En el lugar 415 del ránking ITF junior ocupa actualmente el deportista, quien en marzo decidirá si da el salto a profesionales.

No pudo cerrar una semana perfecta. El tenista local, Garizon Abarzúa, quedó a un paso de quedarse con la corona del Torneo Grado 1 de Tenis, desarrollado en el estadio español de Chiguayante con más de un centenar de deportistas de todo el país, en categorías de 12 a 18 años tanto en damas como en varones.

Durante la final de la serie Sub 18 jugada ayer por la tarde, el tenista  sufrió una fuerte dolencia en la espalda, que terminó por pasarle la cuenta ante el viñamarino Simón Parra, que se tituló monarca del torneo luego de vencer por 6-3 y 6-0 en menos de una hora de juego.

De esta manera, Abarzúa sumó su tercer final consecutiva en el inicio del circuito nacional junior, tras lo acontecido en el G-1 de Llolleo, donde jugó por la corona en singles y dobles.

Metas grandes 

La raqueta chiguayantina venía a un fuerte ritmo en las canchas del Estadio Español, donde en la víspera había vencido al capitalino Gerard Padilla por 7-6 (4) y 6-4, en dos horas y media de partido,

Un duelo duro, considerando que ambos son grandes amigos y se conocen a la perfección, pero donde se impuso el reconocido revés de Abarzúa, que además fue capaz de jugar de mejor manera los puntos importantes.

Apenas terminado el encuentro, Abarzúa debió medirse por semifinales ante Carlos Gallardo, quien solicitó adelantar el partido dado que luego debía embarcarse a otro torneo. Petición a la que accedió el jugador local que sacó pasajes a la final luego de ganar por 3-6 y retiro de su rival.

“Salí de la cancha y el árbitro me dijo si podía adelantar el partido porque mi rival necesitaba viajar urgente y así no perdía los puntos de presentación. Accedí, aunque  me cansé mucho, no me hidraté debidamente y en un momento incluso sentí que me podía acalambrar”, reconoció Abarzúa.

Factor que tal vez pesó en lo sucedido en la final de ayer, donde tras un primer set peleado, el tenista de Chiguayante comenzó a padecer fuertes dolores en la espalda que lo dejaron casi sin movilidad. Aun así permaneció en cancha, siendo arrasado por 6-0 en el set definitivo.

Aun así, Abarzúa se mostró satisfecho por un comienzo de temporada que calificó de positivo. “Estoy feliz de llegar a dos finales en este comienzo de año, habla de la buena preparación hecha con mi técnico, Gonzalo González”, apuntó.