De los cuatro deportistas regionales con opciones para clasificar a Londres 2017, el maratonista de Concepción, Manuel Cabrera, se bajó por falta de recursos económicos. El certamen se llevará a cabo entre el 5 y el 13 de agosto.

 

Pese a que la época estival es el momento donde la gran cantidad de los chilenos aprovecha para descansar, hay un grupo de personas que no ha parado de trabajar.

O de entrenar, si se quiere, porque se trata de una veintena de deportistas de elite chilenos que están en carrera de cara al Campeonato Mundial de Atletismo, que se llevará a cabo en Londres en agosto próximo.

De ellos, tres son de la Región del Bío Bío: Isidora Jiménez, Víctor Aravena y Daniel Pineda, quienes en los meses que siguen se estarán jugando buena parte de la temporada. Y pudieron ser cuatro, si es que el maratonista Manuel Cabrera no se viera obligado a dejar la actividad, tras varios intentos fallidos para recibir apoyo.

Así va la ruta

En total, son 18 los atletas criollos que están esforzándose desde hace meses para llegar al tope de sus condiciones a las primeras competencias del año, que en varios de los casos partirán con el circuito de Grand Prix Orlando Guaita.

La meta a nivel nacional es superar el número de clasificados en las últimas dos citas mundiales, que se redujo a seis en cada una (Moscú 2013 y Pekín 2015). Y visto en términos generales, el trayecto marcha bien, porque la mitad de esa cifra ya está cumplida. Primero, con los hermanos Yerko y Edward Araya, que en sus registros personales ostentan con las marcas mínimas en la marcha. 

Yerko, en los 20 kilómetros, donde tiene como mejor crono 1 hora 21’26" (marca mínima de clasificación de 1 hora 24’). Y Edward en los 50 kilómetros, donde exhibe una marca de 3 horas 58’24" (mínima de 4 horas 16’).

A ellos se suma el coronelino Víctor Aravena, que con 2 horas 16’ 19’’ cumple con la marca mínima de clasificación (2 horas 19’) que tiene el derecho a revalidar. Sin embargo, su elección de volver a los 5.000 metros planos, hará un poco más duro el camino al Estadio Olímpico de Londres.

El Correcaminos del mineral vuelve a su prueba favorita

Podría tomar el camino fácil y competir en el maratón de Londres, donde ya está clasificado. Sin embargo, como buen minero, Víctor Aravena es un hombre de esfuerzo, que no le saca el pecho a los desafíos que le pone la vida.

Y también es de convicciones, por lo que decidió retornar a su prueba más querida, aquella que le ha dado las mayores alegrías como el bronce panamericano.

El coronelino intentará clasificar al Mundial en los 5.000 metros planos, donde tiene como mejor registro 13’46”94 frente a los 13’22”60 que se exige para el torneo.
Pero aunque no haga la mínima si consigue revalidar su título en el Sudamericano de Ecuador clasifica directamente.

 

“Isi” y la oportunidad para tener su revancha de Río 2016 

Poco y nada de acción vio Isidora Jiménez luego de su regular actuación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La velocista, que compitió en los 200 metros planos, resultó quinta en su serie de clasificación con un crono de 23’’.29 (lejos de su mejor marca personal de 22”95), finalizando en el puesto 41° de la clasificación general.

Al Mundial de Londres intentará buscar un lugar en los 100 y 200 metros planos, cuyas marcas mínimas de clasificación son de 11”26 y 23”10, respectivamente. Tiempos que no están para nada fuera de la órbita de la atleta penquista, quien exhibe como mejores cronos 11”33 y 22”95 en ambas pruebas.

Jiménez buscará pasajes en el GP Orlando Guaita, el Nacional y el Sudamericano de Cuenca.

 

Manuel Cabrera: otro más que se cansó de mendigar

No se trata de soberbia. Aquí hablamos del amor propio de un hombre que consiguió cada cosa en su vida a base de esfuerzo. Y que cuando necesitó un empujón para desarrollar su gran potencial, vio cerrada todas las puertas.

Manuel Cabrera, el mismo que estuvo a 56 centésimas de clasificar al maratón de los JJOO de Río, deja de lado las pistas. Dice que así no puede seguir, pero que se va en silencio, tal como llegó.

 “Tengo dos hijas y no las puedo dejar sin comer por gastarme la plata en viajes, alimentación especial y eso.  Cuando llevas años pidiendo, aburre. Uno no entrena bien, se endeuda para lograr cosas y ya no quiero seguir amargándome”, dice a modo de despedida quien ahora se dedicará de lleno a su exitosa labor de entrenador.