A sus 10 años, Nicole Torres es una de las grandes promesas de la gimnasia rítmica nacional. Esta semana disputará su segundo torneo sudamericano, con la meta de competir por el podio en Pre Infantil. Una historia que partió hace cuatro años y parece no tener fecha de vencimiento.
Cualquiera que la ve realizando sus rutinas, haciendo bailar los implementos por el aire con una gracia natural, pensaría que Nicole Torres Fuentes se crió con una malla junto a su cuna. Nunca se imaginarían, que hace apenas cuatro años que esta pequeña deportista de Penco conoció la disciplina de la que hoy, es una de las promesas en Chile.
Con sólo 10 años, la pequeña deportista perteneciente a las filas del Club Gimnasia Rítmica Región del Bío Bío, está pronta a protagonizar su segundo campeonato sudamericano, en Guayaquil.
A la cita clasificó como la número uno de Chile en la categoría Pre Infantil nivel Elite, por lo que en ella están puestas gran parte de las ilusiones de la selección nacional para regresar con una medalla desde tierras ecuatorianas.
La historia de Nicole con la gimnasia rítmica parte en 2013, cuando empezó a ver videos a través de YouTube. “Cuando era más chica quería hacer gimnasia artística, pero después de ver las rutinas de la rítmica me gustó mucho. A cada rato les mostraba los videos a mis papás y yo creo que ya los tenía cansados porque casi nos los dejaba tranquilos. Hasta que un día me llevaron a una escuela de gimnasia, ahí que parece que los convencí”, cuenta entre risas.
Dos años después, dio un paso que sería fundamental para consolidarse en la disciplina y marcar una base de calidad que le permitiría sustentar sus futuros logros. En 2015 ingresó al Club Universidad de Concepción, donde bajo las órdenes del joven entrenador Braulio Rodríguez, vivió una marcada evolución. “Me hizo muy bien el cambio, aprendí mucho con él porque me entregó el factor exigencia que quizás antes no lo tenía tan fuerte”, rememora.
Le sirvió también, según reconoce, la facilidad que tuvo desde siempre para este deporte en particular. “Me gusta mucho todo lo que tiene que ver con el baile, es súper lindo expresar lo que dice una canción. Eso creo que me simplificó aprenderme las rutinas, además que las ejecuciones tampoco me cuestan, estar en punta de pie, mantener los brazos estirados, no encorvarme o la elongación. Con el tiempo, incluso manejo mucho mejor los implementos, que antes me costaban bastante”, expresa.
Luego de un intenso trabajo, donde aprendió los principios de la gimnasia y en el que comprobó que era el deporte que quería para su vida, Nicole comenzó su etapa de competencias, donde rápidamente destacó. Primero a nivel del club, luego comunal, y posteriormente, convirtiéndose en gran exponente de la Región.
Aquello le permitió disputar el Selectivo Nacional de Puerto Montt el año pasado, donde sorprendió a todos para quedar tercera de Chile en la categoría Pre Infantil y clasificar a su primer Campeonato Sudamericano, que en esa ocasión se disputó en Paipa, Colombia, y donde se las arregló para rendir a gran nivel.
Este año, repetirá la experiencia, ya que nuevamente sacó pasajes para el torneo sudamericano, que en esta oportunidad tendrá lugar en Guayaquil, Ecuador, durante este fin de semana. Por si fuera poco, lo hizo como primera clasificada del país, para no dejar lugar a dudas de que es uno de los grandes proyectos chilenos.
Desde este 2017, Nicole pertenece a las filas del nuevo Club de Gimnasia Artística Región del Bío Bío, aunque con su mismo entrenador, Braulio Rodríguez, quien resalta la evolución mostrada por su pupila en el último tiempo.
“Que sea la mejor de Chile en su categoría es un tremendo mérito y se debe a que ella ha crecido en todo como gimnasta. Sus ejecuciones están mucho más limpias, y eso que tienen mayor dificultad, con series más complicadas que le hemos ido agregando. Es decir, hace cosas más difíciles y como le salen bien, entonces le da más puntaje. Tampoco hay que olvidar que ella es recién nivel Pre Infantil Elite, por lo que aún le falta Infantil y Juvenil, tiene mucho para crecer”, asegura.
En cuanto a su proyección, Rodríguez es claro. “En su categoría, a lo máximo que puede aspirar es un sudamericano, eso ya dice algo y da una idea de hasta dónde puede llegar Nicole en este deporte. Aunque como en todo, queremos ir paso a paso”, sentencia.
Probablemente, en este instante Nicole ya esté haciendo las maletas para el viaje que mañana temprano la llevará rumbo a Ecuador. Dice que está ansiosa, pero con la confianza de haber entrenado con todas sus fuerzas y tener en el cuerpo una experiencia internacional.
“Estoy un ‘poquito’ nerviosa, pero muy contenta de ir por segunda vez a un Sudamericano. Tengo ganas de que me vaya mejor que en el anterior, este año mi meta es quedar entre las ocho primeras y por qué no, ganar una medalla individual. Tuve un último mes de preparación con todo, lo aprovechamos 100 % con entrenamiento y eso me deja tranquila”, expresa la deportista.
El optimismo de Nicole se sustenta además, en lo que ella dice es un progreso que va notando todos los días. “La experiencia en mi nuevo club ha sido muy linda, aquí he crecido en todos los implementos. Estoy desarrollando más las manos libres, que se me hacía difícil, pese a que me sigue encantando el balón como siempre. Pero ahora estoy practicando mucho más aro y he podido mejorarlo mucho gracias al esfuerzo de mis entrenadores, que me corrigen y me ayudan a entender. Son exigentes, pero al mismo tiempo me hacen tener confianza, y sé que eso me llevará bien alto”, cierra la pequeña gimnasta, orgullo de Penco.