Hinchas de D. Concepción alentarán cerca de una hora a un equipo que no estará en cancha. Pretenden llevar 5 mil personas a la Galería Sur.
Hinchas de D. Concepción alentarán cerca de una hora a un equipo que no estará en cancha. Pretenden llevar 5 mil personas a la Galería Sur.
Paulo Inostroza
paulo.inostroza@diarioconcepcion.cl
Marcharán desde el edificio de tribunales, seguirán por Carrera y llegarán al Ester Roa Rebolledo. Este domingo, las puertas del estadio se abrirán como si hubiera fútbol. La hinchada de D. Concepción se ubicará en la Galería Sur, con todo el operativo de Carabineros y guardias privados resguardando la seguridad. La cancha estará marcada, las mallas puestas y las pantallas LED. Todo, menos el equipo en cancha. El fútbol no está, pero su gente y la ciudad no se han ido. Clarito.
El presidente del Club Social, Víctor Tornería, comentó que "vamos a mostrarle a la Anfp y al país que están la cancha y el hincha, pero nos falta el fútbol. Todo esto, quedará registrado en un documental". La producción lila contará con un dron y será a varias cámaras. Incluso, siguiendo a familias desde que salen de sus casas.
Daniel Ramírez está movilizando a la hinchada y expresó que "esto es tan inédito que en la municipalidad ni siquiera había contemplado un precio para un evento de este tipo. ¡Nunca se hizo algo así! Esperamos 4 o 5 mil personas cantando el domingo, desde las 15 horas". A las 18 horas será la retirada. Hasta el bombo estará presente.
Tornería agregó que "teníamos una planificación de muchas cosas, como Club Social, que inicialmente estaban contemplada para realizarse en nuestro primeros 10 meses, pero lo hemos logrado en apenas 6. De todas formas, queda mucho por hacer. El domingo, se abrirá el libro de socios y habrá 10 mesas realizando inscripciones para el Club Social. En 5 meses más hay elecciones".
Carabineros, el alcalde penquista Aldo Mardones, su antecesor Álvaro Ortiz y la encargada de seguridad de la Gobernación, Angélica Retamal, estuvieron presentes en el lanzamiento de este evento sin precedentes en el fútbol chileno, que significó varios días de coordinación. La familia morada prepara una nueva oleada y, seguramente, no será la última.