Como en sus mejores años. Así se vivió el ambiente en el Ester Roa para la reedición del clásico entre Deportes Concepción y Lota Schwager, un partido en el que ambas instituciones quieren cimentar el inicio de su camino de regreso a la competencia profesional.

Desde temprano comenzaron a llegar los hinchas de ambos equipos al recinto de Avenida Collao. Los mineros, quizás porque el viaje es más largo, se programaron mejor y ya pasadas las cuatro de la tarde llenaban buena parte de la galería norte, con cánticos y el bombo.

Los morados, en tanto, a lo mejor en su condición de locales, se demoraron más en llegar al estadio, y sólo sobre la hora se vio la gran masa de hinchas que llenaron gran parte de las tribunas Andes y Pacífico, y la galería sur.

En general, fue una fiesta familiar, salvo algunos porfiados que olvidan que alentar no es insultar al rival, u otros a los que se les pasó la mano con los fuegos artificiales. El fondo fue lo deportivo y en eso el público y el partido respondió desde el inicio.

“Abrimos las puertas muy temprano, y esperábamos entre 8 y 10 mil personas. Incluso salió el sol justo, como si estuviese esperando este partido”, comentaba en la previa del duelo el presidente del Club Social y de Deportes Concepción, Víctor Tornería, cara visible de los jóvenes incansables que han puesto en sus hombros el peso de lo que significa reflotar al club.

“Esta es la carta de presentación que queremos llevar a la reunión con la Anfp, para que así nos definan si podemos postular a la Segunda División Profesional o que nos dejen jugar en Tercera División”, agregó Tornería respecto al futuro de los morados.

En la otra vereda, la gente de Lota Schwager también miraba con ilusión este partido. “Prefiero esta faceta que la de jugador. Sé que puedo dar más como dirigente”, comentó el administrador minero, Jairo Castro. Para Lota, éste es el primero de varios partidos que tendrá de aquí a fin de año, porque se espera consolidar duelos con equipos amateur de Lota y Coronel, la vuelta con Deportes Concepción en el Federico Schwager, y también un par más con equipos de la Segunda División Profesional.

“Queremos tener rodaje deportivo para cuando postulemos a la Segunda División o si no podemos llegar ahí, para cuando juguemos en Tercera. No anunciamos tanto las cosas, sino que las hacemos y después las contamos”, sostuvo Castro.

¿El resultado? Una anécdota. Lota Schwager hizo pesar la mayor experiencia de algunos nombres como Vera, Gómez, Lucares y Valencia, y fue éste último quien marcó los dos goles mineros, mientras que el “Chino” González le puso un pase en la cabeza a Delamond para que éste anotara el descuento en el 21 a favor de la Lamparita con el que finalizó el clásico.