Con tres medallas de oro, tres de plata y dos de bronce, retornaron los representantes del Club Padre Hurtado, quienes se alistan para los selectivos de cara al calendario internacional.
Una actuación para enmarcar tuvo la delegación de ocho exponentes del Club de Atletismo del Colegio Padre Hurtado de Chillán, protagonista de una nueva versión del Nacional Metropolitano de Menores, que se desarrolló en el Estadio San Carlos de Apoquindo y el Estadio Nacional, en Santiago.
Los pupilos del técnico Samuel Caroca retornaron con ocho medallas desde el certamen, que sirvió como preparatorio para los próximos selectivos a campeonatos sudamericanos y mundiales, que partirán la próxima semana en distintos escenarios del país.
Pisando podios
Entre las mejores destacaron Catalina Irribarra, quien se colgó oro en el lanzamiento de la jabalina, plata en la bala y bronce en el disco. Lo mismo que Valentina Clavería, quien aportó dos importantes oros, en disco y martillo. Carolina Correa, en tanto, fue plata en el martillo, dejando el bronce en manos de su compañera, Rosario Vera. La última presea llegó por intermedio de Sergio Bravo, en el martillo masculino.
Un rendimiento que dejó satisfecho al entrenador chillanejo. “Hubo una ardua preparación, dado que este evento es la antesala de los torneos fundamentales que se vienen. Todos anduvieron bien, quizás la más llamativa fue Valentina, que tiene 14 años y venció a niñas de 16 y 17, haciendo su mejor marca personal con más de 53 metros en el martillo. En 2016 ella fue campeona sudamericana en disco y tercera en el martillo, así es que estamos bien encaminados este año para ir por el Suramericano de Surinam en diciembre”, manifestó Caroca.
Los ojos en el extranjero
Este 17 y 18 de junio, dos deportistas del Club Padre Hurtado participarán en el último selectivo de cara a los Juegos Sudamericanos de la Juventud, que serán en octubre en Santiago, y que antecederán a los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018.
Se trata de las preseleccionadas chilenas, Catalina Irribarra y Rafaela Ramírez, quienes vienen haciendo un trabajo en conjunto con el Coch, viajando a Sao Paulo y el norte de Brasil. A juicio de Caroca, ambas tienen opciones de meterse en el certamen. “Rafaela ya hizo la marca el año pasado (1,63) y ahora tiene que ratificarla, aunque estuvo dos meses lesionada con un desgarro. Y Catalina hizo muchas veces la marca este año, le piden 42 metros y tiene cerca de 46, así es que estamos esperanzados”.
Pero no son las únicas que apuntan alto. Junto a ellas, resaltan nombres como Carolina García, egresada del colegio y quien entrena en Santiago. Y la galardonada Catalina Bravo, quien se mantiene en el club chillanejo, y por estos días está trabajando en Argentina junto al reputado entrenador, Sergio Alfonsín. “Ella clasificó a los Panamericanos Juveniles que serán a fines de julio en Trujillo, Perú y está reforzando el trabajo técnico de muchos años, donde ha logrado el récord chileno del disco en las categorías Cadete, Menor y Juvenil”, cerró Caroca.
El semillero del Colegio Padre Hurtado de Chillán
Una larga tradición tiene el Colegio Padre Hurtado como forjador de nuevas figuras para el deporte regional, trabajando el ámbito formativo sin descuidar a los talentos.
Ejemplos sobran. La lanzadora de martillo, Carolina Correa, es preseleccionada chilena para el Mundial de Nairobi (Kenia), lo mismo que Rosario Vera. Está María José Nova, quien en 2016 fue cuarta en el Nacional y ahora apunta al Sudamericano Escolar junto a Sergio Bravo, que espera clasificar en varias pruebas de lanzamiento.