Constanza Alarcón cuenta cómo es el fútbol cuando no puedes oír a tu alrededor.
Constanza Alarcón cuenta cómo es el fútbol cuando no puedes oír a tu alrededor.
Dice que se identifica con Eduardo Vargas y cuando la ven caminando con su camiseta amarilla muchos ya la reconocen. Constanza Alarcón representa al equipo de fútbol del DuoC, pero también es la encargada de realizar un taller de lenguaje de señas que suma y suma adeptos. Y para ella, ese mundo es apasionante. La "Nony" conoce bien los problemas de la gente sorda, aunque ella ha logrado que el inconveniente deje de serlo, al menos por 90 minutos.
"Desde muy chica me gustaba el fútbol, pero nunca me metí a practicar mucho porque a mi familia no le gustaba tanto. A los 18 años ya me metí a jugar más en serio, me encanta hasta ahora y se dio esta oportunidad en el DuoC, donde he aprendido mucho", asegura con una sonrisa.
Entiende perfectamente el movimiento de los labios, si le hablan bien modulado y claro. Constanza cuenta que "practico fútbol dos o tres veces a la semana para ir aprendiendo e intentar ser mejor. Hemos hecho un buen grupo, compartimos mucho con las compañeras y ellas me tienen mucha paciencia porque a veces la profesora tiene que explicarme bien cómo se hace algún ejercicio. Me tienen que explicar un poco más sencillo porque si hablan rápido no siempre entiendo".
Y aunque nunca se ha escuchado hablar, se nota que ha perfeccionado bastante su dicción y se da a entender correctamente, aunque un poco más balbuceado. "De todas formas, no creo que el lenguaje sea un problema para jugar el fútbol, hago los trabajos sola y en pareja como cualquier otra y en la cancha somos todas iguales. Recuerdo un partido con lluvia y harto ruido, que no escuchaba nada las instrucciones de la profesora, pero me indicaba con las manos y todo bien. Al final, entendí igual", relató.
Cómo te explico…
Constanza ha practicado natación, básquetbol y otras disciplinas, ya que es amante del deporte en general. Vivió 15 años en Punta Arenas y se vino el 2012 a Concepción, por el trabajo de su papá.
Actualmente, cursa segundo año de Administración de Empresas y cuenta que "me encanta la carrera, que está muy relacionada con la Ingenería Comercial.A mí familia también le gusta. El fútbol, como te decía no tanto, pero eso era más al comienzo… A la larga, me han apoyado harto y ahora van a verme a la cancha. He hecho hartos goles y el verano me tocó marcar el gol más lindo de los que recuerdo. Siento que cada día voy aprendiendo y el fútbol y mi carrera me tienen motivada".
Pero hay un área que le interesa de sobremanera. "Tres veces a la semana hago un taller de señas, o sea, lunes, miércoles y jueves. Eso es muy importante para mí porque no es solo para personas sordas. En muchos lugares y profesiones sería bueno que supieran el lenguaje de señas. Las cosas serían más fáciles. En hospitales, por ejemplo. Acá en el taller hay gente de distintas carreras y cerca de veinte personas participan", comentó.
Y es que lo suyo en el DuoC parece una excepción. Constanza aseguró que "las personas sordas tenemos, generalmente, muchos problemas para estudiar. Se te hace más difícil leer y escribir, manejar palabras, y terminar la Enseñanza Media ya es algo bien difícil. No hay muchos sordos en la universidad. Terminan la carrera y tienen que entrar a trabajar al tiro, en cosas más simples. Esa es la realidad".
Por eso, vuelve a sonreír, alza la vista y afirma que "mi sueño es jugar, pero sobre todo ser una profesional y que todo el mundo aprenda el lenguaje de señas para que en todas las disciplinas y profesiones no sea una dificultad. También sueño viajar mucho. Me encanta".