Largos años y varios gobiernos han sabido de la necesidad de un centro de alto rendimiento para la Región, ese del que aún no se ve una piedra en pie ¿En qué marcha el proyecto?

 

Corría noviembre de 2010 y la entonces intendenta, Jacqueline van Rysselbergue, hacía un anuncio histórico: la construcción de un centro de alto rendimiento (CAR) para la Región. En la ocasión, la hoy senadora decía contar con pleno apoyo de Gabriel Ruiz-Tagle, a la sazón subsecretario de Deportes, quien proyectaba el inicio de las obras para el año siguiente. 

El lugar escogido para su construcción no era menor, ya que sería el Estadio Atlético Militar quien albergaría la obra, de fructificar las conversaciones con el Ministerio de Defensa y el Ejército. Llegado 2011, Ruiz-Tagle insistía en la idea, sumando a la opción del Estadio Atlético, el Coliseo La Tortuga y Punta de Parra como los posibles espacios para levantar el proyecto, cuyo símbolo mayor era una piscina semiolímpica.

La actual presidenta de la UDI recuerda el proceso y explica por qué no prosperó. "Efectivamente, lo que nosotros hicimos fue recoger el sentir de los deportistas. Y en mi caso tiene que ver con una historia de vida, me gusta el deporte, fui atleta de joven y por tanto siempre entendí que era, y es tremendamente injusto que el sur de Chile no tenga un centro de alto rendimiento. Lamentablemente, es probable que las urgencias y prioridades del momento fueran distintas y por eso no se siguió avanzando", sostiene Van Rysselbergue.

Un nuevo intento

 

Más de dos años pasaron para que, en octubre de 2013, reflotara el tema, esta vez encabezado por Víctor Lobos y Javier Puentes, en aquel tiempo intendente y director regional del IND, respectivamente.

En esa ocasión, el sitio designado para su emplazamiento era junto a la planta de agua La Mochita, en medio del Parque Deportivo Borde Río, una iniciativa impulsada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) para recuperar terrenos eriazos.

Como valor agregado de la obra destacaba una pista atlética techada, que sería la primera pista indoor de Chile, además de una piscina olímpica. Mientras que en cuanto a tiempos, se quería iniciar la construcción en 2015 para así contar con el recinto de cara a los Juegos de la Araucanía Bío Bío 2016. 

Claro, un detalle no menor era que el anuncio se hacía poco más de un año antes del término de la administración del Presidente Sebastián Piñera. Así, sería el gobierno de Michelle Bachelet (asumida el 11 marzo de 2014) el encargado de sacar adelante el grueso de la obra.
 

 

La última propuesta

 

Quien tomó la posta del proyecto fue Álvaro Miguieles, que a poco de ser oficializado como seremi del Deporte el 14 de marzo de 2014, afirmó que una de sus tareas prioritarias sería sacar adelante el proyecto.

Aquello trasuntó en que, pese a la ardua labor que le significó la reconstrucción del Estadio Ester Roa, paralelamente reiniciara las conversaciones con el Gobierno Regional para consensuar respaldos al recinto. Lo que se vio reflejado en las palabras del intendente Rodrigo Díaz en diciembre de ese año, cuando anunció el proyecto. "Le pedimos al Ministerio de Bienes Nacionales que ponga a nuestra disposición un terreno que reúna las condiciones para construir un CAR", dijo en la ocasión.

El aviso de Díaz tuvo su respaldo con la visita que la nueva ministra del Deporte, Natalia Riffo, hizo a la zona en enero de 2015, ocasión en que alentó la iniciativa. "(…) Favorecerá la descentralización. Estamos evaluando el tema del terreno, diseño y recursos, siempre en el entendido de que Bío Bío debe tener un centro de primer nivel", anticipó.

Sin embargo, debió pasar un año para que las autoridades se pronunciaran otra vez al respecto, aunque esta vez parecía ser definitivo; incluso había nombre y terreno nuevo para la edificación del recinto. Así lo indicó Álvaro Miguieles en marzo de 2016, cuando sostuvo que, "oficiamos al intendente con el propósito de que pronto ingrese el proyecto del Centro Polideportivo del Bío Bío al Ministerio de Desarrollo Social (Mideso) para que nos dé la RS (Recomendación Satisfactoria). Los plazos son relativamente acotados y cuando tengamos la RS, podremos someter al Consejo Regional la aprobación de los recursos para el estudio de diseño del complejo", indicó.

Se dijo que el estudio costaría $580 millones, mientras la obra total alcanzaría los $15 mil millones. Se resaltaba, además, que el IND se comprometía al financiamiento de los gastos de operación y mantención del Centro Polideportivo del Bío Bío, de aprobarse los dineros para las obras.

En cuanto al lugar, el Ministerio de Bienes Nacionales daba en concesión gratuita por cinco años, una superficie de 3,3 hectáreas en el acceso norte a Chiguayante, frente a Lonco. Se anunciaban así, 10.600 metros cuadrados de superficie construida, con las siguientes áreas: gimnasio polideportivo "A" principal, para disciplinas colectivas como hándbol, vóleibol y básquetbol (con graderías); gimnasio "B" para deportes individuales como gimnasia y artes marciales; piscina semiolímpica temperada con graderías para 500 personas; gimnasio de acondicionamiento físico, musculación y otros; albergue para deportistas; instalaciones para apoyo multidisciplinario al proceso deportivo; baños; duchas, y camarines.

Meses después, en junio de 2016, se mantenía el proyecto en el Mideso, mientras el seremi del Deporte aplazaba para 2018 la ejecución de las obras. Aún así, en septiembre se daba otro paso clave con la firma del "compromiso de voluntad" por parte de las asociaciones deportivas de la Región, requisito fundamental del MDS.

Pero ¿y dónde está el CAR?

 

Así transcurrió 2016, sin avances concretos en la iniciativa. Situación que, para inquietud de muchos, parece repetirse en este 2017, agudizado por la salida del seremi del Deporte, Álvaro Miguieles, férreo promotor. 

La única excepción este año, corrió por cuenta del apoyo entregado por el actual ministro del Deporte, Pablo Squella, quien en su visita de enero señaló a Diario Concepción que, "(el CAR) es un proyecto que me identifica como ministro y deportista. Si aspiramos al desarrollo que tiene el alto rendimiento en el mundo, necesitamos mejorar la infraestructura y tener espacios para que los deportistas se desarrollen. Por tanto, esta Región merece un Car de las mismas características o mejores que la Región Metropolitana". 

A juicio del director regional (s) del IND, Mario Moreno, eso basta para confiar en que la iniciativa verá la luz. "Es cierto que no se ha avanzado en la construcción, pero es porque todavía estamos en proceso de obtención del RS por parte del Mideso, algo que esperamos ocurra en el transcurso de este semestre, para luego entrar a la etapa de diseño".

Consultado sobre el extenso tiempo que lleva la ficha técnica en espera de la RS, Moreno explicó las razones. "Pasa que la metodología del Mideso es bastante exigente, y se entiende por tratarse de un proyecto inédito por el tipo de infraestructura específica. Será un centro de desarrollo deportivo que albergará a los exponentes que parten su etapa de preparación para las competencias, pero también para los que se inician en la alta competencia", precisó.

Según Moreno, aquello no significa que el IND esté pasivo con el tema. "Hemos hecho una serie de ajustes al proyecto para cumplir con las exigencias, dando respuesta a las observaciones y estando en permanente comunicación con el Mideso. Ha sido un trabajo entre el IND, su equipo de profesionales de inversiones y actividad física, la secretaría del Ministerio del Deporte (Mindep) y también el Gobierno Regional (Gore), y su Consejo. Sin esta coincidencia de esfuerzos, es poco probable que pudiésemos haber avanzado, aunque reconozco que quizás no con la velocidad que muchos quisieran", señaló.

"Aún así -continuó- estamos optimistas. Hace semanas nos reunimos con el analista de la secretaría del Mideso y tenemos razones para confiar en que en los próximos meses deberíamos obtener el RS que nos permita presentar el proyecto al Core y obtener los recursos para el diseño. Si logramos contratar el diseño en el segundo semestre de este año, es probable que a mediados o en el segundo semestre de 2018, se pueda estar pensando en licitar la construcción".

En la misma sintonía se expresó el intendente regional, Rodrigo Díaz, quien dio un voto de confianza a la construcción del polideportivo del Bío Bío. "Tal como dijimos que íbamos a tener Copa América, pese al evidente retraso que tenía el estadio Collao cuando asumimos el Gobierno; tal como cumplimos con dotar a Ñuble de un estadio atlético, que esperaba hace muchos años; tal como construimos un polideportivo en Laja, impulsando la descentralización de la infraestructura deportiva, pido que crean en el compromiso del Gobierno para desarrollar este proyecto tan anhelado. Vamos a dejarlo encaminado, con su diseño terminado y listo para que se inicie la construcción y se inaugure en la próxima administración", aseguró.

Respaldando sus palabras está, según Díaz, "nuestro apoyo, el del Ministerio de Bienes Nacionales, Ministerio del Deporte y del Consejo Regional del Bío Bío. Porque entendemos que es importantísimo construir la infraestructura necesaria para que nuestros deportistas no tengan que irse de la Región, y para poder tener entrenamientos que estén a la altura de sus capacidades", sentenció.

Explicación de Desarrollo Social

 

Desde el Mideso, entregaron los fundamentos técnicos que aclaran las dudas sobre los tiempos del proceso. "Actualmente, se está trabajando en el proyecto, que tiene Rate Fi (Resultado de Análisis Técnico Económico con Falta de Información). Se trata de una experiencia inédita a nivel regional, por lo tanto, ha significado un intenso trabajo para conseguir perfeccionarlo, desde su ingreso a la fecha". 

En ese sentido, sostienen que, "las últimas observaciones realizadas tienen relación, fundamentalmente, con la justificación de los espacios que considera la obra. Es decir, áreas administrativas, casinos, salud, alojamiento, graderías. También se solicitó justificar el número de deportistas con el que se construye la demanda del proyecto. El último Rate es del 28 de febrero de este año. Las observaciones realizadas en esa oportunidad, fueron las mismas que en el proceso anterior de diciembre de 2016, ya que según se indica en el reporte del proyecto, no se ingresaron antecedentes nuevos que den respuesta a las observaciones para este proceso presupuestario", indicaron.

Finalmente, desde el Mideso advirtieron que los ciclos dependen de cómo se presente un proyecto. "Los tiempos son independientes, dado que se realiza un análisis exhaustivo de cada proyecto, de manera que se zanjen dudas y queden todos los requerimientos cubiertos para poder dar los RS, ya sea a etapa de diseño o ejecución. El tiempo para otorgar el RS depende que el organismo que lo presenta cumpla con todos los requisitos técnicos que el proyecto amerita y que son analizados por el sectorialista".

Consejo Regional a la espera

 

Si hay una entidad que se vio involucrada desde el comienzo con la iniciativa, es el Consejo Regional del Bío Bío, principalmente a través de la presidenta de la Comisión de Desarrollo, Alicia Yáñez, para quien el proyecto goza de un apoyo transversal. 

"Es de las pocas instancias que nacieron a partir de una propuesta que se hizo al interior de la Comisión de Desarrollo Social, dada la demanda de los deportistas locales por la falta de espacios para practicar deportes de alto rendimiento. Es un proyecto que lo fuimos construyendo desde el ejecutivo, cuando el intendente dijo ‘tratemos de hacerlo’. Es cierto que ha demorado en el Mideso, pero es porque se trata de un proyecto innovador, y el hecho que haya nacido en el seno del Gore, le da más valor porque habla de descentralización", expresó.

Aun así, para la consejera es clave que la RS salga en un tiempo prudencial para mantener así el apoyo al proyecto. "El Consejo ha estado involucrado en el tema, los antiguos consejeros lo mantenemos en carpeta año a año. El problema es que se ha enfriado en el último tiempo y eso me tiene un poco preocupada, porque al final pasa el tiempo y ya estamos en mayo. Pero confío en mis colegas, estos consejeros recorren y cuando lo hacen ven que la necesidad de los deportistas de Florida, Santa Juana, San Pedro, Coronel y las demás comunas. Cuando pasemos a la etapa de ejecución, significará inmediatamente otro compromiso, donde sabemos que contamos con el apoyo del Consejo, el ministro y las autoridades que se la han jugado, porque están conscientes que este proyecto no puede morir".