Elenco con jugadores del Campanil será el único representante nacional en la cita.
Pasaron una eliminatoria regional, y luego se quedaron con la gran definición nacional. Ahora, el equipo UdeC se apresta para debutar en la final mundial del Red Bull Reign, torneo de modalidad 3×3 que en su fase planetaria reunirá a 16 elencos hoy y mañana en Washington, Estados Unidos.
El representativo del Campanil está integrado por Carlos Lauler, Diego Silva, Matías Villagrán y Miguel Ardiman. Hoy debutarán en la primera etapa, donde más importante que los triunfos es la suma de puntos, pues este es el principal criterio para la tabla. De sortear con éxito esta fase, mañana volverán a la cancha para las instancias más definitorias.
Sobre vivir esta experiencia, Lauler indicó que “vamos con todas las expectativas de hacer algo especial, y llegar lo más arriba posible. No conocemos mucho de los rivales, y vamos confiando en lo nuestro, pues sentimos que tenemos un muy buen equipo. Todavía no perdemos ningún partido en este formato”.
Al respecto, agregó que “en la clasificatoria nacional jugamos contra un equipo brasileño, que estaba bien rankeado a nivel mundial y les pudimos ganar. Sabemos que enfrentaremos a elencos de alto nivel, pero tenemos mucha fe que podemos llegar a ganar”.
Por su parte, Matías Villagrán señaló que “vamos con fe y mentalizados en llegar lo más alto posible. Hemos visto equipos de otros lados y algunos jugadores, y a lo mejor la diferencia física puede pasarnos la cuenta. Pero creemos que lo podemos suplir con la habilidad y versatilidad que tienen los muchachos. Tenemos variantes: tiro perimetral, juego interior. Entonces, en eso podemos sacar alguna ventaja”.
Consultados sobre las diferencias entre este formato y el tradicional, en primer término Lauler indicó que “al atacar tienes 10 segundos por posesión. Hay más espacios, te beneficia más el ataque, se le puede sacar más partido a las habilidades individuales, pues se dan muchos uno contra uno”.
Villagrán dijo al respecto que “lo principal es el espacio y la disposición que hay en el juego hacia lo ofensivo, eso es lo que se privilegia. No hay mucha estrategia ni tanta preocupación por lo defensivo. En ese sentido nos conviene, nos acomoda porque al ser tres jugadores en el mismo espacio que juegan cinco, como estamos acostumbrados a resolver entre más personas, se nos hace mucho más fácil maniobrar”.
Buen apronte
Los jugadores también se refirieron a la importancia que puede tener este torneo de cara al inicio de la Liga Nacional de Básquetbol, programado para el 30 de septiembre.
“Aunque es totalmente distinto, vamos con la intención de llegar lo más arriba posible, que nuestro juego individual y colectivo que es lo que entrenamos con la UdeC se vea, pero es otro formato. La intensidad de los duelos es buena y eso nos puede servir. Es un correr constante, no puedes bajar el ritmo y de hecho en la eliminatoria que tuvimos en julio quedamos bien cansados”, dijo Lauler.
Villagrán aseguró que “nos servirá, porque allá los ataques son cortos, entonces pasas muy rápido de defender a atacar. La intensidad que propone el juego es grande. Y lo otro, tienes muchas situaciones que resolver por partido, hartos uno contra uno. Esto nos ayudará mucho de cara a la Liga. La desventaja será que no podremos entrenar mucho con el equipo, conocer tanto a nuestros compañeros”.