Técnico chorero tuvo números oscurísimos en la campaña pasada, pero este semestre ha hecho mucho con muy poco. Hoy se ve un ancla con ideas claras, pese a los problemas económicos.

 

Paulo Inostroza
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El semestre pasado fue duramente criticado, pero nunca se escondió y fue siempre autocrítico. Óscar Correa tomó Naval cuando estaba en los primeros puestos y el equipo se fue a pique. Sus números fueron apenas 10 de 39 puntos posibles para un pobre 25,6 por ciento de rendimiento. Algunos pedían su cabeza, pero la dirigencia lo ratificó para esta campaña y la historia ha sido muy distinta: consiguió el 57,2 por ciento de los puntos y tiene a Naval a solo dos unidades del puntero de la Zona Sur. Falta mucho torneo, pero de a poco, el odio del hincha se transforma en respeto.

El delantero Matías San-hueza comentó que "en algún momento, claro que uno no lo veía bien, porque a nadie le gusta recibir tanta crítica, pero siempre trabajó igual, cuando no se nos daban los resultados y también ahora. Lo más distinto es que la vez anterior agarró un plantel que ya estaba armado y tuvo que acomodarse. Ahora tiene un grupo que eligió él y lo hizo privilegiando la juventud, sin grandes nombres ni jugadores de tanta trayectoria y dentro de las posibilidades de Naval".

Y los elogios para el actual Naval van más allá de los números. En las derrotas ante Santa Cruz y Cauquenes hubo mucho de injusticia. El "Mati" señala que "hemos jugado bien en seis de los siete partidos y no es poco. Sí me da un poco de lata pensar que podríamos llevar más puntos e, incluso, ir primeros en la tabla. Vemos las posiciones y no nos sentimos demasiado conformes. Además, sabemos que este torneo recién comienza y no puede pasarnos lo del año pasado, donde partimos muy bien y terminamos mal. La tarea es seguir con este mismo rendimiento hasta la última fecha".

El último 4-1 sobre el ex líder Independiente de Cauquenes fue otra buena expresión de lo que es este Naval, que se genera muchas ocasiones de gol, pero estaba teniendo problemas en la definición. "Si no llevamos más puntos es por no concretar o un poco de mala suerte", apunta Sanhueza.

El otro partido

Pero fuera de la cancha las cosas no andan bien y el ‘profe’ Correa ya aseguró que no quiere excusarse por anticipado, pero advirtió que "la gente no sabe lo difícil que es trabajar con los problemas que tienen estos jugadores". Y se refiere a los sueldos que aun no se completan y debieron pagarse hace más de dos semanas. Anoche, Naval esperaba la resta de 3 puntos desde la capital.

Para colmo, solo mil personas llegaron a El Morro el último sábado. Ojalá mañana, ante Colchagua, sea distinto. El equipo está respondiendo y necesita a su gente.