Bárbara Riveros, Víctor Aravena y Ricardo Soto fueron los únicos que mostraron un buen rendimiento, y de ellos solo la primera tenía cierta presión. En cambio, Tomás González, Isidora Jiménez, Natalia Duco y Kristel Köbrich no se acercaron a sus mejores marcas. ¿Qué falta para competir en la elite mundial?
Bárbara Riveros, Víctor Aravena y Ricardo Soto fueron los únicos que mostraron un buen rendimiento, y de ellos solo la primera tenía cierta presión. En cambio, Tomás González, Isidora Jiménez, Natalia Duco y Kristel Köbrich no se acercaron a sus mejores marcas. ¿Qué falta para competir en la elite mundial?
Daniel Kuschel D.
daniel.kuschel@diarioconcepcion.cl
Mucho se ha hablado del rendimiento de los atletas chilenos en Río de Janeiro, con performances inesperadas como el del arquero Ricardo Soto, mejores de lo esperado como la triatleta Bárbara Riveros y Víctor Aravena, y algunos que en lo deportivo no estuvieron a la altura, como lo hecho por Isidora Jiménez, Francisca Crovetto o la misma Kristel Köbrich.
Más allá del esfuerzo que cada deportista pone y que no está en duda (de otra forma no hubiesen llegado a unos Juegos Olímpicos), sus rendimientos dejan interrogantes como ¿Qué meta debe ponerse un deportista en una cita de este nivel? ¿Cómo debe manejar la ansiedad y los nervios para que esto no influya en su rendimiento?
Las opiniones en ese sentido son diversas, algunas con más fundamentos, mientras que otras ligadas directamente a la pasión.
El ex atleta Sebastián Keitel, uno que sabe de competencias de alto nivel parte estableciendo una base. "Lo primero que hay que plantearse es quién es uno para exigirle algo a los deportistas, porque todos ellos han trabajado mucho para llegar donde están. Ahora, lo que no comparto es que lleguen a la meta echándole la culpa al Estado, a los periodistas o a los opinólogos de su rendimiento, y que finalmente no tengan un poco de autocrítica", comenta.
"Hoy, hay un Estado que les financia gran parte de lo que hacen. Los quisiera invitar 20 años atrás para que vieran como teníamos que luchar con lo mínimo", agrega el ex velocista.
En lo que respecta a la preparación de la competencia, Felipe Cárdenas, uno de los principales exponentes regionales del remo y que acaba de vivir la cita olímpica en Brasil, deja claro que el roce internacional previo es muy importante.
"Todos los deportistas ya han competido en mundiales y más o menos ya saben cómo es el cuento. Yo estaba más ansioso que nervioso, porque no es que haya sido más de lo mismo, pero la experiencia en este tipo de citas te ayuda mucho", indica.
El remero puntualiza también que la meta es personal, pero que en su opinión siempre se establece en el mejor rendimiento obtenido. "En nuestro caso, tenemos claro nuestro lugar y la idea es partir de ahí hacia arriba. Si estamos 15, que nadie nos quite eso y de ahí para arriba todo es bienvenido", puntualiza.
Ahora, los deportistas tienen muchos factores que manejar, y para ello, en palabras de Ketty Hammersley, entrenadora de nivel internacional en gimnasia rítmica, es importante el equipo interdisciplinario con el que debe contar el deportista.
"Detrás de cada atleta tiene que haber un staff, donde debe haber un sicólogo, un kinesiólogo, un preparador físico y su entrenador como mínimo", señala la también directiva de la gimnasia rítmica de la UdeC. "La preparación sicológica, social y nutricional es muy importante", agrega.
¿Cómo mejorar?
Si bien hay disciplinas que han subido mucho su nivel, dejando de lado algunas excepciones como el gimnasta Tomás González y la misma Bárbara Riveros, son muy pocos los deportistas que pelean en la elite mundial de sus disciplinas.
En ese sentido, dado que la inversión económica ha aumentado bastante, en el entorno deportivo coinciden en que hay dos puntos esenciales que mejorar, siendo el primero de ellos la capacitación a los entrenadores.
"El gran problema que existe actualmente está en la capacitación a nuestros entrenadores, porque estos son técnicos de colegios que intentan mejorar sus conocimientos por voluntad propia y con recursos propios", indica Sebastián Keitel, argumentando también que "esto es un aspecto muy acotado. Son muy pocos los que pueden irse a Europa a estudiar uno o dos años, y es muy difícil que se desarrollen los conocimientos, porque no tienen con quién hacerlo".
Ketty Hammersley comparte la opinión, ejemplificando con el caso de su deporte a nivel nacional. "En gimnasia rítmica, por ejemplo, somos sólo 14 entrenadores nivel uno en todo el país, y ahora recién sólo dos fuimos elegidas para un curso en El Salvador para hacer el nivel dos. Como país a nivel técnico estamos muy atrasados, porque a estas alturas deberíamos tener mucha más gente preparada", explica.
Para Felipe Cárdenas, es necesario que los deportistas tengan la opción de entrenar con la mejor gente. "En nuestro caso el entrenador es español (Bienvenido Front) y es un excelente técnico. En Chile los nacionales no tienen mucha experiencia, porque generalmente no les dan las oportunidades", indica.
Sebastián Keitel agregó también el segundo punto flaco de nuestro desarrollo deportivo: la infraestructura, hoy focalizada en la Región Metropolitana. "Tiene que haber un centro de alto rendimiento en cada región. Si los gobiernos pueden construir tantos estadios, por qué no construyen 15 centros de alto rendimiento en cada capital regional del país", puntualizó el ex atleta nacional.