“Tienen que pasar estas cosas dramáticas, para que todos los que están arriba se den cuenta que los deportistas estamos botados”. La dura frase es del atleta Víctor Aravena. El coronelino es enfático en afirmar que “el Estado debería costearle todo su tratamiento y darle una pensión vitalicia. Es un chico que nunca más podrá hacer lo que sabe hacer. Espero que sean más que buenas intenciones para la foto y no quede todo en al aire”. Y ese es el gran miedo. Se habla mucho de esta posible “Ley Guga”, pero… ¿Qué tan probable es su concreción?
Gustavo Ortiz, campeón nacional de descenso en mountainbike, salió el miércoles de la Clínica Las Condes. “Lo único que quería era meterse a las máquinas. Está mentalizado en salir adelante, que la gente vea que pudo ganarle a este accidente”. Su papá tiene fe en que las promesas se harán realidad. “Mi hijo sufrió una fractura gravísima y no le funcionan sus piernas. Ese luto ya lo pasé, pero nos vamos a jugar con fuerza porque esta ‘Ley Guga’ vea la luz. Ojo, que no lo hago por mi hijo. Él ya no se va a accidentar más haciendo deporte. Es para los que vienen. Guga estaría orgulloso de saber que de todo esto se sacó algo positivo”.
El ministro del Deporte Pablo Squella fue uno de los que recibió a ‘Guga’ en Santiago cuando llegó el avión ambulancia que lo trasladó desde Canadá, lugar del accidente. La mismísima presidenta Bachelet debió interceder para traerlo de vuelta y la familia Ortiz lo agradece de sobremanera. “Si no es por ella, Gustavo todavía estaría en Canadá”, acota su padre. Squella aseguró que “muchos de los deportistas que salen del país viajan con un seguro, eso es por normativa, pero no todos lo hacen porque hay deportes, como el de Guga, que no están dentro del sistema olímpico”.
Al respecto, agregó que “a ellos, actualmente, solo les queda conseguir recursos con gobiernos regionales y empresas privadas. Ellos se costean sus propios seguros. La idea de aquí en adelante es asegurar que cada deportista, de cualquier disciplina y orden olímpico salga con su seguro y así disminuir sus complicaciones cuando representan al país a nivel internacional y, bueno, también a nivel nacional cuando representan a su región”.
Eso fue bajando del avión. Pasan los días y, Gustavo padre, responde que “hoy por hoy, sé que el diputado Tucapel Jiménez pidió apurar el envío del proyecto de ley”. En julio de 2016 ya se había conformado una mesa de trabajo para discutir este tema y se había propuesto entregar pensiones en caso de accidentes donde el deportista no pudiera seguir desarrollando su disciplina. Jiménez aseguró al diario La Tercera que “ha pasado un año y aun no hay avances legislativos. La historia de Gustavo tiene que ser un llamado de alerta”.
Víctor Aravena ha representado a Chile en países tan lejanos como Polonia, República Checa y el mismo Canadá. El atleta, de 27 años, cuenta que “existen seguros, pero no te cubren casi nada. A mí me tocó entrenar en la altura, por ejemplo, y tuve que ir al médico por dolores estomacales y de cabeza. Todas esas cosas me las pagaba de mi bolsillo. Uno representa a país y cuando logra una medalla están todos solo para la foto, pero viajas con una mano adelante y otra atrás. El Alto Rendimiento en este país está muy mal, en muchos aspectos”.
El coronelino conoce perfectamente el caso de “Guga” y la ley de la que hoy se habla.“A mí me da vergüenza cuando dicen que lo ayudaron con tal o cual cosa, porque a este chico deberían costearle toda la rehabilitación. No entienden que nunca más podrá subirse a la bicicleta y hay muchos como él que le dieron su vida al deporte, pero cuando se retiran nadie se acuerda. No te llega ni una carta de agradecimiento. En casos como el de Gustavo debería haber una Pensión Olímpica o Pensión Alto Rendimiento, pero justo para hacer esas leyes no avanzan nada. Claro, para quitar una beca Proddar ahí sí son rapiditos”.
Víctor contesta con la amabilidad de siempre, pero no puede ocultar su enojo mezclado con desazón. Una sensación nada nueva. “Yo no recibo recursos del Comité Olímpico, así que ni hablar de seguros. También siento que es un tema que debe ser bien supervisado porque he visto y oído de deportistas que hacen mal uso del seguro. Se hacen los lesionados, tienen el papel de un médico amigo y sacan plata de los seguros. Ese es otro tema”, expresó.
Felipe Cárdenas, en tanto, es remero, integrante de una camada que ha dado muchos éxitos al país. El deportista, de 26 años, conoce a “Guga” y a su círculo más cercano y comentó que “yo viajo con un seguro, pero la verdad es que nunca me había preocupado mucho de cómo funciona, porque en mi disciplina no estoy tan expuesto. Más allá de eso, me parece absurdo que unas disciplinas tengan un beneficio y otras, mucho más riesgosas, no. Hay que entender de una vez por todas que acá uno no va representando a Ortiz ni a Cárdenas, uno compite llevando la bandera de Chile”.
Es un tipo tranquilo, pero estos temas le hacen alzar la voz. Se trata de un compañero y pudo ser cualquiera, incluso él. “Acá hay una cifra de muchos ceros que la familia de ‘Guga’ deberá costear y ningún seguro deportivo te pagará eso. En estas disciplinas, ninguno de nosotros se hace millonario. Lo hacemos porque amamos esto, no podemos dejarlo y tratamos de darle una pequeña alegría al país. En Chile tiene que morir alguien para que se haga una ley, como pasó con la Ley Zamudio o la Ley Emilia. Guga está vivo. Es una experiencia de la que debemos aprender”.
Jacqueline es hermana de Pablo Otárola. El futbolista de Huachipato sufrió un grave accidente automovilístico en marzo de 2015 y su ascendente carrera se vio truncada de golpe. Aun intenta recuperar mínimos movimientos de su cuerpo. Ella, siempre a su lado, contó que “nuestro caso es muy distinto al de ‘Guga’, pero sí se trata de dos jóvenes que tenían mucho por dar en el deporte. A nosotros nos consiguieron una pensión de un millón de pesos mensual y la gente cree que nuestro problema se acabó. Eso está lejos de la realidad. Los gastos son más y siguen creciendo”.
Pablo es visitado diariamente por tres kinesiólogos y hay que pagar una doctora. Los insumos y medicamentos que usa también son carísimos. “Todavía estamos pagando como 30 millones que nos costó el hospital de Temuco y eso se descuenta del sueldo de Pablo. Al final, el millón de pensión queda en 600 mil pesos. Mira, a nosotros se nos acercó mucha gente cuando ocurrió el accidente. Nos llamaron de Huachipato y de Curicó ofreciéndonos cosas que solo quedaron en la buena intención. Ojalá con este niño ‘Guga’ no pase lo mismo, porque cuando el drama está fresquito están todos, pero van desapareciendo. Los deportistas que representan a Chile necesitan esta ley y es el momento de hacer un llamado a las autoridades”, advirtió.
Jacqueline disfruta las leves sonrisas de Pablo, cada vez más notorias, y añade que “a ‘Guga’ deberían costearle su tratamiento completo. Alguien debería hacerse cargo. Es un tema que hemos conversado acá en nuestra familia porque, claro, leímos lo que pasó y nos recordó muchas cosas. Además, es un niño… Muy joven. No me gustaría que estén como nosotros, haciendo bingos y otras cosas para juntar plata. El desgaste es grande. Sus papás tendrán que aprender a vivir otra forma de vida y eso nada ni nadie te lo pagará nunca”.
Gustavo padre asegura que muchos deportistas se están sumando a esta lucha porque la Ley Guga vea la luz. “Así como todos nos unimos y fuimos escuchados para traer a Gustavo desde Canadá, ahora debemos hacer lo mismo. Aquí hay muchos muchachos, de diversas disciplinas, que necesitan sentirse seguros y no andar tocando una y otra puerta cuando pasa un accidente. Hoy fue mi hijo y ojalá no le toque a nadie más, pero debemos prevenir, aprender de estas situaciones”.
No le gusta hablar de cifras. “Además,todoslosdíasapareceun gasto nuevo y en este minuto no es lo más importante. Hay una ley que ha dado para tema de conversación, una idea que es bien concreta y no solo una idea, hay ministros y diputados que se han pronunciado sobre ella y hay que darle un empujón para concretarla. Bío Bío tiene una camada de deportistas muy exitosos, chicos que logran podios constantemente a todo nivel y a ellos hay que protegerlos. Insisto, esto no es por mi hijo, es por los que hoy y mañana representarán a Chile”, afirmó.
Mientras tanto, “Guga” sigue luchando. En su ley, que no es otra que levantarse día a día y saber que estar vivo ya es una suerte. Su padre espera que en cuatro o seis semanas vuelva a Concepción, donde ya está conversada su rehabilitación en la Teletón de San Pedro de la Paz. Todos confían en que se repondrá. El atleta Víctor Aravena señala que “es carismático, luchador. ‘Guga’ debe servir como un emblema para los deportistas. Lo veo un día haciendo charlas, contando a la gente cómo le ganó a la adversidad. Su figura es súper fuerte, pero me da mucha lata que tenga que pasarle esto a alguien así para que recién tomemos conciencia de que hay un vacío y es momento de cubrirlo”.