene dos pilares fundamentales, como la parte académica y formativa. Acá los chicos se encantan siempre con el deporte y se ha inculcado un gran ímpetu en todo ámbito, por parte de la nueva rectora”, comentó el DT Urrutia.
El entrenador que se colgó el oro, además, valoró que “otro factor muy clave ha sido una situación que siempre nos ponía en desventaja con los equipos de la zona sur, es la experiencia deportiva que van sumando los chicos. Los doce que tuvimos este año, todos juegan en clubes. El fundamento de esto, parte por la cantidad de experiencias de alto nivel que vayan sumando. Felipe Inyaco juega en el plantel adulto de Alemán e incluso tiene competencias internacionales, mientras que los otros once chicos juegan en el club Estudiantes de San Pedro hace dos o tres años, lo que ha sido un soporte y ha cumplido grandes expectativas de dar una experiencia competitiva de altísimo nivel a chicos del San Ignacio que tenían mucho potencial, pero no encontraban el espacio”.