Huachipato rescató un punto gracias a una “genialidad” de Povea
12 de Febrero 2018 | Publicado por: Ignacio Abad Parraguez
Al igual que gran parte de los elencos que tuvieron un debut triunfal en el torneo nacional, Huachipato no pudo sumar de a tres en la segunda jornada del certamen, firmando un 1-1 ante el siempre complicado San Luis de Quillota.
Pese a que los locales presionaron desde el arranque y avisaron tempranamente gracias a Jimmy Martínez, fueron los canarios quienes abrieron el marcador a los 12 minutos. El encargado de desatar el festejo amarillo fue el defensor Rodrigo González, quien aprovechó un balón pivoteado por Carlos Escobar, le ganó la espalda a Claudio Jopia y venció al meta Carlos Lampe con un potente remate.
Mauro Caballero pudo aumentar cinco minutos después, pero su disparo se estrelló en el horizontal, mientras Escobar complicaba a los dueños de casa con su despliegue e invasiones al área.
Sin embargo, los dirigidos de Nicolás Larcamón despertaron a tiempo y volvieron a poner en aprietos a los rivales con un derechazo de Martínez que pasó muy cerca del segundo palo.
Aunque fue Leonardo Povea quien puso la cuota de tranquilidad con un verdadero golpe de suerte. A los 38’, el talentoso volante aprovechó un mal despeje de la última línea visitante y envió un centro al área que se fue cerrando de a poco y terminó colándose al ángulo. Fue un golazo que tranquilamente peleará en los rankings de mejores anotaciones de la fecha.
El cuadro de la usina apostó por la incorporación del panameño Gabriel Torres en el complemento. Y la jugada dio resultados, ya que su ingreso dio más peso a la ofensiva y cambió el trámite del duelo. Pero sus arremetidas no pudieron convertirse en conquistas gracias a los achiques y reacciones felinas del guardameta Ignacio González.
Carlos Lampe tuvo una mala salida a los 83’ y el balón fue aprovechado por Caballero, quien nuevamente vio cómo su intento daba en el poste superior.
Martínez -una de las grandes figuras del cotejo- recibió un notable centro al área de César Valenzuela en el epílogo, pero su testazo careció de precisión y el esférico se fue rozando el vertical izquierdo.
¿Con intención?
La gran duda de los 1.629 espectadores fue si Povea apuntó a portería o simplemente quería habilitar a sus compañeros. Con honestidad, el mediocampista confesó que, “envié un centro que se metió gracias a Dios en el segundo palo y nos ayudó para conseguir el empate”.