Burgos se ha transformado en buena figura del ancla. El nacido en Villa Mora habló de su fuerte vínculo con Lota Schwager, su rival del sábado en un nuevo clásico de Segunda.
Burgos se ha transformado en buena figura del ancla. El nacido en Villa Mora habló de su fuerte vínculo con Lota Schwager, su rival del sábado en un nuevo clásico de Segunda.
Paulo Inostroza
paulo.inostroza@diarioconcepcion.cl
Está entusiasmado con la campaña de Naval, pero le hablan de Lota Schwager y, de inmediato, le brota una sonrisa. "No puedo desconocer que le tengo gran cariño", confiesa Alexis Burgos. Ambas escuadras medirán fuerzas este sábado, desde las 16 horas, y jugarán en el estadio Bernardino Luna, con un aforo máximo aun por definir.
"Soy de Villa Mora, que queda al lado del estadio. Es divertido porque todas las mañanas viajo desde allá a Talcahuano para entrenar y el sábado me iré caminando a la cancha. Estoy ahí a la vuelta. Soy el único de Naval que no jugaré de visita", expresó el defensor.
Aunque no es primera vez que lo vive. Burgos cuenta que "el año pasado me tocó lo mismo cuando jugaba por Melipilla. Me gritaron un par de cosas, pero se entiende. Le tengo cariño a Lota, jugué ahí y este clásico no es un partido más. Lota y Naval son los equipos con más historia en esta división y es un clásico que hace poco se jugaba en la B y antes en Primera. Hay mucha historia detrás y ojalá ambos clubes vuelvan a ser tan grandes como fueron".
Tal vez era mejor pillarse con Lota hace dos semanas, cuando era colista y no había ganado un solo partido. Ahora es otro equipo. "Repuntaron, pero no es sorpresa. Yo sabía que Lota iba a encontrar su ritmo en algún momento, más allá del 8-0 en Santa Cruz. Tienen buenos jugadores y llegarán aleonados. Ganaron su primer partido y, además, sumaron tres puntos por secretaría. A eso agrégale que es un clásico y quieren ganarlo. Va a ser un lindo partido porque nosotros también venimos bien y queremos meternos más arriba", señaló.
Los sin nombre
Burgos tuvo que esperar mucho para tener su oportunidad y le tocó en el 2-0 en cancha de Malleco. Desde ahí, tres partidos como titular y tres triunfos.
"En algún momento me tenía que tocar. Estuve hartas fechas sin jugar, pero trabajé mucho para tener mi oportunidad. Naval ha cambiado hartas piezas, como en defensa o, incluso, el arquero. Como sea, el equipo sigue funcionando igual porque sabe a qué juega", apuntó.
Un sello del Naval de Correa es su orden defensivo. Burgos explicó que "se tiende a pensar que la defensa son los cuatro de atrás, pero acá la defensa parte con Almendares y el ‘Mati’ (Sanhueza). Somos uno de los equipos con menos goles en contra (cinco) porque hay un compromiso de todos por defender. Tampoco me sorprende dónde estamos y deberíamos ir más arriba, aunque no tengamos jugadores de renombre, salvo Salgado, Suazo y Almendares. Los demás somos todos obreros y lo sabemos, pero es mejor tener un equipo que tantos nombres".
Y eso que les ha tocado duro. "Nos golpeó lo de los sueldos y después la resta de puntos, que es algo que trae problemas personales y a la casa de cada uno, pero en la cancha dejamos eso de lado. En cada partido nos jugamos nuestro futuro y es mejor pensar que lo económico se va a solucionar y preocuparnos de ganar", aseguró.