Desde Mejillones hasta Lota, fueron más de 50 equipos los que participaron en la 17° versión de la Copa Enel, torneo protagonizado por niños y que a lo largo de su existencia ha servido como punto de partida para varias actuales promesas del fútbol chileno. Por primera edición, la competencia que tuvo como embajador a Iván Zamorano, incluyó la presencia de elencos de distintas provincias, siendo Lota quien representó con éxito a la Región Bío Bío en categorías damas y varones, tras imponerse en la fase comunal semanas atrás.
En un cuadrangular final que se jugó el viernes en el Gimnasio Municipal de Lo Prado, la escuela Thompson Matthews de Lota se midió en semifinales ante Independencia. El trámite arrancó muy parejo, pero con el pasar de los minutos se hizo notar la mayor experiencia del equipo capitalino, que se impuso por un contundente 12-0. “Fue un bonito campeonato y muy exigente. Nos queda la tranquilidad que nos ganó el campeón. Las niñas están felices”, comentó el DT y profesor del establecimiento, Orlando Iturra. Precisamente, fue Independencia el elenco vencedor del certamen, tras superar a Quinta Normal ayer en el Polideportivo del Estadio Nacional por 5-3.
En varones había gran expectativa. Un bus completo viajó desde Lota hacia Lo Prado con familias completas que desde muy temprano animaron el gimnasio. Eso sí, la esperanza de meterse en la final duró poco, ya que el Club Deportivo José Vergara Keller de Lota, terminó cayendo por un categórico 1-15 ante Ñuñoa. El único tanto minero lo marcó Juan Villalobos. Al final, los ñuñoínos fueron el campeón tras vencer en penales a Lo Prado, tras igualar 2-2.
“Estamos muy contentos por haber llegado a esta instancia, los muchachos que lograron algo muy importante. Nosotros somos nuevos y ellos llevan años trabajando. Nos pilló la inexperiencia, aunque, nuestro rival era mucho mayor en edad y tamaño”, señaló Omar Campos, encargado y DT del club.
Pese a la amargura propia de no meterse en la final, que daba pasajes a Italia para el campeón, en ambas categorías quedó la grata sensación de haberlo dado todo y que ello les sirvió para ser partícipes de una experiencia única. Además y, por si fuese poco, por haber logrado el tercer lugar, damas y varones ganaron un viaje a Argentina.
“Algunas chicas ni siquiera conocían Santiago. Es todo muy bonito e inolvidable. Estamos felices como liceo y lotinos, hicimos historia. Hubiésemos querido estar en la final, pero de todas maneras quedamos contentos”, agregó Iturra, quien además festejó el premio fair play de su equipo.
“Es un orgullo. La disciplina y esfuerzo de las chicas es valorable. Dan más ganas de regresar y que nos vaya mejor”, cerró el entrenador. En tanto, Omar Campos, sentenció que “la experiencia para los niños fue muy bonita. Nunca habían viajado en avión y además alojaron en hotel. Esperamos seguir participando y preparándonos más, porque el nivel en Santiago es súper competitivo”.
Respecto a una copa que hizo surgir a jugadores como Jaime Carreño, Jeisson Vargas o Pablo Aránguiz, el goleador Iván Zamorano comentó que “esta es la copa más importante a nivel infantil. Todo lo que conlleva el deporte con iniciativas como esta, me genera orgullo de participar. Es un gran desafío seguir creciendo con chicos que a futuro pueden ser profesionales”.
Paposo -caleta del norte de Chile-, Mejillones, Ñuñoa, Lo Prado, Independencia, Quinta Normal y Lota fueron todos los protagonistas de esta gran fiesta en el Gimnasio de Lo Prado y el polideportivo del estadio Nacional.