Chile fuera del Mundial de Rusia, perdiendo su sello futbolístico, con indisciplinas en el camarín y ahora, además, sin técnico. ¿Se acabó la generación dorada o puede exprimírsele una última gotita? ¿Hay recambio después de Medel, Vidal y Sánchez o viviremos años oscuros, como cuando se agotó la generación de Francia ’98? Muchas preguntas para una selección que deberá definir pronto un nuevo estratega. ¿Hay plata o un hoyo por los millonarios premios que debe pagar la Anfp?
Jorge Torres vivió el recambio después de Zamorano y Salas. Fue una época horrible, seis años donde no ganamos nada y hasta fuimos últimos de una clasificatoria. El ex defensor de Huachipato, Vial y D. Concepción recuerda que “pasó igual que ahora… En un momento el camarín estaba cortado. Estaban los que seguían a Salas y otros a Zamorano. Además, Iván vetó a la prensa y se echó mucha gente encima, pasó lo del ‘Puertordazo’. Ahora se habla de la banda del pitillo, y dicen que la lidera Vidal. No sé… Pero ese camarín debe ser muy difícil”.
El ahora estratega de Lota repasa que “estuvieron Jorge Garcés y Pedro García. Daban la nómina y muchos jugadores del extranjero o Santiago renunciaban. Nosotros éramos parches porque cada técnico que llegaba traía los suyos y con esos jugaba. No había un proyecto… Nada. Ojalá ahora no pase lo mismo, pero hay que tomar decisiones rápido”.
El “Cañón”, conocido por su potencia en los balones parados, afirma que “ superamos esa etapa oscura cuando llegó Marcelo Bielsa porque fue clarito en decir a quiénes quería y a quiénes no, además de confiar en la gente joven , pero confiar de verdad. Había un proyecto serio, y era un tipo que generaba respeto y credibilidad. Eso es lo que se necesita”.
Torres agregó que “es una muy mala señal que ande hablando hasta la suegra de Claudio Bravo, que es el capitán, y que los compañeros se manden mensajes por twitter… Tendrán que conversar muchas cosas, como los premios. Quizás sería mejor que ni hubiera, porque al final estás jugando por tu país. Si no se toman decisiones fuerte y rápidas, podría pasar como esa época entre 2002 y 2007, que fue realmente mala”.
“Les queda mucho”
Cristián Muñoz ataja hoy en la UdeC, pero en 1997 era el arquero de la selección argentina que ganó el Mundial Sub 20. Vivió desde adentro un trabajo de series menores que sacó figuras como Sorín, Riquelme, Aimar y una infinidad de nombres. ¿Cuál es el secreto?
El “Tigre” aclara de entrada que “aquí no hay que echar todo por tierra tan rápido. Hay jugadores de esta generación chilena que tienen apenas 28 años, les queda mucho. Creo que en 6 o 7 años será momento de que digan adiós, pero sí hay que ir preparándose para eso. La Anfp debe tener claro qué tipo de técnico quieren. Ojalá siguieran en esa línea futbolística de Bielsa y Sampaoli y llegara alguien que sea capaz de enlazar ese estilo de juego con un trabajo en la misma línea para las series menores”.
¿Y cómo lo hacía la Argentina de su época? El portero, de 40 años, cuenta que “el trabajo de Pekerman y Tocalli era monstruoso. No llamaban solo jóvenes de Boca y River… Yo venía de Junin, ni siquiera estaba en Primera y me llevaron. Pasaba mucha gente por esos entrenamientos, los veían a todos. Y eran muchos entrenamientos. Yo viajaba a trabajar con ellos lunes, martes y miércoles, todas las semanas, por dos años. Tú veías la Sub 17 o la Sub 20 de Argentina y jugaban igual a la adulta. Después, era sacar una pieza de abajo y meterla en el primer equipo. El trabajo grande ya estaba hecho”.
Pero ojo que Argentina tampoco está tan preparada para el ocaso de Messi, Mascherano, Di María y todo ese grupo. “Argentina siempre saca jugadores de manera natural, pero no hay un buen trabajo. Se perdió eso y en los Mundiales Sub 20 y Sub 17 ni figuramos. Chile necesita pensar de manera anticipada, todavía está a tiempo, pero hoy no puede sacar de golpe a toda esta generación… Para mí son próceres y de su mentalidad ganadora hay que seguir aprendiendo y sacando partido”, aseguró.
El ejemplo guaraní
Antonio Zaracho estuvo 5 años trabajando con la selección paraguaya. Una era exitosísima dirigida por “Maño” Ruiz y que incluyó la plata olímpica en Atenas 2004. Tiempos en que la albirroja era fija en los Mundiales y no paraban de salir figuras nuevas. El ex portero afirma tajante que “acá hay mucho temor por sacar a los de siempre, cuando Chile tiene una camada de chicos, como Martín Rodríguez, Felipe Mora y otros que les está yendo bien afuera. Les falta jugar, pero nadie se atreve a ponerlos en serio”.
El ex Huachipato y Vial comentó que “Chile no necesita solo un buen técnico que dirija lo que hay. Cuando pasa eso tan así a corto plazo, sin un proyecto, el entrenador trata solo de lograr resultados y no dejar nada para el futuro. Llama a los calados y se saca la presión rapidito. Eso es peligroso y en Chile ha pasado. Fíjate en la Sub 17… Ese equipo no juega a nada y no se parece en nada al fútbol vistoso y de vértigo de la adulta. Es como si no fuera Chile. ¿De qué te sirve eso a futuro? Además, hay un centralismo total. Acá en la zona hay chicos que perfectamente pudieron estar en esa Sub 17, pero acá todo es Santiago”.
Zaracho es crítico y advierte que “si empiezas a mirar puesto por puesto, Chil e tiene una buena generación emergente. Por ejemplo, hay dos muy buenos arqueros, como Cortés de Iquique y Castellón de Wanderers, pero nunca vas a saber si son de selección si no los pones. Vidal, Sánchez y Medel también deben acordarse de que un día fueron Sub 20 y se les dio la oportunidad. Siempre veo a los mismos y eso produce un desgaste”.
El ahora estratega de D. Concepción recomienda que “Venezuela es un ejemplo a seguir. Ese equipo va a ser bravísimo en la próxima clasificatoria porque llevan largo tiempo haciendo un trabajo serio. Tú miras a Dudamel y está metido en todas las series. Eso en Chile no se hizo. Se necesita traer un DT con una ideología clara de juego, un proyecto a largo plazo y una estructura para las series menores . Eso a veces significa sacar mucha gente y hay que hacerlo. A mí me tocó cuando llegó ‘Tata’ Martino a Paraguay, porque llevó toda su gente, su proyecto y eso se respeta”.
El caso vino tinto
Chile no tiene titulares menores de 26 años y, para Qatar 2022, la generación del Sub 20 de Canadá (Vidal, Isla, Medel, Sánchez) bordeará los 32 años. Valdivia y Beausejour ya estarán fuera y Bravo habrá cumplido 38. Probablemente, estén en la parte descendente de su curva de rendimiento, más allá de la calidad indiscutible de cada uno.
Venezuela tomó nota de esto, cuando se dio cuenta que Arango, Rey y Vega no eran eternos. Luego de eso, clasificaron a un Mundial Sub 17 por primera vez, este año fueron finalistas del Mundial Sub 20 y su selección adulta se nutre fecha a fecha de nombres nuevos.
Yeferson Soteldo, de 19 años y actualmente en Huachipato, apuntó que “en esta última fecha eliminatoria, por ejemplo, el profesor Dudamel llamó nueve jugadores del seleccionado Sub 20 y siento que todos juntos estamos logrando algo que puede ser muy bueno para Venezuela. El ‘profe’ le da tanta importancia a los nuevos, como a los que llevan mucho tiempo en la selección. Tú llegas a la concentración y te tratan de manera maravillosa. Nos sentimos todos a gusto y con ganas de salir a ganar como grupo”. Un camarín ideal.
El veloz atacante aconseja a la “Roja” y señala que “deberían ya empezar a integrar nuevos. Chile tiene algunos jugadores ya pasados de edad, que ya cumplieron un ciclo y eso lo debe decidir el técnico que llegue. Él tendrá que tomar esa decisión importante de hacer un corte. También tienen que bajar el ego un poco y pisar tierra. Tal vez, en ese sentido, esta eliminación termine haciéndoles bien”.
Y mientras Chile decide quién se hace cargo de su pizarra, Eduardo Berizzo ya fue el primer candidato en descartarse. Ahora se habla de Bielsa y Manuel Pellegrini, pero mucha plata no habrá… Tal como en el momento en que Arturo Salah y su directorio se decidieron por Pizzi. Un descalabro financiero porque habrá que pagarle 9 millones de dólares en premios a una selección que ni siquiera cumplió el objetivo. En la prensa mundial hablan del “borracho” Vidal y, en propia casa, salen a la luz conversaciones donde Sampaoli mata a la mitad del plantel. Si ayer se hablaba de lo mal que jugaron, hoy el comidillo es por indisciplinas. El presente de un equipo que tocó el cielo. Muchos piensan que demasiada altura los mareó.